Entrevista a Pedro María Pérez, Director Gerente de Pneumax S.A.
Hoy día, por volúmen de ventas e introducción en el mercado, Pneumax, S. p. A. se sitúa entre las tres primeras firmas italianas de fabricación de productos neumáticos, contando con filiales en Alemania, Francia, Reino Unido, Rusia, Singapur y España, así como con distribuidores en todos los países del mundo donde existe un mínimo de nivel industrial. La sede, situada en Lurano, a 15 km. de Bérgamo, sobre una superficie de 75.000 m2 cuenta con un área cubierta de 25.000 m2 distribuida en varios edificios, en los que se encuentran las más modernas máquinas y utillajes de todo tipo, capaces de producir todos los componentes necesarios para abastecer a las líneas de ensamblaje, las cuales divididas por familias, montan y prueban cada día millares de productos acabados.
La filial española Pneumax, S. A. ubicada en Elgoibar (Gipuzkoa) dispone de unas instalaciones de 1.000 m2 donde, además de la logística inherente a sus almacenes de distribución, cuenta con su propia unidad de producción de cilindros neumáticos. Recientemente, se ha instalado también en Barcelona.
“Un año después de nacer Pneumax, en 1976, –explica Pedro María Pérez– nos hicimos cargo de la distribución de sus productos neumáticos para España a través de Comega. En el año 1991, se crea Pneumax S.A., participada por la casa central de Bérgamo. En 1992 nos trasladamos desde Eibar al polígono Olaso en Elgoibar, donde ahora está la sede central. El año pasado hemos comprado una nueva nave de 700 m2 en el polígono de Sigma, de Elgoibar, donde a lo largo de este año trasladaremos los talleres de fabricación de cilindros y el aula de formación, didáctica y preparación de comerciales. Allí, a través de los cursos pretendemos promocionar la técnica neumática. Asesoraremos a los que trabajan con ella sobre las dudas o problemas que les puedan surgir en su trabajo diario, a la vez que les presentamos nuestro catálogo. La previsión es hacer diez cursos al año a los que asistirán de 20 a 30 personas cada vez”.
Frenazo de mercado
“Nuestra facturación –comenta el Gerente de Pneumax– ronda los 5,00 millones de euros. En el presente ejercicio aspiramos a mantener estas cifras, porque el mercado está bajo. Sobre todo, se ha resentido mucho la exportación de bienes de equipo a consecuencia del valor del euro. Esto no sólo frena la exportación de maquinaria, sino que facilita la entrada de material de Extremo Oriente a unos precios que hoy son más baratos que hace dos años. Aunque todavía no sufrimos un descenso de ventas, sí podemos hablar de un frenazo de crecimiento”.
Este frenazo lo está sufriendo toda Europa, prueba de ello es que, Alemania, que tradicionalmente ha sido el motor de la economía, está en recesión. Esta situación se percibe desde el verano del 2002. “En estos momentos, lo que está claro es que el mercado nacional está estancado, y si todas las marcas pretendemos crecer, será muy difícil poder hacerlo salvo que entremos en una política de reducción de precios. En este sentido hemos detectado algunos casos, pero todos somos conscientes de los problemas que una medida así conlleva para el futuro, cuando la economía se recupere”.
El parón actual es generalizado y afecta a la gran mayoría de los sectores productivos de bienes de equipo. “No obstante, todas las empresas con las que estamos en contacto piensan que esto es pasajero y muchas están a la espera de poder volver a invertir. Desde 1992 hasta ahora ha habido 11 años de bonanza económica y las empresas están fuertes. Mucho peores las hemos pasado”, afirma el responsable de Pneumax, con cierta dosis de optimismo.
El mercado de la neumática en España está dominado por marcas de procedencias muy diversas. “De cualquier forma –comenta Pérez– hay que tener en cuenta que no existe ningún fabricante nacional de productos neumáticos con gama completa, aunque si hay algunos que hacen determinados componentes. Los productos neumáticos de mayor venta en España proceden de países como Alemania, Japón, Italia, Francia, Gran Bretaña y en menor medida de EE.UU.
Respecto al producto, PNEUMAX se define genéricamente como una empresa constructora de componentes industriales para la automatización neumática: válvulas de mando manual, mecánico y neumático, electroválvulas, actuadores lineales y de giro, elementos para tratamiento del aire, racorería neumática, etc. Como última incorporación hay que citar los sistemas electrónicos para conexión serial en protocolos Interbus, Profibus y Devis.
Catálogo
Actualmente, la facturación de la filial española de PNEUMAX se realiza en un 36% a clientes directos y el resto a través de almacenes distribuidores especializados en todo el territorio nacional, contando con 52 puntos de venta.
Ello le permite estar presente en todos los campos de producción, con una relevante incidencia en los sectores de máquina herramienta, maquinaria de envasado y embalaje, maquinaria para la cerámica, madera, calzado, vidrio, etc. En concordancia con el potencial de compra del sector, las ventas de PNEUMAX se realizan mayoritariamente y por este orden en Cataluña, País Vasco, Levante y zona centro.
“En el sector de la elaboración de la madera, Levante es un claro exponente por la cantidad de fabricantes de muebles, por lo que hay numerosos constructores de maquinaria para muebles y estos son grandes utilizadores de neumática” . En Castellón está el mercado de gres y azulejo, donde un gran número de máquinas son neumáticas. Incluso hay un gran consumo de neumática alrededor del mercado hortícola. Por ejemplo, en la naranja, todo el proceso, desde que se recoge la naranja hasta que se mete en los sacos que luego llegan a las tiendas, es neumático: la separación por tamaños, limpieza, etiquetado, las máquinas que hacen las mallas, el pesaje, etc.”
Innovación
“En 1976 todo nuestro catálogo era un tríptico. Desde 1976 a 1990 hubo una evolución del producto muy rápida. Del 90 en adelante, la evolución ha sido más lenta, pero más importante porque se ha aplicado la electrónica a la neumática. Gran parte de las señales de mando que antes eran eléctricas, mecánicas o manuales, en este momento son señales de mando electrónicas. Esto ha dado lugar a grandes precisiones y a un mejor control del aire que permite realizar operaciones que antes del año 90 eran impensables”.