El Estudio Sara Torrijos renueva un chalet con un diseño interior magistral en Madrid
El Estudio Sara Torrijos ha llevado a cabo el proyecto de interiorismo, decoración y amueblamiento integral de un chalet adosado de obra nueva en Boadilla del Monte, una zona residencial de lujo en Madrid. Con una superficie de 280 metros cuadrados distribuidos en tres plantas, el estudio ha transformado esta vivienda en un hogar con una fuerte personalidad en tan solo un mes de ejecución.
Partiendo de una base blanca y vacía, la empresa se centró en dotar a la casa de una nueva identidad mediante un diseño cuidadoso y una selección meticulosa de piezas decorativas y mobiliario. “Sus propietarios querían convertir la casa en hogar, por ello nuestra labor fue identificar aquello que les representaba y conseguir confeccionar un traje a medida”, explica Torrijos, la arquitecta y fundadora del estudio al cual se le encargó el proyecto.
A través de esta estrategia de trabajo, la vivienda ha conseguido fluir en un ambiente alegre, acogedor y sofisticado, con toques vivos de color y un enfoque centrado en la practicidad. Como en muchos hogares, la importancia reside en los detalles y esta propuesta no es una excepción. Empleando el uso de molduras para dar profundidad, espejos para agrandar las estancias y celosías para delimitarlas, el resultado ha sido una vivienda con un fuerte carácter, sin sacrificar en ningún momento la funcionalidad y la comodidad.
El Estudio Sara Torrijos ha utilizado grandes dosis de color y ha mezclado magistralmente piezas de mobiliario y decorativas, para dar a esta casa de grandes dimensiones una fuerte personalidad.
Una zona de día acogedora y funcional
El objetivo principal en la zona de día era crear espacios familiares que invitaran a pasar tiempo en ellos. En este sentido, cada detalle ha sido trabajado y perfeccionado a fondo, integrando en el hogar elementos textiles como cortinas de suelo a techo y alfombras de formas geométricas que contribuyen al proyecto estético aportando calidez. Asimismo, la paleta de colores se complementa con pinceladas de amarillo y verde, que contrastan con los tonos en blanco y negro, generando ritmo y movimiento, como si la vivienda estuviera dotada de alma propia.
Por otro lado, las celosías metálicas pintadas en blanco, diseñadas también por el Estudio Sara Torrijos cumplen una función imprescindible, dado que separan el comedor del salón, mientras que la cocina independiente tiene acceso desde el mismo comedor. Otro elemento que llama la atención en la reforma es el techo, que fue decorado con una falsa viga y molduras volumétricas que subrayan cada zona, aumentando la luminosidad y sensación de amplitud gracias a una pared revestida con espejos y grandes ventanales.
Un proyecto innovador en Madrid que combina diseño y funcionalidad para crear un hogar único y con vida propia.
Una zona de descanso armoniosa
La zona de noche fue diseñada para transmitir calma y recogimiento, utilizando una paleta de tonos neutros y materiales ligeros como papeles pintados y textiles. En el dormitorio principal, la pared del cabecero combina un papel pintado liso beige con otro floral, centrado por un espejo redondo dorado adquirido en un anticuario. En lo que se refiere al mobiliario, las mesitas de noche y la cómoda, diseñadas a medida en blanco y dorado, junto con una banqueta tapizada en gris, completan el conjunto. Por último, el baño de la suite armoniza con esta paleta cromática, incluyendo una obra de arte que refleja el amor de los propietarios por el arte, representando bailarinas entrelazadas.
En definitiva, el Estudio Sara Torrijos ha logrado crear una vivienda confortable y elegante, adaptada a la personalidad y necesidades de sus propietarios. Los toques de color en cada estancia invitan a una actitud alegre y optimista, reflejando el meticuloso diseño interior que caracteriza al estudio.