Las ocupaciones ilegales y los medios de seguridad

“Ante la desesperación, los seres humanos se vuelven animales”, señala Dan Brown.

¿Y qué se puede hacer a este respecto? Las leyes actuales no acompañan al ciudadano que se encuentra en esta situación, las denuncias parecen no prosperar y va pasando el tiempo y la desocupación de estos inmuebles sigue sin ejecutarse ante el desespero de las personas que tanto tiempo les ha costado comprarse una vivienda.

Aunque veníamos de una realidad en la que el estrés dominaba las agendas diarias, la Ocupación ha traído consecuencias que han superado su realidad, incluye multitud de pequeños y grandes estresores, presentes de forma continuada, que generan un gran desgaste”.

La incertidumbre de esta crisis perjudica la salud mental y el bienestar, generando malestar, porque “desconocemos la situación de la amenaza”, o si somos un peligro para otras personas, dificultando nuestra vida cotidiana.

La inmediatez en estos desalojos de los activos inmobiliarios es larga y tediosa y en la mayoría son judiciales. La demanda en estos casos puede ser por lo Penal, civil o incluso por la agencia de protección de datos.

Aunque estemos hablando de personas psicológicamente sanas y sin estresores añadidos, si demasiadas cosas fallan a la vez la salud psicológica se ve afectada y las consecuencias se han materializado en un aumento de la ansiedad en un alto porcentaje, respecto de 2019, según estudios realizados con la pandemia actual del COVID 19 ha habido un importante aumento de las ocupaciones ilegales en nuestro país.

“Para todo problema humano hay siempre una solución fácil, clara, plausible y equivocada”, afirma Henry-Louis Mencken.

Existen distintas empresas dedicadas a este menester, donde al principio del año 2013 cuando apareció la primera empresa dedicada al cerramiento de activos inmobiliarios, con unas puertas toscas sin color, solo el del metal y además poco seguras hecha por artesanos del metal. Pero estos sistemas han ido mejorando tanto en calidad como en seguridad, adaptadas a las necesidades del cliente final, son empresas ya constituidas como grandes corporaciones de fabricantes.

Actualmente, se utilizan dos métodos muy competitivos, el método de taladro y el método de presión, aunque diré en este aspecto que se están ideando otros sistemas de sujeción. Por otro lado, la calidad del acero es muy superior al antaño, ya que en la actualidad se certifican estas puertas con un certificado de calidad, sufriendo diferentes pruebas de resistencia y duración, también algunas empresas colocan un vinilo para parecer más decorativas, sin embargo yo particularmente me quedaría con la pintura al fuego, ya que da mayor resistencia al clima ambiental y elimina el óxido del acero, además de ser más estéticas para las comunidades de vecinos.

Las empresas certificadoras aportan un grado de seguridad a las empresas fabricantes que solicitan esta certificación y para ello sufren unas pruebas de calidad, dependiendo los grados a los que se le quiera incluir. En este caso una puerta no puede tener menos de un grado 3 de seguridad, ya que las empresas que no tienen certificadas sus puertas anti-ocupa o tienen un grado inferior a 3, no son muy fiables, puesto que la calidad no va siempre de la mano de lo barato, estos certificados de idoneidad tienen un coste pero a cambio aseguran su calidad en la seguridad de estos cerramientos, dando mayor protección en los activos y evitando la intrusión o ocupación.

Otro de los sistemas actuales como método de protección, son las alarmas (grado 2) vía radio, conectadas a una central receptora de alarmas, lo que se denomina (CRA), con baterías autónomas de larga duración, aportando una mayor seguridad junto a las puertas.

El problema de todo esto es qué si logran entrar, tanto suene la alarma como si no, es muy difícil sacar a los intrusos del activo, por eso aconsejamos las dos medidas de seguridad, que tampoco suma una gran cantidad de dispendio económico, puesto que estos productos, se venden o alquilan por temporalidad, es decir por un alquiler mensual tiene su vivienda protegida.

Actualmente se investiga y desarrollan nuevos sistemas para estos dos elementos como son: anticipación de señal de alarma, o las cerraduras inteligentes o también conocidas como electrónicas. Estos sistemas son de una mayor efectividad conjuntamente a las puertas anti-ocupa y alarmas, pero todo va en función del gasto que se aplique en la protección de estas viviendas.

En la actualidad se han acoplado las membranas de alarmas anticipadas, incluso se pueden conectar con las alarmas mediante un software, las cerraduras sin baterías que succionan energía de un propio móvil, estos sistemas mejoran el rendimiento de los sistemas conjuntos y aportaciones para la protección de estos activos inmobiliarios, claro esta que siguen existiendo las típicas rejas o paneles para ventanas y balconeras, porque estos intrusos no se paran ante nada, hay mafias reventando puertas de activos no protegidos para alquilarlo a personas mediante un contrato falso o también están los okupas con K o con C, “pero de eso ya hablaremos en un próximo artículo”. mafias que se dedican a la extorsión pidiendo dinero a cambio de abandonar la vivienda con sumas económicas muy importantes, “haciendo el agosto”. Un circo montado alrededor de más de 4 millones de viviendas y aquí es donde entramos con las empresas de existencias varias denominadas desocupas, estas empresas expulsan a los ocupas por una cantidad X de dinero, que en ocasiones puede ser mucho o poco, depende de las zonas y barrios.

Todo este tinglado se ha montado por ser un país de debilidad extrema con las leyes blandas, donde la propiedad no es importante somos un país de extremos pasamos del blanco al negro con suma facilidad y esto quiere decir que en Europa, aunque existe el movimiento ocupa, no es tan grave como el que tenemos en España y concretamente aún más si cabe también en Cataluña. No deja de asombrarme como no entienden los fondos de inversiones extranjeros la problemática de nuestro país, las caras que ponen de asombro por no entender lo que ocurre en España y naturalmente que esto también existe es sus países, pero en menor cuantía en todos sus aspectos.

Actualmente las empresas aseguradoras han visto un nicho de mercado y han entrado de lleno en asegurar estos activos inmobiliarios, en este caso aseguran las desocupaciones de estas viviendas mediante gabinetes de abogados por un mínimo precio, además cubren los desperfectos hechos en estas viviendas: roturas, desperfectos, pintura, suciedades, basuras etc.

La vigilancia privada con sus servicios estáticos, las rondas de vigilancia o las conocidas acudas son una aportación más que tienen las empresas de seguridad para apoyar estas ocupaciones ilegales, dando un aporte mas a la seguridad general de estos activos, ya que estos movimientos okupa lo intentan todo con tal de hacerse con una vivienda vacía o en vías de alquiler o venta. Todas estas aportaciones de seguridad solas, no representa el 100% de eficacia para defenderse de esta lacra social como son las ocupaciones ilegales de nuestras viviendas.