Una respuesta logística al e-commerce

Los diversos estudios realizados parecen señalar que la pandemia ha impulsado las compras online en segmentos seniors que hasta ahora habían estado algo al margen del fenómeno. Ya no es cosa sólo de consumidores jóvenes y cada vez son más las personas próximas a los 60 años que han hecho de la compra por internet un hábito. En este sentido, los expertos aseguran que las barreras generacionales se han roto, por lo que la compra on line es ya plenamente madura.

Además, España es el país que mejor ha sabido capitalizar la oportunidad del e-commerce, aumentando sus ventas un 41%, según apuntan los analistas de Google durante un encuentro reciente enfocado a tratar los retos del sector retail en el contexto post pandemia. Google estima que entre un 35% y un 45% del crecimiento acontecido en España se consolidará una vez superada la pandemia. En la misma línea, el boletín del INE sobre el comercio electrónico apunta al gran salto del comercio electrónico en nuestro país. Podemos ver que los retailers entienden el e-commerce como una oportunidad (y exigencia) de crecimiento y una forma de impulsar las ventas. Pero el canal de venta on line no es ya solo una opción para los retailers.

En definitiva, nos encontramos ante una tormenta perfecta que obliga a las empresas a responder a esta gran demanda, que cada vez conforma una parte más relevante de sus ventas. La tendencia es clara, si bien la compleja situación internacional derivada de la invasión rusa de Ucrania ha puesto a la cadena de suministros mundial en una tensión impensable hace unos meses, con lo que algunas empresas pueden llegar a tener la tentación de retrasar las inversiones necesarias para adaptarse al cambio. Los expertos apuntan que los problemas de producción derivados de los costes energéticos y la falta de aprovisionamientos están afectando la economía global y, por ende y de forma circunstancial, el consumo mundial pero no afectan las tendencias a largo plazo.

Sea como sea, no hay duda de que el e-commerce ganará porcentaje en el pastel de las compras, con una doble implicación en el ámbito logístico. Por un lado, la gestión del almacén, lo que implica a las operaciones de picking, y, por otro lado, la gestión de los envíos, con la complejidad de la clasificación. En ambos casos se observa un esfuerzo por las empresas proveedoras de soluciones logísticas para ofrecer soluciones que constituyan ventajas competitivas para sus clientes. Estas empresas exprimen su know how para surtir a fabricantes y a empresas de logística con las soluciones más ágiles máxime cuando vemos que las compras online las lideran productos físicos y que los clientes son cada vez más exigentes con los tiempos de entrega.

Para adecuarse a la demanda online de los consumidores, las empresas precisan de equipos compactos que puedan entrar en servicio en muy poco tiempo, con una alta estandarización y que resulten fácilmente escalables. Los proveedores de soluciones están diseñando equipos que buscan dar respuesta a la reducción del tamaño de los paquetes, con especificaciones de paquetes admisibles que están entre de los 600x400x200 mm y los 50x50x25mm, con pesos de unos pocos gramos. Son equipos con bandejas más pequeñas y salidas configurables con salida a contenedor, bolsa o rampa, que reducen significativamente la superficie ocupada y también la energía consumida, dato nada menor en las circunstancias actuales.

Junto a la reducción del tamaño de los paquetes, y justamente como consecuencia de ello, es preciso un aumento de la capacidad. El objetivo es obtener ratios de clasificación superiores a 10.000 paquetes/hora, lo que ya es posible gracias a la reducción de las bandejas/ventanas y a mecanismos de desvío con empuje positivo sobre la caja. Son sistemas capaces de clasificar a uno o ambos lados, con módulos de entrada, clasificación y salida configurables según distintos requerimientos, lo que les dota de una gran versatilidad en su uso que garantiza respuesta a la demanda.

En definitiva, ante la multiplicidad de necesidades, es esperable ver cada vez más clasificadores de distintos tamaños y tecnologías de desvío, tanto en empresas de paquetería como de preparación de pedidos, en funciones que van más allá de la clasificación de expediciones (shipping sorter), añadiendo valor a nuevos procesos que se pueden automatizar. Se precisan pues sistemas de clasificación que puedan entrar en servicio en muy poco tiempo, con una alta estandarización y que resulten fácilmente escalables.

En relación a la estrategia de picking, y cuando estamos hablando de centenares de pedido/hora con una tendencia a paquetes compuestos de menos unidades (tres unidades por pedido de promedio), entendemos que se imponen las soluciones producto a operario, en los que éste cuenta con una posición ergonómica para una óptima productividad que pueden llegar a las 800 líneas/hora: un sistema automatizado permite que los productos lleguen en secuencia para que pueda extraerse la cantidad correcta de acuerdo con lo que le determina la pantalla de ayuda al usuario.

