Syngenta lanza una nueva trampa para control integrado de mosca en olivar
Syngenta ha presentado en evento presencial y por streaming su nueva tecnología KarateTrap®B, una herramienta de trampeo masivo contra mosca del olivo (Bractocera oleae), que atrae, captura y elimina las moscas, mejorando el control de esta plaga a través de la prevención y de forma totalmente sostenible, ya que no deja ningún residuo ni tiene plazo de seguridad y ayuda a reducir las aplicaciones de productos fitosanitarios.
Así, en la presentación de KarateTrap®B, Patricia Fernández, responsable de Insecticidas de Syngenta en Iberia, destacó que estamos en un momento clave en el que se juntan dos factores: por un lado la reducción del uso de materias activas para el control de mosca en olivar, ya que van a permitirse solo tres modos de acción en este 2022 y, por otro lado, las exigencias del nuevo Pacto Verde de la UE, que apuesta por una mayor sostenibilidad de los cultivos.
KarateTrap®B no tiene plazo de seguridad para la recolección y no deja residuos en la cosecha ni en el aceite.
En este contexto, y teniendo en cuenta que la mosca del olivo en una de las plagas más dañinas para la calidad de la aceituna con importantes pérdidas de producción en olivar, Syngenta avanza en su estrategia de ofrecer tecnologías innovadoras que ayuden a cumplir esas exigencias y permitan un control de plagas eficaz con una reducción de aplicaciones de productos fitosanitarios. Así, KarateTrap®B se posiciona como la solución más sólida, flexible y rentable para que los olivareros puedan prevenir los ataques de mosca, controlándolos hasta en un 70% con estas trampas que, además, ayudan a saber el mejor y más efectivo momento para la aplicación de una solución fitosanitaria complementaria.
Descripción y recomendaciones de uso
KarateTrap®B es una trampa compuesta por un mosquero plegable óptimo para la captura de la plaga objetivo, una tapa impregnada con 0,0075 g de Lambda Cihalotrin/trampa que actúa como insecticida de contacto y atrayentes alimenticios específicos. Las trampas se colocan en primavera de forma estratégica en la parcela, con una media de 30 trampas por hectárea, con un abanico de entre 10 y 50 trampas según las hectáreas de olivar y el nivel de riesgo de la plaga. Las trampas quedan puestas durante toda la campaña.
La trampa tiene un color anaranjado que atrae a las moscas y en su interior se dispone un atrayente alimentario formulado en seco que, con la humedad de la noche, se activa y durante el día atrae a las moscas que, al entrar en la trampa, quedan capturadas y en contacto con el insecticida mueren. Es importante este formato en seco del atrayente, ya que con más humedad hay más peligro de ataques de mosca y se activa, pero con tiempo seco hay menos peligro y el atrayente se gasta menos. Por eso la trampa dura prácticamente dos años, con una eficacia menor la segunda campaña, como hemos comentado.
Los ensayos muestran controles muy altos en olivar
José María López, responsable técnico de Fungicidas, Insecticidas de Syngenta en Iberia, comentó los resultados medios de numerosos trabajos de campo realizados en España en diferentes parcelas de olivo, viendo como las trampas son realmente eficaces por si solas reduciendo fuertemente las poblaciones de mosca y los daños. El control de mosca puede ser complementado con una aplicación foliar con insecticida y cebo de proteínas, en el momento crítico de mucha actividad de la mosca. La media de los ensayos habla de que con 50 trampas por hectárea hay una reducción del 73% de la picada (un 68% con 30 trampas/ha), pero si añadimos una aplicación solo de Karate Zeon+ 1.5 CS en cebo, se llega a reducciones del 88% de la picada en la aceituna con 50 trampas/ha (77% con 30 trampas/ha).
Además, José María López quiso comentar un ejemplo concreto de un trabajo en la localidad de Los Villares en Jaén, con 10 hectáreas en las que se comparó la eficacia de 30 trampas/ha de KarateTrap®B más una aplicación en cebo, con tres aplicaciones que realizó el agricultor propietario de la parcela. Los resultados son claros y con las trampas se capturaron un gran número de moscas (10.560 moscas por ha en la campaña); se redujo enormemente la picada (al 16% de picada) frente a las tres aplicaciones del agricultor (52% de picada); y se detectó muy bien el riesgo de picada, por lo que se hizo la aplicación en el momento preciso para ser más eficaz.
Por último, Antonio Tudela, de la empresa Bioensayos y Experiencias Agrícolas, comentó un ensayo realizado por ellos en La Puerta de Segura, Jaén, en el que se dispusieron diversas parcelas con 50, 30 y 20 trampas/ha con y sin aplicaciones adicionales, además de la parcela testigo y la parcela con el tratamiento habitual del agricultor. El resultado final no pudo ser más concluyente: en las parcelas con 50 y 30 trampas/ha no se percibieron daños en la aceituna y en las de 20 trampas/ha solo un 4% de aceituna picada, frente al 63% de afectación en la parcela testigo. Y en la parcela con trampas y una aplicación, no se vieron daños ni con 50 ni con 30 trampas/ha y solo un 0,5% con 20 trampas/ha, frente a un 20,5% en la parcela sin trampas y una aplicación.
En definitiva, tanto José María López como Antonio Tudela destacaron que KarateTrap®B en un sistema muy eficaz, flexible y rentable contra mosca del olivo ya que si se coloca estratégicamente en la parcela antes del engorde de la aceituna a partir de (BBCH75) y se hace una aplicación en cebo de Karate Zeon+ en envero de la aceituna se consigue un control prácticamente total de la plaga. Antonio Tudela concluyó con un dato interesante: la mosca del olivo tiene una movilidad baja, por lo que este tipo de trampas son perfectas para su control a lo largo de las campañas debido a que bajan la población en las parcelas y hay poca interferencia de zonas colindantes.