Los nuevos precios de la electricidad reducen el tiempo de amortización de las plantas fotovoltaicas en España
El 1 de junio entró en vigor en España una nueva ley de precios de la electricidad. Se trata de un nuevo sistema de pago por tramos. Ahora se introducen automáticamente tres tarifas para todos los consumidores: pasamos a tener dos potencias y tres periodos de energía, que quedarán reflejados en la factura. Estos tres tramos se dividen en horas punta (de 10 a 14h y de 18 a 22h), horas llano (de 08 a 10h, de 14 a 18h y de 22 a 00h) y horas valle (de 00h a 08h y los fines de semana). Eso se traduce en una diferencia de precio en la electricidad entre franjas que llega al 50% en las horas punta con respecto a las horas valle.
¿Qué se puede hacer para mitigar los efectos de los nuevos peajes?
Una forma es tratar de cambiar sus hábitos y consumir menos electricidad en las horas más caras. Redirigir el consumo hacia las horas valle es algo bastante simple que consiste en realizar pequeñas acciones: poner un temporizador en el calentador de agua o configurar la lavadora y el lavavajillas para comenzar en los momentos en que la electricidad es más barata. “Pero no todo el consumo se puede redirigir, por la noche queremos utilizar una estufa cuando hace frío o el horno para preparar la cena. Queremos encender las luces, ver la televisión y cargar nuestros teléfonos”, argumenta Daniel Nilsson.
Durante la actual pandemia, el teletrabajo desde casa ha aumentado drásticamente. Y si trabajamos desde casa, no podemos evitar consumir electricidad incluso por las mañanas con el uso del ordenador o para cocinar el desayuno. Pero aquí, invertir en una instalación fotovoltaica y autoconsumir tu propia energía es la solución.
“La rentabilidad de invertir en una instalación fotovoltaica ya era muy alta antes, pero ha mejorado considerablemente de la noche a la mañana. La cantidad de horas de sol que tenemos en España combinado con un incremento del precio de la electricidad significa que un sistema solar se amortiza en 4-5 años. Además, la electricidad que no usas tú mismo se puede almacenar en una batería para usarla por la noche o verterla de nuevo a la red a cambio de una compensación” dice Daniel Nilsson.