Primer balance efectuado por parte de las organizaciones agrarias

Los efectos de la borrasca Filomena a su paso por la Península ha dejado una suerte desigual para el campo porque las zonas más azotadas —fundamentalmente por las nevadas— han sufrido daños en infraestructuras, cultivos y accesos a fincas, pero otras áreas se han beneficiado de las lluvias.

Un tractor recogiendo nieve por las calles de San Miguel de la Ribera, en Zamora. Foto: UPA.

Los agricultores y los ganaderos siguen haciendo balance de la situación generada, a la espera de saber cómo afectan las bajas temperaturas anunciadas para los próximos días. Los servicios técnicos de la organización agraria ASAJA ya cuentan con una primera estimación de las distintas asociaciones provinciales sobre las consecuencias de Filomena. En la zona centro, especialmente la vega del Tajo, hay problemas en los invernaderos por desplome a causa del peso de la nieve. En cuanto a las plantaciones de ajos, habrá que esperar a que se retire la nieve para ver los daños en el ajo temprano, mientras que en el ajo morado se paralizarán las siembras por unos días.

En otros cultivos leñosos, como frutales, vid o almendros, la principal preocupación son los posibles daños en la madera, y para los cultivos herbáceos hay ”mucha preocupación“ en la zona centro (Cuenca, Albacete, Toledo o Madrid) y es muy previsible que haya ”daños importantes”.

Desde la organización agraria COAG, sus primeros informes hablan de que las precipitaciones en forma de lluvia y vienen vendrán bien "para casi todos los cultivos" por la "recarga de acuíferos". En cereal, lo ven positivo para las siembras y para el viñedo aunque, en este último, puede retrasar las labores de poda. Desde la organización han indicado además que las gélidas temperaturas pueden ser una oportunidad para reducir las plagas y los huevos de insectos que las provocan.

Desde UPA, por comunidades autónomas destacan que en Madrid están "muy perjudicadas" todas las verduras al exterior, como coles o alcachofas. En Murcia, UPA ve "muy positivas" las precipitaciones de los últimos días y con una nieve suave que "no supone ningún problema" e incluso beneficia al almendro porque retrasa la floración. Respecto a Andalucía, la entidad apunta que el temporal deja efectos positivos en Almería, aunque el frío intenso puede bajar los rendimientos hortícolas y se pueden perder jornadas de recogida de aceituna en las provincias oleícolas. En otras regiones como Comunidad Valenciana, Extremadura y Galicia, las consecuencias de Filomena han sido menores pero están pendientes del frío venidero, según UPA.

Unión de Uniones de Agricultores y Ganaderos destaca, sobre todo, el daño provocado en la ganadería en distintas comunidades autónomas donde se ha producido y en los olivos de Castilla-La Mancha y Cataluña. Tras realizar un primer balance de los daños sufridos a nivel estatal por parte de sus agricultores y ganaderos, esta organización pone en evidencia los problemas que la nieve y el fuerte viento ha ocasionado en la ganadería, aislando animales.

Por ello, la organización insta a las administraciones a agilizar todo el proceso de evaluación de daños y empezar a pensar en medidas de apoyo. “El seguro agrario está ahí para compensar todo lo que está en su ámbito de aplicación, pero no deben descartarse otras ayudas que puedan ser necesarias” para reponer plantaciones o estructuras.

Respecto a las hortalizas, en la Región de Murcia los principales daños están en alcachofas, habas y calabacín, y habrá una ralentización de la producción en lechuga, coliflor y brócoli.

En Almería, la producción hortícola no se ha visto dañada, pero venían de un “importante siniestro por heladas“ en los primeros días de año que afectó a 250 hectáreas sobre todo de tomate y calabacín, tanto de invernadero como al aire libre, según los técnicos; aún así, las fuentes inciden en lo bien que han venido las lluvias asociadas a la borrasca.

En cuanto a los cítricos, ASAJA ha apuntado que en Andalucía están más preocupados por los problemas del transporte que por los daños en la producción; en Murcia y Alicante no hay problemas significativos y en la Comunidad Valenciana, aunque sí ha nevado, no cuentan con valoración aún.

El presidente de COAG Murcia, Miguel Padilla, ha indicado que Filomena ha "venido bien" a la región por las lluvias que han caído y que el principal problema para la huerta han sido las heladas de finales de 2020 (que afectaron a alcachofas, habas y calabacín y a los árboles citrícolas) y las que pueden caer esta semana.

Plantación de olivos dañada por la nieve. Foto: Unión de Uniones.

En el olivar, es pronto para poder hacer valoraciones tanto de la pérdida de la aceituna por recolectar (queda más o menos el 35-40%) como de los posibles daños en las plantaciones por acumulación de nieve, especialmente en los árboles jóvenes. Previsiblemente, los más afectados serán los olivares de Cuenca, Toledo y Ciudad Real, aunque en Jaén -principal productora- sólo ha nevado en las sierras altas, y con menor intensidad.

El responsable de Olivar de COAG, Juan Luis Ávila, ha señalado que la borrasca ha perjudicado las producciones de "Castilla-La Mancha para arriba" porque lo que es para Andalucía, principal región productora, la borrasca no ha generado ninguna incidencia e incluso tiene aspectos positivos con lluvias asociadas y sin viento. COAG considera que se lleva una "parte negativa" porque estas inclemencias reducirán el rendimiento de la aceituna que aún está sin recoger y puede provocar daños en árbol por el peso de la nieve.

Los problemas en la ganadería intensiva vendrán de la posible falta de suministros por los problemas en el transporte y acceso a las fincas, según ASAJA; en el extensivo, las zonas con gran acumulación de nieve están teniendo problemas de acceso (Serranía de Cuenca y zonas altas de Albacete, esencialmente).

En la retirada de leche, solo hay incidencias puntuales en las zonas de mayor altitud. Asimismo, COAG constata dificultades para poder acceder a algunas fincas y alimentar al ganado y daños en infraestructuras y caminos. Los ganaderos de Castilla y León son los más afectados por Filomena, puesto que están más presentes en zonas de montaña y muchos tienen problemas para acceder a sus naves aunque las precipitaciones beneficiarán a los pastos de montaña, a los embalses y el regadío.

Para Unión de Uniones, la Comunidad de Madrid, Cataluña, Comunidad Valenciana y Castilla León han sufrido distintos episodios de rotura de infraestructuras o imposibilidad de acceso a granjas, provocando serios problemas a los ganaderos de leche de la Comunidad de Madrid que han tenido que abrir ellos mismos los caminos para poder llegar a las explotaciones e importantes destrozos. Asimismo, el problema para el ganado extensivo se ha visto agravado en estas comunidades también por la dificultad de acceder a los pastos por el hielo, teniendo que trasladar al ganado a otras zonas para poder seguir alimentándoles.