Son el soporte para la innovación digital
La gran transformación del centro de datos
No hay duda de que las nuevas tecnologías emergentes que están cambiando el modelo del centro de datos. Pero, ¿cuáles son esas tecnologías y en qué sentido están cambiando el centro de datos?
Para Ignacio Velilla, Managing Director de Equinix en España, los avances tecnológicos y la digitalización que ha experimentado el mercado en los últimos años están transformando el modelo de data center tradicional para así poder adaptarse a las nuevas necesidades del momento. “El aumento de la cantidad de datos generados por tecnologías como la Inteligencia Artificial (IA), el Machine Learning (ML) o el Internet of Things (IoT) están provocando que las empresas busquen nuevas formas de enviar, recibir y gestionar un volumen de datos que crece día a día de forma exponencial”, comenta Velilla.
Como explica el responsable de Equinix en España, en una era en el que la interconexión entre partners, proveedores y compañías es un sinónimo de evolución, los data centers corporativos han quedado atrás frente a las posibilidades que ofrecen las plataformas globales de data centers neutrales. “Asimismo, la aparición de soluciones cloud ha supuesto la ampliación del ámbito de actuación de los servicios de TI a medida que el mercado apunta cada vez más hacia la necesidad de unir todo el potencial de los Data Centers con la flexibilidad que ofrecen los proveedores de servicios cloud”.
Por tanto, nos encontramos en un momento de disrupción digital en el que el mercado apunta hacia soluciones especializadas que suplan a la perfección cada una de sus necesidades específicas en cuanto a gestión de TI. “Las empresas quieren ser capaces de operar de forma rentable, sin limitaciones y, en este sentido, esta flexibilidad que demanda el mercado solo es posible mediante el uso de soluciones híbridas”, remarca Ignacio Velilla.
Juan Vaamonde, Country Manager de Data4 en España, ve en la Inteligencia artificial, analítica avanzada y el auge de los sensores los principales elementos disruptores del centro de datos. “El uso de la inteligencia artificial está aumentando para aplicaciones que son sensibles a la latencia (por ejemplo, navegación autónoma), sujetas a interrupciones de red (por ejemplo, monitoreo remoto, procesamiento de lenguaje natural (PNL), reconocimiento facial) y/o son intensivas en datos (por ejemplo, análisis de vídeo)”, explica.
En lo que respecta a la analítica avanzada, cada vez es más común el examen autónomo o semiautónomo de datos o contenidos mediante la utilización de técnicas y herramientas sofisticadas, que normalmente van más allá de las de la inteligencia de negocio (BI) tradicional.
“En general, las empresas están acelerando la adopción de soluciones de IoT, Smart Cities, SDWAN para un conjunto más amplio de casos de uso, lo que requiere un procesamiento cada vez más complejo y sensible en tiempo real de gran cantidad de datos procedentes de múltiples fuentes (sensores, IO, vestimenta, etc.)”, concluye el portavoz de Data4 España.
Además, los Smart DC, como el de Data4, también permiten optimizar el rendimiento del centro de datos destacando el impacto de las nuevas tecnologías tanto en los volúmenes de datos almacenados como en la forma de operar de los centros.
Para muchos casos, un conjunto adicional de requisitos estrictos relacionados con la latencia, el rendimiento, la privacidad y la seguridad requerirá que algunos de los datos y el procesamiento de IA o ML estén próximos a la creación de datos y a las fuentes de consumo.
Otra tendencia son los sensores, que al combinar éstos con la inteligencia artificial, las máquinas comprenden cada vez mejor el mundo que las rodea. Las tecnologías de detección son fundamentales en el desarrollo de los centros de datos. Un ejemplo es la nube de realidad aumentada, que durante la próxima década creará un mapa 3D del mundo, permitiendo nuevos modelos de interacción y también de negocio para monetizar el espacio físico, según explica Vaamonde.
Por su lado, para Iván Gimeno, Businness Development Manager de Rittal, podemos determinar tres tecnologías que están haciendo cambiar el modelo de centros de datos en la actualidad:
- Edge Computing: Debido al acercamiento de los datos al usuario, ya sea a nivel de personas o máquinas a nivel industrial, cada vez son más necesarios los llamados Edge Data Center para poder procesar los datos de las aplicaciones del Edge Computing. Los expertos apuntan que en un futuro próximo más del 50% de datos que creen y procesen las empresas se harán en Edge Data Centers. Éstos se encargan de realizar un procesamiento de datos a tiempo real, cerca del usuario o máquinas y con tiempos de respuesta rápido, lo cual nos permite ser muy ágiles y los centros de datos en la nube son útiles para procesar información “no urgente”, por ejemplo, analítica de datos, y para realizar almacenamiento a gran escala.
