La mejora del mercado español y la buena dinámica exportadora configuran un ejercicio favorable para el sector textil algodonero
Según la Asociación Industrial Textil del Proceso Algodonero, la industria textil de proceso algodonero inició una tendencia de mejora a mediados del año 2014, situación que se ha confirmado en el ejercicio actual. Esta evolución favorable se ha basado en el dinamismo de las exportaciones y en la recuperación de la demanda interior, reflejo de la mejora de la economía española y de la mayor propensión al consumo.
En el apartado exterior, las exportaciones han alcanzado un nuevo récord ya que se espera cerrar 2015 superando los 1.000 millones, con un aumento del 8% sobre el año anterior y de un 25% sobre el nivel de 2010. Los tres subsectores del algodón (hilados, tejidos y ropa de hogar) han tenido un comportamiento favorable aunque cabe citar el apartado de ropa de hogar por su mayor crecimiento. Los principales clientes del sector algodonero siguen siendo Marruecos y los países de la UE (Italia, Portugal, Francia y Alemania) mercados que representan el 60% del total exportado.
Por su parte, la mejora de la economía española se ha reflejado en un aumento del gasto de vestuario que empezó a notarse a mediados de 2014 y ha continuado en términos positivos a lo largo del ejerció actual. Esta evolución también ha provocado un aumento de las importaciones textiles y de vestuario en general (13% en 2015) y de las de productos algodoneros (+9, %) que también superarán los 1.000 millones.
La mejora de la demanda de productos algodoneros se ha traducido en un aumento de la producción del sector del 1% en 2015, con un incremento del 7% de los hilados y un retroceso del 6% de los tejidos. También es destacable la evolución de la cifra de negocios y del empleo que siguen en términos positivos dejando atrás los retrocesos de años anteriores.
En el entorno del sector se ha de destacar la evolución del precio de la fibra de algodón que, como otras materias primas, ha entrado en una fase depresiva en la que ha influido la política de suministros de China, que es el principal productor y consumidor mundial de esta fibra. A pesar de la baja de los precios, el consumo de algodón no se ha beneficiado enteramente de este hecho ya que las fibras sintéticas, en especial el poliéster, también han seguido una trayectoria descendente al estar su precio ligado al del petróleo del que derivan.
En el campo exterior, la baja del euro respecto al dólar ha sido un factor positivo para las exportaciones dirigidas al área de la moneda norteamericana, sin embargo, las divisas de los países emergentes han experimentado fuertes ajustes a la baja que implican una mayor competencia en los mercados mundiales y mayores dificultades de venta en los citados países.
Las previsiones para el año 2016 son prudentes ya que, a pesar de la mejora en el mercado interno, las exportaciones continuarán siendo clave para la industria del proceso algodonero. Al respecto, la evolución de los principales clientes, los países de la UE, y la situación incierta de la economía mundial determinarán si puede consolidarse esta etapa de crecimiento.