El aislamiento de lana de roca, un aliado clave en la lucha contra el cambio climático
Con el objetivo de crear conciencia y sensibilizar a los habitantes del planeta sobre el cambio climático y los impactos ambientales que éste ocasiona, la Organización de las Naciones Unidas designa cada 28 de enero como el Día Mundial por la Reducción de Emisiones de CO2. De esta manera, busca impulsar el desarrollo y aplicación de políticas para la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero. Una buena manera de hacerlo es a través de la rehabilitación energética de los edificios, ya que estos generan casi el 40% de las emisiones de gases de efecto invernadero.
En este sentido, para la correcta rehabilitación de los edificios y la disminución de los gases de efecto invernadero, la aplicación de aislamiento de la lana de roca de Rockwool es fundamental, para contribuir a la protección del medio ambiente. Un dato clave es que, en el último año, las soluciones de Rockwool para edificios han contribuido a ahorrar 100 veces sobre el carbono emitido y la energía consumida durante su producción.
La sostenibilidad es el pilar de la compañía. De hecho, la organización S&P Global Trucost, encargada de analizar y guiar a las empresas hacia un sistema sostenible, ha evaluado a más de 15.000 compañías de todo el mundo y ha concluido que Rockwool es una de las 10 primeras empresas por lo que respecta al impacto positivo de sus productos.
8 de cada 10 personas rehabilitarían su vivienda si pudieran
Según el informe, ‘Desbloqueando los beneficios de la rehabilitación de edificios’, que incluye datos procedentes de una encuesta mundial realizada en Dinamarca, Francia, Alemania, Italia, Polonia, Reino Unido y Estados Unidos, impulsado por Rockwool, juntamente con Cambridge Econometrics, confirma el interés del público por los edificios energéticamente eficientes. Y pone de manifiesto la necesidad de que los gobiernos desarrollen programas de rehabilitación adecuados. Además, una encuesta de OnePoll muestra que ocho de cada diez personas rehabilitarían su casa si recibieran la ayuda adecuada.
En esta línea, el 73% cree que las mejoras de la eficiencia energética deberían ser obligatorias, siempre que se disponga de apoyo financiero y administrativo. Al mismo tiempo, el 62% cree que es su responsabilidad social hacer que su hogar sea respetuoso con el medio ambiente, también, siempre que se dispongo de los apoyos necesarios.
Por ello, ante estas evidencias, tanto climáticas como sociales, Rockwool anima a los responsables políticos a desarrollar los programas de rehabilitación a largo plazo que necesitan los fabricantes para planificar la capacidad de producción y formar adecuadamente a más instaladores; a asociarse con los bancos para combinar subvenciones públicas y préstamos a bajo interés; y a facilitar a los hogares la solicitud de subvenciones y la búsqueda de trabajadores cualificados.