Cype desarrolla un software para calcular el efecto de los elementos no estructurales ante un terremoto
23 de abril de 2013
En la actualidad, la aportación del cálculo de los elementos no estructurales –cerramientos de fachadas, medianerías y divisiones interiores- y su contribución a la rigidez del edificio es una cuestión que citan las normas pero que “debido a su compleja estimación práctica, o se desprecia su efecto o se tiene en cuenta de una manera burda, no considerándolos adecuadamente y subestimando su efecto, con el riesgo que ello conlleva”, según explica el director técnico de Cype, Carlos Fernández, quien destaca que estos elementos no estructurales “deben soportar los mismos movimientos que la estructura cuando hay un terremoto, pudiendo sufrir una rotura al tener menor capacidad para deformarse que la propia estructura”.
En este sentido, Carlos Fernández asegura que en el diseño sísmico de las estructuras se concede generalmente poca importancia a estos elementos e incide en que muchos códigos de diseño en países diferentes a España tampoco incluyen normas al respecto. Éste es uno de los motivos por los que en muchos casos en los que ha habido un terremoto, como el que sucedió en Lorca, “un adecuado comportamiento de la estructura diseñada con los modernos criterios de sismorresistencia puede no ser suficiente si con nuestra manera tradicional de construcción no consideramos el efecto de las fachadas y tabiquerías en el cálculo de la estructura.”
Al respecto, el catedrático de Mecánica de Medios Continuos y Teoría de Estructuras de la Universidad Politécnica de Cataluña Álex H. Barbat afirma que la actual norma española “no da soluciones a los proyectistas a la hora de calcular qué impacto tendrá un movimiento sísmico en los elementos no estructurales, tan sólo dice que hay que tenerlo en cuenta y que tienen que ser seguras, lo que ha provocado que las construcciones tengan lagunas en este apartado” y recuerda que el reciente terremoto de Lorca “nos ha demostrado que existe una importante carencia en esta área, ya que es el único caso en el que las muertes registradas en el municipio murciano no fueron causadas por fallos estructurales, sino por la caída de elementos no estructurales del edificio”.
Debido a ello, Álex H. Barbat, quien también es presidente de la Asociación Española de Ingeniería Sísmica (AEIS), asegura que este proyecto de investigación, que la Universidad Politécnica de Cataluña se encargará de validar, “va a ser un referente, ya que no se va a limitar a ofrecer una solución tecnológica sino que va a marcar el comportamiento y sentar las bases de cómo estimar la contribución de los elementos no estructurales en el cálculo de las estructuras para que las construcciones sean más seguras en caso de sufrir el impacto de un seísmo”.