El mal uso de esta calculadora lleva a errores de subdimensionado del 70% al 100% para colegios y de un 112% a un 150% para guarderías
La incomprendida calculadora de Harvard
En agosto de este año, la Fundación Schools for Health para la mejora de la salud de niños y jóvenes en el ámbito del colegio publicó una guía que nos indicaba cómo saber si la tasa de ventilación de las aulas era la adecuada para el correcto comienzo del curso escolar ante la situación actual de la pandemia del COVID-19. El estudio nos indica un método para determinar la capacidad de renovación del aire de los sistemas de ventilación en las escuelas y si el caudal movido por estos era suficiente o no.
El impecable tratamiento técnico de la guía preveía la posibilidad de no poder ventilar correctamente y abría la puerta, mucho más que correcta y aconsejable, de suplir esta carencia con sistemas de purificación de aire basados en filtro HEPA. El caudal no aportado por aire exterior se compensaba por ese mismo caudal de aire purificado. Para ello nos enlazaba con una calculadora de selección de equipos basada en las características técnicas de los mismos.
Este enlace, nos lleva a una hoja de Excel donde con solo introducir las dimensiones del aula nos daba la característica del purificador necesario. Esta característica se basaba en el CADR (caudal de aire filtrado) que debía de cumplir el equipo.
El hecho de solo considerar el volumen de la sala dejando a un lado la ocupación no es acorde con la normativa española, pero que estuviera basada en estándares ASHRAE 62.1 me llevó a indagar en esta, a primera vista, contradicción.
Efectivamente, los cálculos eran exactos, la aplicación de los mismos correcta, pero no aplicables para la realidad a la que nos enfrentamos en los colegios españoles.
Si analizamos cómo se aplican los cálculos debemos ir a la hoja 'Readme', donde explica con detalle los datos tenidos en cuenta para ello.
Este planteamiento sería correcto bajo estándares ASHRAE pero estaría fuera de Norma para España, por:
- RITE ventila personas, no superficies.
- Los caudales RITE son dos, escuelas y aulas en general 45 m³/h persona y guarderías 72 m³/h persona.
La verdad es que este aspecto se podría obviar si el resultado final fuera práctico, pero no lo es. El parámetro fundamental del cálculo se basa en el aforo, mejor dicho, densidad de aforo, que la calculadora tomaba como base de cálculo. Este valor era de 25 personas en una sala de 1.000 pies² (92 m²), impensables en España donde en 40 m² acoplamos cómodamente a esas 25 personas.
El mal uso de esta calculadora lleva a errores de subdimensionado del 70% al 100% para colegios y de un 112% a un 150% para guarderías, nada desdeñable, pero sobre todo al error de sentirse seguro por haberlo hecho bien bajo estándares mucho más que avalados.
El hecho es que para un aula de 50m² nos indica como buena, con “ventilación natural típica” de 1.5 renovaciones/hora y con una ocupación de 13 personas, un aporte purificado de 3.1 renovaciones/hora.
Para nuestras ocupaciones, 25 personas en 50m², las tasas de nuestra ventilación indican entre 7-8 renovaciones/hora, bien dicho, 1.125 m³/h filtrado mediante prefiltro F6 y filtro F8, a los que si restamos esa 'ventilación natural' de 1.5 renovación/hora, más que dudosa, nos indica una tasa de aire purificado de 6.5 renovaciones/hora. Dato muy alejado de lo obtenido por la Calculadora.
Como se indicó anteriormente este error se multiplica en guarderías.
Como resumen final debemos indicar que si bien, la calculadora es correctísima bajo Norma ASHRAE, su aplicación directa en España es inviable y peligrosa. Además, calcular caudales de renovación de aire sin conocer el aforo es muy arriesgado.
Con los estudios llevados a cabo por los equipos de I+D+i de Keyter se ha desarrollado AirSanit, Unidad de Tratamiento de Aire y Purificación de Keyter que ya ha obtenido la Certificación Anti-COVID del Instituto Nacional de Técnicas Aerospaciales de España.