El control de accesos a los edificios, a debate en una jornada organizada por Asefave

El pasado mes de diciembre, la Asociación Española de Fabricantes de Fachadas Ligeras y Ventanas, Asefave, organizó una jornada en el Cosentino City de Madrid para debatir sobre la importancia de reparar en el control de accesos de nuestros edificios y analizar cómo la implicación de la arquitectura y la tecnología facilitan a las personas la accesibilidad a los mismos. Para ello, Asefave invitó a representantes de diferentes empresas del sector quienes pusieron varios ejemplos de edificios singulares que requieren una especial atención a estos aspectos.

Tras la inauguración y bienvenida de la jornada, llevada a cabo por el director general de la Asociación, Pablo Martín, tuvieron lugar tres interesantes presentaciones en las que se hablaron de sistemas de evacuación y de sistemas de control de accesos tanto en edificios terciarios como residenciales.

Danel Mencía, director comercial de Procomsa, fue el encargado de presentar un sistema de control de accesos para el sector residencial: el lector biométrico de huella dactilar, “una solución segura -comentó Mencía- enfocada al acceso simple de la vivienda familiar” con la que tu dedo se convierte directamente en tu llave. Cuenta con un teclado integrado compatible con tecnología RFID que permite la posibilidad de combinar huellas y tarjetas.

“Se trata de un nuevo concepto de Puerta de Entrada fruto de la evolución de sistemas mecánicos a sistemas electrónicos enfocados a la seguridad, el confort de uso y la integración en hogares inteligentes”, afirmó el director comercial de Procomsa, añadiendo que el lector cuenta con una cerradura con paletones de disparo automático que se accionan al entrar la hoja en contacto con el marco, es decir, la cerradura se bloquea automáticamente al cerrar la puerta. Además, tiene posibilidad de integración en la puerta o colocación en pared, todo ello integrado en una solución estética atractiva.

Danel Mencía, director comercial de Procomsa.

“Es una solución de confort único, ya que nunca puedes quedarte cerrado fuera pues tu dedo siempre está a mano. Cuenta con la más alta seguridad al no haber peligro de pérdida o robo de llaves, tienes la máxima protección gracias a la tecnología de detección de ‘dedo vivo’, es un acceso no transferible y es mil veces más seguro que un código de 4 dígitos”, señaló Mencía haciendo hincapié en que el uso del lector biométrico de huella dactilar de Procomsa es muy intuitivo, cuenta con una sencilla instalación y la administración se hace a través de una App fácil de programar e instalar.

La configuración inicial es vía Bluetooth y permite la gestión de accesos de varios usuarios al contar con posibilidad de registro de varias huellas para distintas funciones, cuya administración se hace vía App. Además, tiene un software inteligente que puede detectar el crecimiento del dedo de un niño o pequeñas heridas, así como cambios de hábitos a la hora de pasar el dedo por el lector. “Utilizando el software de control de accesos para lector de huella, se puede tener un registro de las acciones originadas por cada usuario. Sólo el administrador tiene acceso a los logs. Cuenta con la posibilidad de almacenar hasta 99 huellas, con opción de control de hasta tres funciones del hogar por cada usuario con un solo lector de huella y tiene 5 años de garantía de calidad”, indicó Danel Mencía.

Sobre las funciones del control de accesos en un edificio terciario habló Iván Rodríguez, de Dorlet, quien comenzó su ponencia destacando que “invertir en seguridad mejora la competitividad de las empresas, pues una seguridad correctamente implementada aumenta la eficiencia” y añadió que, dentro de los sistemas de seguridad físicos, “el control de accesos es la primera barrera y la más eficaz y si a esto le sumas la tecnología (ciberseguridad), se generan sistemas de control eficientes que desembocan en la sencillez en la gestión”.

En esta línea, habló del control de accesos a vehículos (cuya implementación permite la lectura de matrículas, control de plazas libres y ocupadas, así como las plazas VIP de empresas y una intercomunicación por vídeo de las visitas) y del control de accesos a empleados y visitas (que permite la integración con Recursos Humanos, métodos de identificación RFID, Biométricos o mediante códigos QR, interfonía SIP y otras funciones especiales como el antipassback).

Con respecto a la gestión de visitas, Rodríguez señaló que “es imprescindible conocer las visitas presentes”, que el alta se hace de “manera muy rápida mediante reconocimiento OCR” (DNI, pasaporte, carnet de conducir…), permite tener identificadas las visitas gracias a la impresión de acreditaciones con diferentes diseños por zonas de acceso, así como la posibilidad de recogida de la firma en una Tablet electrónica y tiene cumplimiento LOPD con borrado de datos tras 30 días. Además, se permiten las solicitudes vía web mediante un pre-registro, con aviso a la persona a visitar y permite la comprobación del estado de las solicitudes. Rodríguez se refirió también al control de visita desatendida e hizo alusión a un kiosko Auto Check-In que cuente con un lector OCR de documentos, impresora de acreditaciones, Webcam, lector de código de barras o QR y otros lectores complementarios.

