El Hub europeo para la industria aeroespacial de Henkel recibe el certificado DGNB Gold
La planta de producción de adhesivos para la industria aeroespacial de Henkel Ibérica ubicada en Montornés del Vallés (Barcelona), inaugurada en junio de 2019, ha conseguido el sello DGNB de España con una certificación de oro (Gold) que otorga el German Sustainable Building Council.
Esta prestigiosa certificación evalúa la sostenibilidad de los edificios tanto en el ámbito nacional como internacional y garantiza que se han tenido en cuenta diversos criterios en el diseño y en la construcción que contribuyen a la sostenibilidad. Henkel se convierte en la primera planta productiva en España con la distinción Gold, un sello para el que se valoran y puntúan diversos aspectos agrupados en cinco tipos de calidad: técnica, procesos, medioambiental, económica, sociocultural y funcional. “Estamos muy orgullosos de recibir esta certificación, que supone un reconocimiento a nuestro esfuerzo por reducir la huella ambiental en todos nuestros procesos, incluyendo la construcción y apertura de nuevos centros siguiendo siempre altos estándares de sostenibilidad y eficiencia energética”, comenta Rodolfo Schornberg, presidente de Henkel Ibérica.
La entidad que otorga estos sellos, el German Sustainable Building Council, tiene en cuenta la sostenibilidad de los edificios tanto en el ámbito nacional como internacional y garantiza que se han tenido en cuenta diversos criterios en el diseño y en la construcción que contribuyen a la sostenibilidad.
La planta de la unidad de negocio Adhesive Technologies de Henkel cuenta con una caldera de biomasa para la producción de energía térmica que permite proveer de calefacción y agua caliente tanto al propio edificio como a los diferentes procesos industriales que se llevan a cabo en la fábrica. Además, puede producir frío por ciclo de absorción, permitiendo que el calor sobrante pueda ser aprovechado para generar frío. De esta manera quedan cubiertas el 100% de las necesidades de frío y calor de la planta tanto a nivel de proceso como de confort utilizando una única fuente sostenible.
Con el objetivo de minimizar la energía que se utiliza para la climatización de las instalaciones, la planta de Henkel cuenta con un fuerte sistema de aislamiento térmico de tres capas en la fachada, en las ventanas y en la azotea. Las oficinas cuentan con una calefacción por suelo radiante mucho más eficiente que otros sistemas de calefacción. La electricidad que necesita la fábrica queda cubierta por el sistema solar fotovoltaico de 100 kW que se ha instalado en la azotea. Por otro lado, la planta incluye soluciones para evitar el gasto de agua y la contaminación lumínica. En este sentido, la fábrica cuenta con un sistema de aprovechamiento de aguas grises y pluviales que contribuyen a reducir el consumo de agua. La instalación de un sistema de iluminación LED inteligente y autorregulable en función de las necesidades permite reducir el consumo de energía. Para facilitar el uso del transporte eléctrico, el parking de la nueva planta dispone de estaciones de recarga para este tipo de vehículos.
También cabe destacar que desde su inicio se tuvo en cuenta crear espacios que mejoran la salud, seguridad y la sostenibilidad pensando en el bienestar de los trabajadores maximizando la iluminación natural en los espacios de trabajo, incrementando el confort térmico y acústico, habilitando zonas comunes de descanso como un área para café, una terraza para favorecer las vistas a exteriores con presencia de naturaleza, etc.