La asociación Aslan potencia el desarrollo digital de las Administraciones Públicas para que sean un referente
La Comisión de Relación con las Administraciones Públicas de Aslan, asociación que agrupa a más de 130 tecnológicas, ha analizado el impacto de la crisis de la COVID-19 en las infraestructuras digitales y la ciberseguridad de las Administraciones Públicas. La principal preocupación de este grupo de trabajo, que desde hace más de 10 años es el motor de la asociación, radica en la dificultad que han tenido los responsables tecnológicos de los distintos organismos públicos, para poner en marcha las infraestructuras digitales necesarias para mantener los servicios y puestos de trabajo.
La crisis ha supuesto una gran inversión en soluciones y dispositivos que garanticen el teletrabajo, pero los expertos de esta Comisión de coinciden en destacar que es necesario planificar y desarrollar una estrategia completa más allá del mero equipamiento y abordar proyectos completos de transformación digital, gestión y formación de equipos de trabajo en remoto.
Según Natalia García, presidenta de la Comisión de Aslan: «El teletrabajo sólo es posible tras una inversión en tecnología coherente y decidida. Se ha demostrado su potencial en estos meses críticos, ya no sólo como medida de contingencia ante cualquier otra pandemia, sino porque es una buena forma de mejorar la sostenibilidad de las ciudades, del medio ambiente e incluso de las familias. El modelo ha venido para quedarse y desde el ecosistema de empresas que conformamos Aslan podemos ayudar a potenciarlo».
La asociación Aslan apuesta por la transformación digital, tanto en el sector privado como en el público, para mejorar la productividad
Los miembros de la organización coinciden en destacar que la tecnología ha sido fundamental para la continuidad de servicios esenciales al ciudadano y la crisis de la COVID-19 ha supuesto un gran paso en la transformación digital de muchas organizaciones públicas. Ahora es el momento de planificar y realizar una apuesta decidida por la tecnología en las Administraciones Públicas, porque el ciudadano cada vez es más digital y valora más los esfuerzos que realizan los gobiernos, la sanidad o la educación en materia de digitalización.
Ahora es el momento de potenciar, con más fuerza, la relación entre el sector público y el privado para agilizar la recuperación, y a que el sector público sea un referente en el desarrollo de nuevos servicios y mejora de la productividad.