Sobrecoste del 60% para los ganaderos extensivos de la Comunidad Valenciana por la sequía
La falta de pastos naturales y de agua por los efectos de la sequía provoca ya un sobrecoste de más del 60% en los ganaderos en extensivo (ovino-caprino y vacuno) de la Comunidad Valenciana, según las primeras estimaciones de La Unió Llauradora i Ramadera.
La Unió ha comprobado la difícil situación en la que se encuentran los ganaderos de las zonas de interior de la Comunidad Valenciana. Los pastos están secos y deben recurrir cada vez más a alimentación a través de piensos, lo que encarece sus costes, y a todo ello se junta también la falta de agua para los animales. En este sentido, muchas de las balsas se encuentran secas y las lluvias de las últimas semanas fueron únicamente un respiro pasajero porque las pérdidas son en muchos casos irreversibles.
La escasez de lluvias y las altas temperaturas han causado un déficit hídrico en la ganadería extensiva, obligando a los ganaderos a incurrir en costes adicionales para el abastecimiento de agua. Además, la falta de pastos naturales ha conllevado a un aumento en los costes de alimentación del ganado. Estos factores han reducido la competitividad de los ganaderos frente a sus homólogos de otras comunidades autónomas, debido a los costes adicionales no cubiertos por el sistema de seguros agrarios.
La Unió lleva desde enero de este año enviando escritos a la Generalitat, a través de la Conselleria de Agricultura, para que establezca medidas y ayudas extraordinarias para los ganaderos extensivos y los productores de cultivos de secano. “La burocracia de nuestras administraciones es un obstáculo muy importante para solucionar los problemas de agricultores y ganaderos valencianos y este caso de los ganaderos extensivos es un buen ejemplo, pues podría ocurrir que cuando lleguen las cubas de agua a las explotaciones ganaderas estemos ya con el verano a punto de concluir o incluso con la estación ya acabada”, señala Carles Peris, secretario general de La Unió.
Los ganaderos extensivos lanzan una señal de socorro a la administración valenciana. “La situación es muy crítica y hemos tenido épocas con problemas de sequía, pero nunca como hasta ahora. Estamos en julio y ya llevamos cuatro meses en los que normalmente no tendríamos que haberles suministrado tanto pienso y forrajes a los animales, pero lo estamos haciendo ante la falta de pastos, forrajes y cereal para cosechar. Y con el agua igual, estamos en las últimas y trayendo desde primero de año cisternas de agua por nuestra cuenta. Todo lo tenemos que comprar y los gastos se disparan”, señala Eliseo Puig, productor de ovino y vacuno de carne con explotaciones en Ares y Vilafranca.