"Las previsiones de futuro son buenas porque la mayoría de los retos de la sociedad se pueden solucionar gracias a los materiales plásticos"

Interempresas Industria Química cumple 100 ediciones impresas. Para conmemorar tal efeméride, publicamos en nuestras páginas un dossier especial en el que presentamos empresas de renombre en el mercado nacional e internacional. Además de destacar productos y servicios, publicamos un especial con importantes entidades del sector químico quienes nos ofrecen una radiografía de la industria química en la actualidad. Sergio Giménez, director de negocio del Centro Tecnológico Aimplas, destaca en esta entrevista varios retos a los que se debe enfrentar la industria: "uno generalizado son las materias primas, no solo a nivel de coste, sino también de suministro. Muchas sustancias actualmente han tenido que ser sustituidas por falta de disponibilidad en el mercado. El otro reto fundamental es el consumo energético, gran parte de la industria química es altamente dependiente de la energía y esto está suponiendo un reto de producción y de rentabilidad".

Creo que los consumidores no somos conscientes de la trazabilidad que hay de las ventajas o comodidades que tenemos y su relación con la química y menos con la industria química. Esta industria ha trascendido en los medios de comunicación por hechos puntuales cuando las cosas no se han hecho bien, por ejemplo, relacionados con la contaminación, más que por el aporte que proporcionan a la sociedad. Detrás del aumento de esperanza o de la calidad de vida de las personas hay mucha química y la industria química es capaz de ayudar a superar los retos actuales y futuros de la sociedad como los relativos a la alimentación, el cambio climático, la movilidad sostenible y las energías, entre otros.

El paraguas que engloba todo es sin duda el cambio climático. El cambio climático es la mayor preocupación actual, por eso debemos trabajar en procesos que ayuden a la reducción de emisiones o en su defecto a la captación y uso de CO₂ y de otros gases de efecto invernadero. En este sentido se debe progresar en aspectos de sostenibilidad en la movilidad, en la construcción, la agricultura o la alimentación.

A nivel productivo la tendencia es la economía circular. Las empresas están cambiando el modelo productivo y con la ayuda de los consumidores y las autoridades debemos ser capaces de cerrar el círculo productivo y estar siempre dentro de este modelo, también con ayuda de las tecnologías de industria 4.0, la digitalización, la impresión 3D o la plastrónica.

A nivel social destacaría dos tendencias: por un lado, la alimentación. Tener un sistema sostenible que permita alimentar a la población mundial, garantizando la seguridad alimentaria y teniendo en cuenta el incremento previsto para los próximos años. La otra tendencia sería la salud en su sentido más amplio: desde el diagnóstico y los tratamientos, hasta los dispositivos médicos que ayuden a la mejora de la calidad de vida.

El papel de la industria química ha sido muy variado y fundamental. Como la industria química es tan amplia, diferentes sectores han ido interviniendo en diferentes momentos. Inicialmente en la parte de equipos de protección individual (EPIs), como mascarillas textiles, protectores y toda la parte de desinfección, jabones, desinfectantes, hidroalcoholes, etc. Y posteriormente en el trabajo de investigación en términos de fármacos, principios activos, los test de detección o las vacunas. La química interviene, de una forma u otra, en todos los procesos.

La Cátedra de Aimplas en la UPV becará a un total de seis estudiantes del máster por el importe de la mitad de la matrícula.

Como comentaba la industria química incluye muchos sectores y procesos. Centrándonos en el sector del plástico, que es en el que trabajamos desde Aimplas, el cambio más importante que ha tenido la industria ha sido la adaptación al proceso de la economía circular. En el caso del plástico, además, acelerado por una legislación exigente y que afecta de forma significativa a muchos productos, lo que ha hecho que haya evolucionado de forma significativa y rápida desde el ecodiseño, el uso de materias primas sostenibles, la gestión de los residuos y el reciclado. En 2025 las grandes cadenas de distribución se han puesto objetivos ambiciosos de sostenibilidad, lo que está haciendo que todo evolucione muy rápido.

Proyecto Valpla.

Aimplas es un centro de investigación que trabaja en el ámbito de la industria del plástico. Trabajamos directamente con empresas para aumentar el valor de los productos y servicios que ofrecen. El propósito es ayudar a las empresas a generar riqueza y empleo y hacerlo de forma sostenible y respetuosa con el medioambiente. Las soluciones que ofrecemos van desde el desarrollo de proyectos de I+D, asesoramiento, validación de productos a través de los servicios de laboratorio o la formación. Somos una entidad muy flexible que sabemos adaptarnos a las necesidades de nuestros clientes con el objetivo de transferir nuestro conocimiento aplicado a sus productos.

A nivel general, las previsiones son buenas porque la mayoría de los retos de la sociedad se pueden solucionar gracias a los materiales plásticos, por lo que van a estar detrás de la movilidad y la construcción sostenible, la descarbonización, el desperdicio de alimentos, la productividad agrícola, la salud y la valorización de residuos. En este sentido, la gestión de residuos y del reciclado de plásticos va a ser la industria de mayor crecimiento en los próximos años.

No obstante, el sector del plástico tiene unos retos particulares y uno de ellos es adaptarse a la legislación que ha surgido y que implica prohibiciones, reducción y un impuesto a los envases no reutilizables. Sin duda son aspectos que va a afectar al sector y que traerá consecuencias a nivel del crecimiento de la industria del plástico.

Aimplas convierte residuos alimentarios en nuevos materiales biodegradables para envases.