UPA pide proteger a las explotaciones familiares en la normativa de ordenación del sector vacuno
Ganaderos de vacuno de la Unión de Pequeños Agricultores (UPA) de toda España se reunieron para debatir y concretar sus propuestas para la normativa de ordenación de granjas de vacuno de leche, carne y mixtas. Una normativa que, a su juicio, debe contribuir al progreso sostenible de la ganadería familiar, por sus múltiples beneficios para la sociedad.
Así, la organización agraria ha remitido una carta al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) en la que le pide “valentía para sacar adelante un Real Decreto que impulse y beneficie a las ganaderías familiares existentes”, con un modelo de gestión basado en la calidad de la leche y de la carne, “un modelo sostenible económicamente con precios justos que al menos cubran los costes de producción, que siga ocupando el territorio de todas las comarcas de España y además sea sostenible medioambientalmente”.
UPA recuerda que lleva años pidiendo un plan de ordenación a fin de evitar la construcción de granjas de gran tamaño, como la que se proyectaba en Noviercas (Soria) con más de 24.000 vacas, “modelos de granjas industriales apoyadas en entidades bancarias y fondos de inversión y totalmente alejadas del modelo familiar mayoritario en España”.
La organización agraria cree que la normativa debe contribuir al relevo generacional y a que los productores logren precios justos. También creen que se debe facilitar que los ganaderos puedan alejar las granjas de las zonas urbanas de los pueblos.
UPA propone que se contemplen tres tipologías de granjas: extensivas, semi-extensivas y no extensivas. “Los borradores que maneja el Ministerio excluyen a la ganadería semi-extensiva, contemplándola como intensiva, cuando no es así, puesto que son todas vacas que pastan a diario y vuelven a su granja para el ordeño o para amamantar a sus terneros. También hay que proteger especialmente a quienes producen en ecológico o quienes cuidan a sus animales destinados a carne y leche de pastoreo”, señalan.
La organización ganadera pide también que se fije un tamaño máximo para las ganaderías extensivas, puesto que “no hacerlo sería un favor que se pretende hacer a los grandes terratenientes”. En cuanto a los tamaños propuestos por el Ministerio de Agricultura, UPA cree que el tamaño máximo de 850 vacas es muy elevado y el mínimo del grupo I de 20 vacas es muy reducido y no representa en ningún caso la realidad de nuestro sector. “Esas cifras deben corregirse”, señalan.