Cómo se debe inspirar a los jóvenes para que opten a carreras STEM
Actualmente no hay suficientes jóvenes en las disciplinas académicas relaciones con ciencias, tecnología, ingeniería y matemáticas, también conocidas como STEM. Esta escasez de habilidades a nivel global podría seguir aumentando y para abordar este problema Alistair Cox, CEO de la consultora de recursos humanos Hays, cree que todos podemos hacer más.
La escasez en relación al número de personas que estudian asignaturas STEM contribuye a que no se pueda satisfacer la demanda de este tipo de trabajadores en el sector. En su última publicación “Por qué necesitamos más jóvenes en STEM”, publicado en Linkedin Influencer, Alistair Cox afirma que padres, escuelas, empresas y gobiernos de todo el mundo deben ayudar a abordar el problema animando a los jóvenes a que opten por las asignaturas STEM.
Tal como asegura Alistair “debemos llenar este vacío y para conseguirlo es primordial alentar e inspirar a nuestros jóvenes para que obtengan las calificaciones necesarias y puedan ser admitidos en carreras STEM. Si por el contrario no lo hacemos, la situación que se ha logrado en el área de innovación podría decaer”. Por este motivo, ofrece las siguientes recomendaciones para que sirvan de inspiración a las nuevas generaciones:
Acabar con los mitos y cambiar las percepciones
La baja participación que existe en este tipo de asignaturas se debe a la percepción que tienen los alumnos. Son carreras impopulares, que muchos consideran aburridas e incluso demasiado difíciles. Alistair opina que no lo son, y que se debe educar a los jóvenes para que conozcan la gran variedad de salidas que existen dentro de las STEM. “Los profesionales STEM están a la orden del día, están resolviendo problemas del mundo real y juegan un papel clave en la configuración de nuestro futuro. Estas trayectorias profesionales son las más emocionantes pero, lamentablemente, no se las conoce lo suficiente” añade Alistair. Por tanto, para abordar los mitos de las STEM, es importante empezar a entender que la responsabilidad recae en casa, pero también en los instituciones educativas, empresas y gobiernos. “Es fundamental que traten de presentarlas como una alternativa atractiva y accesible para los estudiantes. Además, de proporcionarles oportunidades reales con las que puedan sentirse cómodos y, por tanto, dispuestos”.
“Los profesionales STEM están a la orden del día, están resolviendo problemas del mundo real y juegan un papel clave en la configuración de nuestro futuro".
Las escuelas deben actuar como activadoras de interés
Las escuelas deberían alentar a los alumnos a estudiar estas materias y son un buen lugar para comenzar a ofrecérselas como una opción profesional. Las STEM son disciplinas académicas rigurosas, alineadas con las necesidades reales de los negocios y se imparten a lo largo de todo el ciclo educativo, no sólo cuando llega la hora de tomar una decisión sobre el futuro del estudiante. Existe una gran cantidad de información que se podría facilitar a los jóvenes para ayudarlos a tomar mejores decisiones sobre su vida y futuro. “Nuestras instituciones deberían implicarse más y empezar a tratar a los alumnos como adultos, ya que necesitan estar informados en todo momento acerca de las habilidades que se demandan a nivel laboral y las oportunidades disponibles para ellos”.
"Existe la percepción de que las STEM non carreras impopulares, que muchos consideran aburridas e incluso demasiado difíciles".
Las empresas deben desempeñar su papel
También es injusto esperar que las escuelas resuelvan el problema por sí solas. Las empresas deben ayudar a cerrar la brecha que existe entre escuela y trabajo. Para hacerlo, Alistair sugiere que las organizaciones ofrezcan puestos laborales a los que todavía están estudiando, ya que trabajando en entornos STEM podrán detectar cuáles son las salidas profesionales. Otra recomendación es que las propias empresas eduquen acerca de las carreras STEM. Por ejemplo, Facebook ha lanzado una serie de videos educativos explicando cómo funciona la inteligencia artificial con la esperanza de atraer a más personas hacia este campo. “Las empresas tienen un gran conocimiento acerca de cuáles serán las habilidades más demandadas en el futuro y esto se debería utilizar para dar forma a los currículums y a las orientaciones profesionales de los estudiantes tanto en las escuelas como en las universidades. Estas empresas deberían mostrar cómo las lecciones más teóricas se aplican al ámbito laboral ya que, de esta manera, el alumno será capaz de percibir qué oportunidades brinda una carrera STEM.”
Abrir puertas mediante políticas gubernamentales
Otra razón potencial para que los jóvenes eviten las asignaturas STEM puede deberse a las barreras para alcanzar las calificaciones que se piden para este tipo de carreras así como la calidad formativa de las mismas. Basándose en su propia experiencia como aprendiz en el British Aerospace a principios de los años ochenta, Alistair se pregunta si las prácticas podrían resolver algunos de los problemas que estamos presenciando en estas áreas. “Los gobiernos deberían intervenir más en los procesos de aprendizaje con el objetivo de desarrollar nuevas oportunidades profesionales y de formación en las materias STEM. Una vez más, la colaboración entre gobiernos, empresas y escuelas es fundamental para conseguirlo”. Si los gobiernos, empresas e instituciones educativas no empiezan a cambiar la percepción y a crear nuevas oportunidades, los jóvenes no verán las carreras STEM como una opción académica. “Con frecuencia hablo con empresarios que temen que la productividad decaiga si continúan disminuyendo las habilidades técnicas y lo cierto es que si no actuamos, millones de jóvenes se perderán una carrera maravillosa”.