Snom Technology traslada su sede a un espacio adaptado a las nuevas necesidades
Snom Technology acaba de anunciar el traslado de su sede central en la capital alemana a un nuevo espacio laboral más funcional. Desde que Snom se trasladó a sus oficinas en 2013, no solo la capital alemana ha cambiado radicalmente, sino también la forma de redefinir y vivir el trabajo.
Hace diez años, la ubicación en el norte de Berlín se seleccionó de acuerdo con los modelos y requisitos clásicos de la época. Así, los locales comerciales ofrecían al menos uno o varios despachos por departamento. Las amplias salas de reuniones y los salones permitían a los empleados intercambiar ideas entre sí.
“Cuando comencé en Snom, todavía se utilizaban jerarquías y segregaciones claras”, cuenta Gernot Sagl, director general de Snom, desde 2016. “El director general tenía su propio despacho ejecutivo y los departamentos estaban distribuidos en sus respectivas salas. Las reuniones interdepartamentales tenían lugar en los descansos o durante las juntas: romper eso siempre ha sido mi gran deseo”.
Un cambio a todos los niveles
Aunque forma parte de una gran corporación, Snom en Berlín ha mantenido su identidad y su objetivo de impulsar la innovación en el sector de las telecomunicaciones en su papel de pionero de la industria. Para lograr estos objetivos, la empresa también ha promovido en los últimos cuatro años el desarrollo de equipos interdisciplinares, que ya no piensan y trabajan en departamentos, sino más allá de ellos.
Este cambio, por sí mismo, llevó a los responsables de la empresa a la convicción de que era necesario un entorno de trabajo muy diferente. A esto se sumó el hecho de que Snom desarrolla un modelo de trabajo híbrido en todas sus sucursales: ya no se recurre a la oficina en casa solo en casos excepcionales, sino siempre que los empleados lo desean. Las nuevas prácticas laborales eran difíciles de conciliar con la antigua y rígida distribución de las salas.
Por eso, con los nuevos espacios, Snom no solo quiere acercarse de nuevo al centro de la ciudad, sino también abrirse en el sentido más estricto de la palabra. “Estoy convencido de que a veces también hay que cambiar espacialmente para romper con los viejos hábitos”, confirma Gernot Sagl.
En las nuevas salas se acomodan juntos los departamentos de ventas, gestión de productos, logística y marketing, y la dirección en medio de la acción. Otra gran zona está destinada a quienes acuden a la oficina solo ocasionalmente. Aquí, los empleados móviles se benefician de las llamadas tecnologías hot-desking, que les permiten sentarse en cualquier puesto de trabajo, sin comprometer la disponibilidad de los servicios habituales de telefonía y los recursos de red de toda la empresa. Las amplias zonas también ofrecen la oportunidad de celebrar reuniones informales con los compañeros. Pronto se dispondrá de salas silenciosas con protección acústica para conversaciones confidenciales o para cuando se precise una mayor concentración para el trabajo individual.
"Las nuevas estructuras abiertas rompen muchas divisiones de trabajo habituales y ponen patas arriba nuestra forma de trabajar, pero ya en las primeras semanas se han creado aquí sinergias y energías positivas que no teníamos en la antigua sede, ¡aunque todavía no hayamos desembalado todas las cajas!”, concluye Gernot Sagl.