Opinión Info Opinión

La letra, con buen aire entra

Policarpo González del Valle, Ingeniero ICAI. Director-socio de Aire Limpio

23/05/2022
Tras el estallido de la pandemia, el control de contagios en los centros educativos ha sido siempre una de las mayores preocupaciones para tratar de frenar la pandemia, algo lógico si se tienen en cuenta no solo la cantidad de personas que pasan por ellos a diario, sino el nivel de convivencia existente y la cantidad de horas que tanto profesores como alumnos pasan en sus instalaciones.

Muchos de nosotros vinculamos el inicio de la pandemia del COVID en España al día en que para contener la propagación del coronavirus del Ejecutivo regional de Madrid decidió incluir entre su batería de medidas restrictivas el cierre de colegios y universidades madrileñas, tanto públicas como privadas. Fue una medida de impacto social que afectó solo en la Comunidad de Madrid a más de un millón y medio de alumnos de un día para otro, concretamente del 9 al 10 de marzo de 2020, cifra que por sí sola pone de manifiesto el peso que la comunidad educativa, y sus alumnos, tienen en el conjunto de España.

Desde esa fecha, el control de contagios en los centros educativos ha sido siempre una de las mayores preocupaciones para tratar de frenar la pandemia, algo lógico si se tienen en cuenta no solo la cantidad de personas que pasan por ellos a diario, sino el nivel de convivencia existente y la cantidad de horas que tanto profesores como alumnos pasan en sus instalaciones.

Imagen

Pasados dos años, y a pesar de la complejidad que nos ha traído el SARS-Cov-2, seguimos observando cómo, al margen de las vacunas, son las iniciativas más sencillas las que mejor nos han defendido y están defendiendo del virus. Iniciativas como el uso de mascarillas, la distancia social o la ventilación, todas de puro sentido común, que se han convertido durante todo este tiempo en nuestros mejores aliados y que nos han permitido interiorizar que controlar lo que respiramos o, mejor dicho, lo que no respiramos, es un elemento clave para evitar enfermedades y contagios.

Tras más de dos décadas vinculados al sector de la calidad del aire interior, ofreciendo soluciones innovadoras y liderando proyectos diferenciales para nuestro segmento, en Grupo Aire Limpio siempre hemos sido de la opinión de “más vale tarde que nunca”. Pero también de otra tan popular como la anterior, igualmente enraizada en nuestro refranero y perfectamente aplicable a nuestra actividad: “las cosas bien hechas, bien parecen”.

Aplicado a la calidad de aire interior, esto se traduce en que, dado que pasamos la mayor parte de nuestras vidas en interiores de edificios, efectivamente más vale ventilar que no hacerlo. Pero también en que es necesario ventilar correctamente; hacerlo con criterio. Muy especialmente en los entornos educativos, donde además de proteger la salud de las personas, la mayor parte de ellas en pleno desarrollo, una adecuada gestión de la calidad de aire interior es prioritaria para evitar problemas de desempeño cognitivo. Porque la calidad del aire que respiramos no sólo impacta en nuestra salud, sino en nuestra capacidad de concentración y en nuestro aprendizaje.

Imagen

Aunque es común asociar la calidad de aire interior a los niveles de CO2 existentes, lo cierto es que ceñirnos únicamente a este parámetro es simplificar mucho la ecuación, algo habitual, cómo no, en los diferentes tipos de centros educativos. No es suficiente con ventilar, con fijarnos un valor límite de dióxido de carbono porque, a corto y medio plazo, centrarnos únicamente en este indicador puede darnos problemas. Es necesario profundizar mucho más, con herramientas avanzadas de cálculo que igualmente sean capaces de medir el nivel de partículas en suspensión, la presencia de compuestos volátiles orgánicos… Establecer un protocolo de ventilación y analizar cada dato para saber qué nivel de contaminación tenemos en cada momento y cómo está afectando a los ocupantes.

Es cierto que en nuestras escuelas y centros educativos las ventanas y los radiadores han sido tradicionalmente las herramientas utilizadas para regular temperatura y ventilación, aunque en espacios de uso público no sean los “sistemas” más adecuados. Y ello a pesar de que sabemos, desde hace ya mucho tiempo, que estos sistemas, además de obsoletos, no son asumibles por varios motivos. En primer lugar, porque generan concentraciones de CO2 muy elevadas, con el efecto pernicioso que ello tiene en la salud de quienes ocupan estos edificios. Pero también porque estas concentraciones de dióxido de carbono y compuestos volátiles orgánicos producen un efecto cognitivo que genera despiste y dificulta, por tanto, el aprendizaje. Unas consecuencias que no son asumibles para una sociedad moderna como la actual, en la que por suerte ya hemos interiorizado que controlar lo que respiramos o, mejor dicho, lo que no respiramos, es un elemento clave para evitar enfermedades y contagios.

