La industria cárnica de ovino y caprino denuncia una “situación límite” para el sector
La Asociación Empresarial Cárnica (Anafric) organizó una reunión sectorial con empresas del sector ovino y caprino donde se expuso la situación “preocupante” que vive el sector. Con una tendencia del consumo nacional a la baja, el incremento sostenido de los costes de producción y la inflación, la disminución de la cabaña o la disminución de los flujos comerciales con Europa, han puesto al sector en una “situación límite”.
José Friguls, presidente de Anafric, expresó su preocupación y animó a los presentes a “intercambiar las problemáticas comunes” para encontrar “perspectivas de futuro” para el sector. Al mismo tiempo, también se acordó de pedir a las autoridades españolas que consideren al sector ovino y caprino como “prioritario” no sólo por su importancia económica, sino como futuro para una parte importante de la España rural.
En la reunión, que tuvo lugar en el Palacio de Santoña de Madrid, el encuentro transcurrió en un ambiente participativo, donde las cerca de 50 empresas asistentes pusieron en común las principales problemáticas del sector.
“El sector de ovino y caprino está en un momento de cambio. Si la tendencia de consumo de este tipo de carne ha ido disminuyendo en los últimos años, la pandemia y las huelgas de transportes, junto con las nuevas tendencias alimentarias globales, han supuesto un duro golpe para el sector”, señala Anafric.
La solución se podía encontrar en los intercambios comerciales con Europa. Con el Brexit, España es el primer productor de la UE, ya que parte de la cuota del cordero del Reino Unido fue sustituida por el cordero español. “Las exportaciones han permitido mantener el equilibrio y sobrevivir al sector, pero Europa no responde como antes”, explicó Friguls.
Los problemas del ovino y caprino de carne
- La disminución de la cabaña y el descenso en el número de cebaderos.
- El encarecimiento de la energía, el combustible y las materias primas.
- La tendencia a la baja del consumo de las carnes.
- El alto precio de la carne de ovino.
- La inflación disparada, que dificulta la liquidez de los trabajadores y los consumidores.
- Las cargas administrativas.
- Las amenazas sanitarias.
- La falta de relevo generacional.
- Las ayudas inexistentes al sector.