¿Sabías que un solo neumático recauchutado de camión tiene un impacto ecológico de 7 árboles?
El recauchutado, renovado o reconstrucción de neumáticos, se emplea desde hace más de un siglo para darles una segunda vida y consiste básicamente en aplicar una nueva banda de rodadura sobre la carcasa de uno desgastado. De esta forma, el neumático recauchutado debe ofrecer las mismas garantías que uno nuevo.
Con 500.000 neumáticos renovados al año, la industria del recauchutado en España incrementa sus cifras, impulsada por el menor coste del neumático, una calidad, seguridad y eficiencia similar a un neumático nuevo, y sobre todo por el ahorro de energía y la reducción de emisiones contaminantes. (La Asociación Española de Neumáticos Reciclados, AER, cifra en cien mil los empleos directos, indirectos e inducidos de esta industria, que ha sido pionera del reciclado en nuestro país).
Y es que las cifras que arroja esta actividad industrial de recuperación y reciclaje, son muy importantes. Se estima que un neumático renovado reduce el consumo de recursos naturales en un 70%, el de agua en un 19%, evita la emisión de CO2 en un 24% y minimiza los impactos en la tierra y los suelos fértiles empleados en el cultivo de caucho natural en un 29%.
Y es que la fabricación de un neumático nuevo tiene un impacto ambiental considerable. En la producción de una rueda de camión (de unos 70 kilos de peso) se emplean 141,2 litros de petróleo, 18.326 litros de agua, y se emiten 338,8 Kg. de CO2. Sin embargo, producir un neumático renovado a partir de una carcasa de camión usada es más barato incluso que uno nuevo ‘low-cost’ porque se reduce la materia prima y el gasto energético, con un ahorro de 98,33 litros de petróleo, 8.209 litros de agua, 234,3 Kg. de emisiones CO2. (Cálculos aproximados, extraídos del estudio ‘Análisis de la eficiencia medioambiental del recauchutado de neumáticos’ de la Cátedra para la Investigación y Formación sobre neumáticos reciclados de la Universidad Miguel Hernández. Se consideran todos los neumáticos fuera de uso recogidos por TNU, de turismo, de medida 195/65R15, peso de 7,5 Kg. Por cada neumático renovado se dejan de emitir 32,8 Kg de CO2 y de consumir 10,5 litros de petróleo por unidad. **United States Environmental Protection Office of Water EPA 810-F-95-001 Agency.)
Actualmente el 25% del transporte de mercancías por carretera en la Península Ibérica utiliza neumáticos recauchutados y la práctica totalidad de los aviones comerciales los utiliza en sus trenes de aterrizaje. En este proceso de economía circular, se emplea un tercio de la materia prima con un 80% menos de emisiones de CO2, generándose menos residuos al alargar su vida útil. Además, en muchas circunstancias, se pueden recauchutar 3 o 4 veces durante su vida útil, multiplicando sus beneficios ambientales y ecológicos. En conclusión, utilizar neumáticos renovados es beneficioso no solo para la economía sino también para el medio ambiente porque el impacto ecológico de una unidad es equivalente al de siete árboles. (Estudio de Bridgestone España)
El reciclado de los neumáticos fuera de uso, es clave para avanzar hacia un futuro sostenible. En este sentido, a través de la campaña divulgativa ‘¿Sabías que…?’ TNU (Tratamiento Neumáticos Usados) reivindica las ventajas ecológicas, económicas y sociales que representa dar una segunda vida a los neumáticos fuera de uso, para que esta manera se pueda avanzar hacia un futuro más sostenible.