En este mes de enero, ponemos especial atención en Galicia. La región del noroeste peninsular se ha caracterizado en los últimos años por su lucha por volver a estabilizarse dentro del sector de la construcción
Galicia se mantiene pero no repunta
Y con la entrada en el nuevo año es momento de plantear nuevos propósitos, también en la construcción y la economía, sectores que fijan especialmente su atención en los primeros meses del año para tratar de pronosticar las tendencias que se vivirán a lo largo de los próximos meses.
Con el panorama de leve repunte que se registraba en el último trimestre del pasado año 2015, la llegada del 2016 se prevé algo más positiva. Cabe destacar que la estimación del stock de viviendas nuevas sin vender en España se mantiene desde hace un año en casi 536 mil inmuebles sin propietario. Este dato se suma a los más de cinco años de caídas consecutivas en el número de pisos de nueva construcción, dato que pone de manifiesto el parón del sector a raíz de la crisis económica vivida desde hace unos años. En valores interanuales se ha producido una caída del 5%, respecto al 3,3% del año 2013.
Este stock de viviendas nuevas sin vender apunta en la comunidad que ocupa este análisis, Galicia, un total de casi 29 mil inmuebles, lo que representa un 5,39% sobre el stock total de España y un 1,78% del stock del parque de viviendas. En comparación con el acumulado del año 2013, la región gallega sufre un descenso del 8,5% en comparación con el stock acumulado durante el 2013 de un total de 31.515 pisos, a falta de datos más recientes.
En España el porcentaje de stock sobre el parque de viviendas es del 2,10%. Las comunidades autónomas con una acumulación de stock sobre su parque mayor a dicho porcentaje son La Rioja, Castilla-La Mancha, Murcia, Comunidad Valenciana, Canarias, Baleares y Cataluña. Galicia se encuentra precisamente en la situación opuesta, junto con Andalucía, Extremadura y Aragón, entre otras.
También es un dato revelador del estado de la economía de un país los datos de la venta de viviendas. Entre los pasados meses de julio y septiembre se vendieron más de 93.500 inmuebles, lo que supone el mejor dato estadístico en cuanto a un tercer trimestre del año desde 2009. Estos resultados, cotejados en la estadística llevada a cabo por el Ministerio de Fomento, representan una subida del 16,3% frente al tercer trimestre de 2014. En un análisis anual, el número de viviendas vendidas ascendió a un total de 398.124, lo que supone un incremento del 14,6% frente a los datos recogidos a lo largo del año anterior.
Entre estas cifras, 16 comunidades autónomas registran incrementos, mientras que en 2 disminuyen. En concreto, en Galicia se sumaron más de 3.600 inmuebles en compraventa, lo que se traduce en una variación del 6,9%. En cuanto a la tipología de estos inmuebles, 10.152 transacciones correspondieron a vivienda nueva, lo que representa un 10,9% del total. Por su parte, la vivienda de segunda mano sumó 83.376 transacciones, lo que supone un 89,1%.
Según datos del Ministerio de Fomento, la estimación del parque de viviendas subió en 2014 hasta alcanzar los 1.619.573 pisos. Esta conclusión se suma así a los datos al alza de los últimos años. Aparte de esto, los precios de las viviendas libres han sufrido una leve mejoría si se compara con los datos del año anterior. El 2015 se cerró con una variación anual del 1,1%, aunque trimestralmente se estancó y no experimentó ningún cambio.
Por otro lado, si hablamos de construcción de edificios, el Instituto Galego de Estatística publica un informe completo con datos de la evolución de la construcción en la comunidad desde el año 1994 y hasta el penúltimo trimestre de 2015. En este documento se puede observar el declive del sector en los últimos ocho años. En 2008 se construyeron 6.242 edificios y un año después la cifra se redujo drásticamente hasta alcanzar los 2.989 pisos. Los siguientes cuatro años seguirían reduciéndose hasta los 1.229 del año 2013, el mínimo histórico desde que se conocen datos. Ya en 2014 hubo un leve repunte hasta anotar 1.286 nuevas construcciones, a falta de saber el total del año 2015, que hasta el mes de septiembre anotó 990 edificaciones.
Aún queda mucho camino por recorrer para volver a anotar datos como los registrados antes de la crisis. Las pymes por su parte, el sector de la construcción por la suya y la industria gallega en general están poniendo todo su empeño para recuperar la fuerza necesaria para crecer. Los últimos datos tanto del Ministerio de Fomento, como del Instituto Gallego de Estadística son optimistas en este sentido y dan a entender que se está trabajando de forma correcta.
Las pequeñas empresas no acaban de despegar
Como no podía ser de otra manera y como viene pasando en los últimos años, las pequeñas empresas gallegas dedicadas a la construcción mantienen el tipo como pueden para evitar cerrar sus puertas debido a la fuerte crisis que azota al sector. Teniendo en cuenta la cantidad de talleres que se han quedado en el camino, el tejido empresarial de la comunidad ha logrado mantenerse en cierto modo, tal y como se recoge en las respuestas obtenidas en una encuesta realizada a diversas compañías del sector.
En este sentido, se ha mejorado considerablemente respecto a años pasados y los empresarios valoran actualmente su situación entre buena y normal, lo que arroja un poco de esperanza para su supervivencia y mejora en los próximos años. A su vez, en la mayoría de pymes se han hecho inversiones durante el último año, aunque no de forma destacada. Por otro lado la variación de trabajadores se ha mantenido en la mayoría de estas compañías, pasando por encima de las empresas que han reducido sus plantillas de manera considerable. Los datos de ampliación de personal también han aumentado, pasando por encima de las reducciones.
Aún y así, las empresas tienen que seguir haciendo frente a diferentes problemas como los de financiación en la mayoría de los encuestados, seguidamente de los impagos a los que tienen que hacer frente y ya en tercer lugar al absentismo laboral. Entre las diferentes respuestas recogidas, también han puesto de manifiesto la falta de trabajo, el azote de la crisis económica en el sector de los cerramientos y la demanda de más obras, así como la competencia desleal entre talleres dedicados a la misma tarea.
La oscilobatiente y el aluminio, se hacen con el mercado de los cerramientos gallegos
Un 43% de las respuestas recogidas en la encuesta realizada a diferentes talleres de Galicia declaran que las ventanas más habituales en las obras de construcción y rehabilitación de edificios es la practicable con un 43%, seguida muy de cerca por la oscilobatiente con un 40%, que ha perdido uso respecto a datos recogidos anteriormente. En tercer lugar se encuentra la corredera, con un 14% y ya con sólo un 3% de las respuestas estaría la basculante. Ninguna de las otras opciones ha sumado datos, como es el caso de la ventana de guillotina, la circular, la de celosía o la de tejado, entre otras.
A su vez, el material más utilizado por los talleres gallegos ha sido el aluminio con el 58% de los datos recogidos, seguido por el 35% del PVC, material que también está en alza en este tipo de fabricaciones. Todo lo contrario sucede con la madera, elemento que años atrás fue el material por excelencia en el sector y que a día de hoy no ha conseguido sumar ningún dato en esta encuesta.