De residuo vegetal a oportunidad medioambiental
23 de noviembre de 2011
De problema con difícil solución a oportunidad medioambiental y empresarial. El salto tecnológico que contribuiría a que los residuos generados por las empresas de transformados vegetales se transformen en materia prima o posible fuente de energía, cada vez es más cercano. Cómo llevarlo a cabo es lo que se abordó en una jornada técnica celebrada en la sede del Centro de Innovación y Tecnología Alimentaria de La Rioja, en Calahorra, el pasado 9 de noviembre. En la sesión representantes de empresas del Valle del Ebro y técnicos del proyecto ‘Intercambio y transferencia tecnológica sobre la valorización de residuos de la industria de transformados vegetales del SODUE –VALUE’.
La jornada, dirigida a pymes del sector agroalimentario, incluyó conferencias y talleres prácticos sobre valorización de residuos. Los socios del proyecto VALUE realizaron una breve presentación de las posibles tecnologías de valorización de acuerdo con los diferentes tipos de residuos. Posteriormente, se organizaron mesas de trabajo a fin de poner en marcha la planificación de los ensayos de valorización alimentaria y energética con las empresas interesadas.
En el curso de la sesión, el taller práctico sobre valorización de residuos puso de manifiesto el interés y la preocupación de la industria de transformados vegetales por dar salida a sus residuos sin costes añadidos y la capacidad de los centros tecnológicos para desempeñar un doble papel en este ámbito: por un lado, la posibilidad de ofrecer transferencia tecnológica y por el otro, colaborar en el estudio técnico de las alternativas más viables.
El proyecto VALUE tiene como principal objetivo aportar soluciones a la industria agroalimentaria que den valor a sus residuos. Para ello, se identifican, experimentan, validan y difunden las tecnologías de tratamiento y valorización. El proyecto, cofinanciado por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER) a través del Programa de Cooperación Territorial del Espacio Sudoeste Europeo (SUDOE), cuenta con una serie de socios españoles, organizadores también de esta jornada. Por ejemplo, el Centro de Innovación y Tecnología Alimentaria de La Rioja (CITA), el Centro Tecnológico de la Industria Cárnica (CTIC); la Asociación para la Investigación, el Desarrollo y la Innovación Alimentaria (AIDIA); Centro Tecnológico del Mar y los Alimentos (AZTI), la Federación Española de Industrias de Alimentación y Bebidas (FIAB) y el Centro Nacional de Energías Renovables (CENER).
Los residuos, a base de materias diversas y estacionales, generan costes a las pymes agroalimentarias
Tras el saludo a los participantes por parte del gerente de los centros CTIC-CITA, Clemente Bea, y la explicación del proyecto VALUE a cargo del director técnico del CITA La Rioja, Rafael López, y el representante de FIAB, Federico Morais, fue el turno de los técnicos de los centros tecnológicos participantes. En concreto, expertos de los centros riojanos CTIC-CITA, de AZTI y CENER, disertaron sobre tecnologías susceptibles de uso y posibles aplicaciones de los residuos transformados. Además, se dio a conocer la experiencia práctica de una empresa de compostaje, SLIR.
Durante la jornada se analizaron los problemas que representan los residuos para las pequeñas y medianas empresas de transformados vegetales, tanto por los costes que generan como por las dificultades que surgen a raíz de estudiar tecnologías y rentabilidad en cada caso, ante la diversidad y estacionalidad de las materias que se desechan en cada planta de producción. En este sentido, algunas soluciones pasan por optimizar procesos, soluciones de colaboración a fin de obtener volúmenes rentables de tratamiento y tecnologías, y acercarlas a las pymes. De todo ello se ocupa el proyecto VALUE, financiado con fondos comunitarios.
Pigmentos vegetales, fibras, vitaminas, aceites esenciales, antioxidantes, antimicrobianos naturales o polifenoles, entre otros, se esconden en los desechos de la industria de transformados vegetales. Abonos o diferentes biocombustibles como etanol o biogás producen energía solos o en combinación con otros productos. Los sectores agroalimentarios y energéticos son los principales receptores de los desechos convertidos en producto o materia prima.
Subproductos vegetales ricos en fibra alimentaria y compuestos funcionales
Por su parte, Almudena Gómez, de los centros CTIC-CITA, explicó las posibilidades de extracción de compuestos funcionales e incorporación de productos enriquecidos, en el contexto de las demandas de la alimentación actual para la calidad de vida y productos beneficiosos para la salud. Desde AZTI-Tecnalia, Carlos Bald y Marta Cebrián, describieron la experiencia de la fundación tecnológica vasca en la obtención de fibra alimentaria a partir de subproductos vegetales y, en concreto, de transformados de tomate y de biometanización para valorización energética.
La ponencia de Iranzu Alegría, de CENER, también se centró en experiencias y nuevas tecnologías de valorización energética. La investigadora abordó la generación de bioetanol así como productos disponibles para combustión y gasificación a partir de residuos vegetales. Asimismo, Martín Moreno, de SLIR, dio a conocer el trabajo de una empresa de compostaje para incorporar subproductos a compost y darle salida en el mercado.
Finalmente, en el taller práctico se intercambiaron impresiones sobre los principales inconvenientes con los que tropiezan estas pymes en la gestión de los residuos que producen. Se debatió sobre los requerimientos y controles sanitarios para que el residuo no sea tratado como basura y pase a ser considerado un componente reutilizable en la industria agroalimentaria, en el sector panadero, galletero o cárnico, por ejemplo. También se abordaron las características que deben tener los residuos para ser viables en el sector energético. Al respecto, los centros tecnológicos ya mencionados plantearon el diseño de experiencias piloto para que las empresas tengan referentes susceptibles de análisis.
Tras las jornadas celebradas en Badajoz y Calahorra, con la asistencia de empresas y centros de la Rioja, Navarra, Aragón y País Vasco, el próximo taller sobre valorización de residuos tendrá lugar en el Centro Tecnológico Nacional de la Conserva en Molina de Segura (Murcia).