La ganadería extensiva del sur de España sufre los duros efectos de la sequía
La ganadería extensiva, fundamentalmente en Extremadura, Andalucía y zonas de Castilla-La Mancha, está sufriendo desde hace ya muchas semanas la falta de pastos, según un informe elaborado por la organización agraria ASAJA.
“Pero no solo la falta de pastos, la disponibilidad de agua en las charcas donde abreva el ganado merma día a día, en pleno invierno que es cuando tendrían que acumular reservas. En el caso de las fincas que utilizan el agua subterránea se están reduciendo los caudales de los pozos”, asegura el informe.
Para la ganadería extensiva, que está pasando por momentos muy difíciles, esta sequía puede ser la “puntilla”, ya que muchas explotaciones no podrán asumir el incremento de costes, apunta la organización agraria. Hay que tener en cuenta que la falta de pastos obliga al ganadero a cubrir con pienso y forrajes buena parte de las necesidades alimenticias del ganado, pienso y forrajes que han incrementado su precio más del 30%. Y a esto hay que sumarle el coste del suministro del agua.
En lo que se refiere a la apicultura, hay que señalar que también están sufriendo las consecuencias de la falta de precipitaciones y las anomalías de temperaturas, dos factores que inciden directamente en la floración de las plantas y por tanto en el alimento disponible para las abejas.
“Las consecuencias pueden ser catastróficas en esta ganadería ya que incrementará la mortandad por enfermedades y parásitos, además del revés económico a los apicultores al tener que aportar alimentación suplementa”, finaliza ASAJA.