El código abierto ayuda a aumentar la resiliencia de las empresas ante lo imprevisible

Los sistemas tradicionales de TI son la base de la arquitectura de cada organización, pero la rigidez de estas soluciones tiene sus inconvenientes. No siempre pueden garantizar un acceso rápido y amplio a las aplicaciones y servicios necesarios en un momento dado, especialmente a la luz de los constantes cambios que se están produciendo en el mercado de tecnología punta y transformación digital.

Las organizaciones necesitan sistemas de TI que satisfagan sus necesidades de rapidez, escalabilidad, optimización, al mismo tiempo que mantienen la estabilidad operativa. Y el software corporativo, debido a su rigidez, no puede hacerlo. En cambio, el código abierto garantiza una mayor adaptabilidad a las condiciones cambiantes y puede convertirse en la solución cuando hay que reaccionar rápidamente ante una crisis.

Un escenario como la pandemia, ha obligado a la mayoría de las organizaciones a reorganizarse. Como resultado, las más flexibles han sido las que mejor se han enfrentado a la crisis. Las empresas que tardaban años en desplegar nuevas tecnologías tras un profundo análisis de mercado, pruebas y formación, han tenido que actuar con rapidez para superar las dificultades y mantener la rentabilidad.

En una crisis global, cuando la toma de decisiones está condicionada por un riesgo enorme, las empresas deben centrarse en sus necesidades específicas. Y las tecnologías de código abierto pueden convertirse en la única oportunidad para aquellas que no tengan las herramientas o el personal que pueda reaccionar rápidamente en situaciones extremas.

Es probable que suframos las consecuencias de la pandemia durante algún tiempo. Sin embargo, hemos aprendido algunas lecciones valiosas. Nos ha abierto los ojos a los problemas de las organizaciones de todo el mundo: brechas en los sistemas de TI, falta de herramientas y seguridad adecuadas, o estrategias de desarrollo empresarial inadecuadas o inexistentes. Y hemos sido capaces de abordar algunas de estas consecuencias gracias a la capacidad de comunicarnos de manera rápida y fluida.

Los profesionales de TI han empezado a compartir sus conocimientos y experiencias y, siguiendo los principios del código abierto, han podido desarrollar conjuntamente soluciones y estrategias para combatir la COVID-19 y sus consecuencias. Independientemente de su ubicación geográfica, han podido crear aplicaciones, plataformas y sistemas para permitir a sus empresas operar ininterrumpidamente y estabilizar su rentabilidad.

Lo que nos hace ver que en la transformación digital se necesita contar no solo con la tecnología adecuada, sino también con las personas que pueden pensar de manera innovadora, trabajar por encima de las divisiones y abordar los problemas de manera conjunta.

El potencial del código abierto era conocido, pero nadie podría haber previsto lo útil que llegaría a ser. En el informe Estado del Open Source Empresarial 2020, de Red Hat, el 95% decía que el código abierto era importante para la estrategia de su empresa. Aunque ponían sus esperanzas en el código abierto como impulso clave de la transformación digital, los expertos han notado que se usa cada vez más en áreas reservadas al software propietario: análisis, administración de la nube, seguridad o almacenamiento de datos.

Muchos emprendedores han confiado en el código abierto. Además de sus beneficios, como el precio, también ofrece soluciones innovadoras y flexibles, que no tienen nada que envidiar al software propietario. Por el contrario, el código abierto puede servir como complemento a la rigidez de los sistemas corporativos, que no logran adaptarse a la realidad cambiante de una manera tan ágil. Su dinamismo permitirá a las empresas desarrollarse más rápidamente en la era de la transformación digital.