En esta línea, el representante de Dorlet habló de la integración del control de accesos con los ascensores, lo cual permite una gestión del flujo de personas, monitorización, reduce el tiempo de espera y supone un ahorro energético. En cuanto al acceso a salas especiales, el control de accesos permite la gestión de la información, acceso a los historiales médicos, acceso con doble identificación y acceso a zonas de alta seguridad y, en lo que respecta al acceso a documentación, existen cerraduras electrónicas para mobiliario, apertura por RFID con la misma tarjeta de acceso, así como registro y auditoría de las aperturas.

En Dorlet, tal y como informó Iván Rodríguez, “tenemos una solución para las evacuaciones: se reparte un terminal a cada jefe y se leen por código QR a todas las personas para controlar quién ha salido y quién no del edificio”. En esta línea, habló también del control de aforos poniendo el ejemplo de la Torre Iberdrola de Bilbao y, para finalizar, habló de la gestión del horario de los empleados señalando, como principales características, que es un sistema 100% cloud, integrable con DASSnet, con un interfaz fácil e intuitivo, con horarios detallados y precisos, que permite el registro del personal desplazado y el ahorro en los tiempos de gestión.

La última de las ponencias fue impartida por José Carlos Santamaría, responsable de prescripción de Cisa, quien analizó las vías de evacuación y su relación con el Código Técnico de la Edificación (CTE). Para poner en contexto, Santamaría repasó brevemente la historia y precedentes de los dispositivos antipánico indicando que “fue a finales del siglo XX cuando se implementan códigos y normas, prácticamente en todos los países, que regulan la instalación de estos sistemas en todos los edificios de pública concurrencia”.

La regulación de las vías de evacuación en el CTE (CTE DB-SI 3), según la exigencia básica SI3-Evacuación de ocupantes, indica que “el edificio dispondrá de los medios de evacuación adecuados para que los ocupantes puedan abandonarlo o alcanzar un lugar seguro dentro del mismo en condiciones de seguridad”. Además, señala que es obligatorio en los establecimientos de uso comercial o de pública concurrencia de cualquier superficie y los de uso docente, hospitalario, residencial público o administrativo cuya superficie construida sea mayor que 1.500 m².

Para calcular las vías de evacuación, el responsable de prescripción de Cisa afirmó que, a partir del tipo de edificio, el CTE define la densidad de ocupación, la geometría del edificio y su ocupación definen el número mínimo de salidas por planta y longitud máxima del recorrido y, finalmente, se define el ancho de paso de los elementos (puertas, pasillos, escaleras...).

José Carlos Santamaría, responsable de prescripción de Cisa.

Respecto a cómo se diseñan las puertas de los recorridos de evacuación, el CTE señala que “las puertas situadas en recorridos de evacuación con evacuación prevista de más de 50 personas deben ser abatibles (no correderas); ir acompañadas de un sistema de apertura sencilla por el lado de la evacuación (sin utilizar llave ni más de una acción); el dispositivo de simple acción debe cumplir la norma EN179 o EN1125 y la puerta debe abrir en el sentido de la evacuación”.

A continuación, José Carlos Santamaría comparó la EN1125 (barra antipánico) y la EN179 (manilla normalizadora) explicando que “en un edificio pueden convivir ambos elementos dependiendo del uso de cada zona”. En concreto, existen dos modelos normalizados de barras antipánico según EN1125:

• Tipo A: de empuje o de ‘toallero’
• Tipo B: de deslizamiento o ‘touch’

Asimismo, hay dos tipos de dispositivos según EN179:

• Tipo A: manilla normalizadora (el movimiento de salida debe ser hacia abajo)
• Tipo B: tipo pulsador o ‘PAD’ (el movimiento de salida debe ser hacia delante)

“Recientemente, y como excepción a lo que establece el punto 1 de SI 3-6, se permite la instalación complementaria a la de dispositivos de apertura de emergencia (barras antipánico EN1125) mediante la instalación de sistemas de apertura controlada eléctricamente según UNE-EN 13637. Se trata de sistemas de evacuación controlada mediante sistemas de control de accesos conectados a la central de incendios”, afirmó Santamaría, quien finalizó su intervención señalando los criterios para un dispositivo antipánico:

1. Las vías de evacuación deben de estar libres de objetos en su paso. Está totalmente prohibido incorporar elementos que impidan el uso en momentos con ocupación en el edificio.
2. El sistema de apertura debe ser sencillo de utilizar por personas no familiarizadas con el edificio. Según el CTE, “las puertas previstas como salida de planta o de edificio y las previstas para la evacuación de más de 50 personas serán abatibles con eje de giro vertical y su sistema de cierre o bien no actuará mientras haya actividad en las zonas a evacuar (…) bien consistirá en un dispositivo de fácil y rápida apertura desde el lado del cual provenga dicha evacuación, sin tener que utilizar una llave y sin tener que actuar sobre más de un mecanismo”.
3. El modo de apertura debe ser sencillo y evitar cualquier tipo de confusión en su maniobra. Según el CTE, “las puertas y su sistema de cierre (…) consistirán en un dispositivo de fácil y rápida apertura sin tener que utilizar una llave y sin tener que actuar sobre más de un mecanismo”.

Tras las ponencias, tuvo lugar una mesa debate en la que se intercambiaron opiniones acerca de las aplicaciones, ventajas y barreras del control de accesos.