La producción de pienso se estabiliza tras dos años de caída por una crisis multifactorial
La producción industrial de pienso se mantendrá estable en España este año, según la patronal Cesfac, tras dos ejercicios de una crisis multifactorial marcada por la guerra en Ucrania, la sequía, los costes de producción y la presión normativa que impactaron tanto al ganadero como al fabricante. Lo aseguró su presidente Fernando Antúnez, durante la celebración de la asamblea general ordinaria de esta asociación.
La producción industrial total de pienso en 2023 fue de 29,73 millones de toneladas, de las que el 96% se destinó al ganado. Ese balance de 2023 supuso un ligero retroceso, de apenas 11.500 toneladas menos, frente al año 2022 mientras que para este ejercicio se prevé una fabricación de 29,89 millones de toneladas, es decir, un ligero ascenso del 0,54 % anual.
La producción de pienso para cerdos es la más relevante porque el año pasado se obtuvieron 13,62 millones de toneladas, un volumen parecido al pronosticado para este ejercicio. Le siguen la categoría ‘vacuno, ovino/caprino y conejos’, con 9,96 millones de toneladas en 2023 y 9,95 millones calculadas para 2024.
Con estos datos en la mano, Antúnez habla de un “estabilidad” en la fabricación de piensos este año en línea con una tendencia a la estabilización de censos ganaderos tras varios ejercicios de retroceso, ya que recuerda que los fabricantes de pienso son el “reflejo” de la cabaña ganadera. El presidente de Cesfac indicó que esa bajada del número de cabezas se ha debido en los últimos años a diversos factores que han afectado más o menos a cada especie ganadera.
En el caso del porcino pone el foco en la sanidad animal porque cree que medidas como la reducción del uso de antibióticos “de alguna manera han mermado el número de animales en producción”. En el caso del vacuno de carne, destaca el impacto que tuvo la enfermedad hemorrágica epizoótica en la cabaña y posiblemente en el incremento de abortos aunque está esperanzado con el anuncio hecho recientemente por el propio ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, de que habrá una vacuna efectiva próximamente.
El vacuno y el ovino y caprino de leche han reducido su censo por su falta de relevo generacional que, cree, está “motivada muchas veces por la falta de rentabilidad”. El sector avícola es el único que, en esta crisis, ha incrementado sus censos y parece que ha sobrellevado estos factores.
Entre las tendencias positivas que ya se vislumbran están las próximas cosechas “buenas” de cereal a nivel nacional y mundial y los precios “están reflejando esa situación de cierta calma”. No obstante, es cauto porque “siempre” hay que estar pendientes de “factores externos”, como los de índole geopolítica.
La IA en la alimentación animal
En el desarrollo de la asamblea se celebró una mesa redonda sobre inteligencia artificial (IA) y alimentación animal en la que se le ha preguntado a la propia IA qué puede aportar a ese sector. La respuesta ha sido variada con aportaciones como optimizar las fórmulas nutricionales, predicciones precisas de necesidades nutricionales, mejorar la eficiencia de las cadenas de suministro o el desarrollo de nuevos productos innovadores.
El director de Alimentación Animal de Covap, Antonio Quijada, explicó la progresiva implantación de procesos basados en la IA en esta cooperativa. Fundamentalmente la están utilizando para análisis de datos, a través del uso del Internet de las Cosas (IoT) con sensores para la medición de la producción y algo en robótica. Todo ello ofrece oportunidades en la “toma de decisiones”, una mayor “competitividad, eficiencia, reducción de insumos o un menor uso de recursos”. Además, cree que la formación del personal y contar con una base de datos “fiable” es esencial para la implantación de esta tecnología en una empresa.