Passivhaus: la reducción del consumo de energía como reto

25/01/2017

Wolfgang Feist, director del Instituto de la Casa Pasiva.

Hace unas semanas, el diario El País, en su edición dominical, publicó una entrevista con Wolfgang Feist, director del Instituto de la Casa Pasiva en Darmstadt (Alemania). Feist, que ya fue entrevistado en exclusiva por Interempresas hace unos meses, es director y fundador del Estándar Passivhaus, una de las certificaciones sobre edificios de consumo energético casi nulo más reconocidas en todo el mundo.

Wolfgang Feist visitó España con motivo de una invitación del Consorcio Passivhaus, grupo de empresas –entre las que figuran Interempresas, Ciberperfil, Roto Frank, Deceuninck, emmegi, Somfy, Gesfácil y Ais Avuá, entre otras- que han unido esfuerzos en la promoción y divulgación del estándar en nuestro país.

En todo el mundo solo hay 15.000 inmuebles que respeten los principios definidos por el estándar Passivhaus y la mayoría están en Alemania y Escandinavia. En España, de momento, solo hay 140, según indica la Plataforma de Edificación Passivhaus.

Wolfgang Feist afirma en la entrevista que “las viviendas pasivas no ahorran energía a costa del confort. (…) Bien aislado, un edificio consumo poca energía. Y aislar no es caro”.

Su formación de físico le permitió desarrollar las teorías y conceptos que definen la certificación Passivhaus, como el aislamiento: “Como físico sabía que había una solución para mejorar la eficiencia energética. Está en la ley de la conservación de la energía: nunca se pierde, siempre va a algún sitio”.

Feist explica también que el Instituto Passivhaus no trabaja con un objetivo meramente comercial. “Tomamos la decisión de no registrar la palabra ni la marca. No queríamos que una solución se convirtiera en una propiedad. Tenemos una red de certificadores que comprueban la calidad de las viviendas pasivas. Pero ofrecemos la información gratuitamente. (…) Hay mucho negocio. Pero lo que define una vivienda pasiva es mensurable”.

En la entrevista, el director del Passivhaus Institute afirma que históricamente este tipo de viviendas se han construido más en Alemania, pero que ahora Bélgica está tomando la delantera, aunque siguen siendo un excepción. “Muy poco de lo que se construye es pasivo. La industria de la construcción no quiere adaptarse a los nuevos retos”. En cuanto a nuestro país, asegura que con la capacidad que tiene en la generación de energía solar “sería más eficiente construir viviendas pasivas en España que en Alemania”.

El doctor Feist explica que el objetivo final de Passivhaus, así como de otras iniciativas de este tipo, es el de la mejora de la eficacia para reducir el consumo global. “Es fundamental demostrar que hay soluciones. (…) La mayoría de la humanidad vive en ciudades. Por eso el gran reto no es la autosuficiencia, sino el descenso en el consumo. (…) Los mayores problemas de la humanidad provienen de nosotros mismos. Por eso las soluciones deben partir también de nosotros”.

Fuente: El País.