Imagen

Hemos, por tanto, de dar una solución urgente; una solución estratégica que seamos capaces de abordar para que, en nuestros centros educativos, bien sean colegios, escuelas, universidades, colegios mayores, residencias de estudiantes e incluso bibliotecas, se respire una buena calidad de aire. Una solución que, además, sea sostenible y que nos permita disfrutar de una calidad de aire interior óptima con un mínimo consumo de recursos naturales. Una solución que ya existe, pues en Grupo Aire Limpio llevamos meses incorporando nuestro SMoCAI, un sistema de monitorización de calidad de aire basado en un software Cloud, con análisis de BigData, de fácil configuración y amigable al usuario, en estos entornos con resultados muy favorables.

Pionera en nuestro sector, SMoCAI ofrece una medición continua en tiempo real de los niveles de CO2, PM2.5, PM10, TVOCs, temperatura y humedad, desde módulos de sensores distribuidos en el edificio, con conectividad inalámbrica en una red encriptada. Cuenta con un algoritmo que analiza constantemente los datos de exposición de los contaminantes del ambiente y ofrece a tiempo real el índice de calidad del aire, lo que permite tomar decisiones de forma predictiva y actuar sobre los sistemas de ventilación, climatización y purificación del aire.

Así pues, “más vale tarde que nunca”. Y aunque los Sistemas de Gestión de Calidad de Aire Interior (SGCAI) hayan podido llegar tarde, ya están aquí. Sistemas como el nuestro que, lejos de ser una necesidad y una ventaja, debería contemplarse como una obligación, especialmente en los entornos educativos que verdaderamente se preocupen por sus alumnos, docentes y por el medio ambiente. Porque está más que demostrado que gracias a estos sistemas no sólo reducimos, por medio de una ventilación inteligente y adecuada, por ejemplo, los contaminantes que afectan a la salud de las personas, sino también el consumo de energía en los edificios.

Según la Universidad de Harvard, los nueve factores que determinan que un centro educativo pueda ser calificado como sano son la calidad de aire, la ventilación, la temperatura, la humedad, el polvo y las plagas, la seguridad, la calidad del agua, el ruido, y la luz y las vistas. Nueve factores de entre los que el aire es uno de los más relevantes, y en cuya calidad inciden algunos de los otros ocho, como por ejemplo la ventilación, la temperatura, la humedad…

Así las cosas, si tenemos las evidencias científicas, el aval de universidades de prestigio y soluciones como SMoCAI… ¿a qué esperamos para atajar, de una vez por todas, el problema?

"Aunque los Sistemas de Gestión de Calidad de Aire Interior (SGCAI) hayan podido llegar tarde, ya están aquí. Sistemas como el nuestro que, lejos de ser una necesidad y una ventaja, debería contemplarse como una obligación, especialmente en los entornos educativos que verdaderamente se preocupen por sus alumnos, docentes y por el medio ambiente"

Empresas o entidades relacionadas

Aire Limpio 2000, S.L.

Comentarios al artículo/noticia

Deja un comentario

Para poder hacer comentarios y participar en el debate debes identificarte o registrarte en nuestra web.

Suscríbase a nuestra Newsletter - Ver ejemplo

Contraseña

Marcar todos

Autorizo el envío de newsletters y avisos informativos personalizados de interempresas.net

Autorizo el envío de comunicaciones de terceros vía interempresas.net

He leído y acepto el Aviso Legal y la Política de Protección de Datos

Responsable: Interempresas Media, S.L.U. Finalidades: Suscripción a nuestra(s) newsletter(s). Gestión de cuenta de usuario. Envío de emails relacionados con la misma o relativos a intereses similares o asociados.Conservación: mientras dure la relación con Ud., o mientras sea necesario para llevar a cabo las finalidades especificadasCesión: Los datos pueden cederse a otras empresas del grupo por motivos de gestión interna.Derechos: Acceso, rectificación, oposición, supresión, portabilidad, limitación del tratatamiento y decisiones automatizadas: contacte con nuestro DPD. Si considera que el tratamiento no se ajusta a la normativa vigente, puede presentar reclamación ante la AEPD. Más información: Política de Protección de Datos

REVISTAS

NEWSLETTERS

  • Newsletter Equipamiento para Centros Educativos

    06/11/2024

  • Newsletter Equipamiento para Centros Educativos

    02/10/2024

ÚLTIMAS NOTICIAS

OPINIÓN

OTRAS SECCIONES

SERVICIOS