El I Concurso Interescolar Nacional de Programación y Robótica de Fundación Telefónica ya tiene ganadores
Durante el curso escolar, alumnos de casi 400 colegios han trabajado en equipos creando soluciones tecnológicas innovadoras para participar en el I Concurso Interescolar Nacional de Programación y Robótica, una inciativa de Fundación Telefónica para fomentar las vocaciones STEM.
La gran final del Concurso se celebró el 22 de junio en el Espacio Fundación Telefónica, en un evento en el que se conocieron los proyectos mejor valorados por el jurado. Previo al acto, se pudo visitar la feria con algunos de los trabajos realizados por distintos colegios.
En el evento, intervino Jorge Luengo, el mago de las matemáticas, como maestro de ceremonias, y se contó con Antonio García, programador de 8 años de edad y alumno de la Universidad de Valladolid; Emilio Gilolmo, vicepresidente ejecutivo de Fundación Telefónica; y Alejandro Díaz-Garreta, director de Educación de Fundación Telefónica. Educación digital, e-health, Internet de las Cosas y Smart Industry son las áreas contempladas en el I Concurso con el que Fundación Telefónica premió la tecnología y la innovación aplicadas al ámbito educativo. La competición consistió en que profesores y alumnos formaran equipos para el desarrollo de soluciones tecnológicas innovadoras en las cuatro categorías.
Un arpa láser, un monitor de ritmo cardíaco, un auténtico guardián de domicilios, un brazo robot que imita el movimiento humano son los proyectos ganadores del ‘I Concurso Interescolar Nacional de Programación y Robótica’. Puede consultarlos en este enlace.
Esta iniciativa, que contó a lo largo del curso con la inscripción de 1.457 proyectos, 395 colegios e institutos, 1.862 profes y 5.571 alumnos, forma parte de los proyectos educativos de la Fundación Telefónica para acercar la tecnología a las aulas y que los colegios se sumen al desafío digital. “De este modo, colaboramos en empoderar a las escuelas en materias de programación y robótica, despertar el interés en la sociedad por esas materias y desarrollar el pensamiento computacional en los jóvenes como un ingrediente vital del aprendizaje de campos como la ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas (STEM)” declaran desde la fundación.