Este sistema puede convivir con sistemas híbridos, que preparan y clasifican a la vez, apropiados para el B2C, a los que pueden aportar productividades similares a los sistemas producto a operario. Entre los conceptos híbridos basados en sorters también hay que mencionar la combinación de clasificadores con AMR, como los Pegasus de Amazon, que recogen el paquete desde el tobogán de salida del sorter y lo transportan hasta el punto de carga de la furgoneta.

Para afrontar la necesidad de clasificación, Vanderlande ha creado una nueva plataforma de integración modular, denominada Directsort que engloba equipos, software inteligente e incluso los servicios necesarios durante el ciclo de vida. Esta solución está diseñada en base a módulos configurables con su software específico ya integrado, lo que le permite responder a las necesidades actuales de cualquier almacén y adaptarse a las futuras modificaciones que precise el cliente.

Uno de dichos módulos es por ejemplo el clasificador Compaxorter, un clasificador horizontal de alta capacidad (12.600 paquetes por hora) diseñado para tratar una amplia variedad de productos, desde paquetes pequeños (tan finos como 2,5 mm) hasta tamaños de hasta 550 x 460 mm. Esto incluye artículos que tradicionalmente han resultado difíciles de clasificar con otros sistemas, como los productos envueltos en plástico retráctil, paquetes con formas irregulares e inestables. Compaxorter está disponible en dos configuraciones diferentes: semiautomatizado y totalmente automatizado. En el caso de la configuración semiautomatizada los operadores de las estaciones de trabajo ergonómicas alimentan los elementos en el sistema, mientras que cuando está totalmente automatizado, los elementos son “singulados” a partir de un flujo a granel.

Por su parte, el Crossorter es un clasificador tipo cross-belt presentado en diversas versiones y capacidades de hasta 18.000 bandejas/hora. Es adecuado para una amplia variedad de productos como sobres, bolsas, cajas y bandejas pero también puede clasificar artículos sueltos, como ropa y accesorios. Se utiliza principalmente para procesos de batch-picking y sistemas de cross-docking, y como clasificador de envíos. Esta solución incluye diversas versiones, es suficientemente flexible para manipular productos de hasta 1.500 x 800 mm, incluso de formas irregulares, con una fiabilidad del 99,9%.

Por último, para paquetes de mayor tamaño, el sistema Posisorter proporciona una clasificación positiva en base a zapatas deslizantes que pueden medir hasta 1.500 x 900 mm. Sus capacidades de transporte, junto con una alta precisión, contribuyen a una fiabilidad altísima: una clasificación errónea por cada 10.000 artículos. En su operativa, las zapatas de desvío se deslizan a lo largo de los carriers y empujan los productos suavemente hacia las rampas de salida en un movimiento controlado. El número de zapatas asignadas depende de la longitud de cada producto. Este sistema, que permite cambiar las zapatas en menos de 60 segundos, es configurable para clasificación a uno o dos lados y el número de zapatas dependen de la longitud de cada producto.

TIPSA da una respuesta inteligente a las distintas necesidades B2B y B2C en un contexto de crecimiento sostenido

En agosto de 2020 la empresa de transporte urgente TIPSA inauguró en Madrid su nueva plataforma central, equipada con una de las infraestructuras más modernas, y probablemente más grandes, de su sector. Este nuevo hub de 22.500 m² de nave principal, con 5.000 m² dedicados en exclusiva a la temperatura controlada y con una capacidad de procesamiento de hasta 32.500 bultos por hora, supone un nuevo paso en el compromiso de TIPSA por la innovación tecnológica y la sostenibilidad.

Gracias a dicha instalación, TIPSA ha podido gestionar con soltura retos recientes como han sido el auge del e-commerce o el transporte de tres de las cuatro vacunas contra la COVID-19 que se distribuyen en nuestro país.

Durante su construcción, TIPSA contó con los servicios de Vanderlande, empresa encargada de la automatización del hub, provisto de SCS 1200 core de instalación, Posisorter para temperatura controlada y Compaxorter para flyers y ecom. Y todo ello monitorizado con un sistema SCADA e integrado con los sistemas de negocio de la compañía de transporte urgente. El resultado se puede observar en el siguiente video: https://www.youtube.com/watch?v=njIq7tCa7Qw