Cinco recomendaciones básicas para una cubrición exitosa en ovino de carne
La cooperativa Oviaragón ha publicado en su página web una serie de recomendaciones para que los ganaderos puedan afrontar de forma exitosa la cubrición de las ovejas dirigidas a la aptitud cárnica, con el objetivo de aumentar la rentabilidad de las explotaciones.
Oviaragón ofrece cinco recomendaciones de cara a una cubrición exitosa:
- Valora correctamente la calidad del alimento del que dispones. Es fundamental en forrajes y ensilados, pero también es importante valorar la calidad de los pastos y prados (qué me aportan y de qué carecen), y tener en cuenta el tiempo útil de pastoreo.
- Valora la Condición Corporal (CC) de tus animales. Es fácil y sólo precisa de práctica. La persona que mejor lo puede hacer es la que está continuamente con los animales. Es fundamental en el caso de las ovejas tener en cuenta cómo han terminado la lactación (que también dependerá de cómo empezaran esta) y actuar lo antes posible, para que el esfuerzo que hacemos en primavera obtenga el mayor beneficio.
- Incremento del plano de alimentación o flushing. En ovino, mejora de forma significativa los resultados productivos. El incremento debería ser fundamentalmente energético. Aunque las necesidades de proteína también se ven incrementados en la cubrición, por lo que el tipo de suplemento debe depender de la alimentación de base que están recibiendo los animales en ese momento. Debe llevarse a cabo desde 2-3 semanas antes del parto hasta 2-3 semanas después de la retirada de los sementales. Es sobre todo importante en primavera, cuando las ovejas están en anestro, y nos permite mejorar los resultados de los tratamientos hormonales, las tasas de implantación de embriones, y de ovulación.
- Ten en cuenta a tus machos. Su condición corporal es fundamental para asegurar el éxito de cualquier cubrición. Deben entrar en cubrición en el mejor estado posible.
- Utiliza productos alimenticios de calidad. Estos te ayudan a equilibrar lo que tienes, recuperan a los animales de manera óptima y favorecen tanto la salida en celo como la implantación de los embriones.