- Tecnología 5G: La velocidad que aporta el 5G es necesaria para realizar o mejorar las nuevas aplicaciones a tiempo real como el coche autónomo, el video en streaming o cualquier aplicación que necesite de un procesamiento de datos a tiempo real y cercano al usuario o consumidor. En este caso las operadoras de telecomunicaciones deben desplegar la red 5G a nivel de conectividad y también de pequeños centros de datos cercanos a esas estaciones de telefonía móvil.
- IoT y la Industria 4.0: también en línea a lo comentado anteriormente dos tecnologías como el IoT y la Industria 4.0 también están haciendo cambiar el modelo de los centros de datos. El hecho de tener elementos conectados a la red en cualquier tipo de aplicación a nivel de personas, conlleva un despliegue de soluciones de Edge Computing o Edge Data Center cercanos a los usuarios.
La Industria 4.0, es la cuarta revolución industrial o la evolución o digitalización que se está viviendo en el entorno industrial, que hace que cada vez sea mucho más necesaria la infraestructura TIC en el entorno industrial. “Desde Rittal estamos viviendo esta evolución industrial en primera persona. Somos una empresa con una fuerte presencia en la industria y estamos viviendo como empresas de todos los sectores industriales están invirtiendo en la creación de centros de datos o Edge Data Center para estar preparados para esta digitalización de sus procesos productivos. A día de hoy, cualquier línea de producción tiene multitud de sensores o equipos gestionados en red y toda esta información debe poder procesarse de una forma rápida y segura para garantizar unos procesos productivos eficientes”, comenta Gimeno.
No obstante, desde el punto de vista de la protección, calidad y disponibilidad de la energía eléctrica, hay que destacar los últimos avances en arquitecturas modulares de alta disponibilidad, advierte Jordi Riera, director de Ventas de la Unidad de Negocio de Critical Power de Socomec Ibérica. “Los UPS que respaldan la instalación del Centro de Datos han evolucionado teniendo en cuenta las necesidades, características y limitaciones de estas infraestructuras”.
“Las infraestructuras críticas de hoy en día necesitan ser flexibles, estar diseñadas para un rápido despliegue o actualización, pero también, tanto en términos de producto físico como de servicios de soporte ampliados, todo ello debe hacerse manteniendo la disponibilidad óptima del sistema”, comenta Riera.
Para el responsable de Socomec, con el SAI modular, es posible resolver una serie de problemas en paralelo. Lograr la granularidad correcta requiere un equilibrio entre el MTBF del sistema y la redundancia intrínseca, con pérdidas limitadas de la energía disponible debido a la falta de módulos o costes de mantenimiento incrementados debido a un número excesivo de módulos. Teniendo esto en cuenta, los SAI deben diseñarse con módulos de potencia del tamaño adecuado para grandes sistemas SAI, al tiempo que sigue siendo tan fácil de manejar como un módulo más pequeño. Además, el mantenimiento in situ, el servicio y las reparaciones son momentos cruciales para la protección de cargas altamente críticas. “En un SAI verdaderamente modular, al aislar completamente un módulo de potencia, se permite el mantenimiento simultáneo de cada uno de los sub-conjuntos, de forma sencilla y segura. Puede extraerse un módulo del sistema para evitar cualquier riesgo de afectar al sistema en funcionamiento y además dispone de medios intrínsecos para mantener la plena confianza en las actividades realizadas, gracias a una solución de pretest fácil y exhaustiva”, concluye Jordi Riera.
Importante evolución del almacenamiento
Según Jaime Balañá, director técnico de NetApp, el almacenamiento está sufriendo “su transformación más interesante hasta el momento, impulsado por tecnologías como flash, si hablamos del soporte o medio, y cloud como la clave de integración. Por lo que estamos ante una transformación aún mayor para la que tendrán que prepararse los gestores de almacenamiento”. Como explica Balañá, “en 2020 estamos viendo como los productos y soluciones están respondiendo a las necesidades que tiene el mercado en materia de sencillez, una gestión más fácil y la necesidad de integrar la gestión de datos en el cloud híbrido”.
Por su lado, Miguel Corujo, Sales Manager Data Centers Iberia en Saft, considera que a nivel de sistemas de “back up” de energía, está habiendo una migración de tecnología de plomo ácido al litio ion. En Europa este cambio tecnológico se está produciendo los últimos años. Este cambio tecnológico responde a la búsqueda de sistemas más compactos y fiables.
“La tendencia en el almacenamiento está claramente orientado al pago por uso, en un mundo en el que convergen la nube hibrida con los entornos on premise. En entornos SDS, en los que el dato lo distribuimos en múltiples sitios resolviendo problemas de latencia y consistencia. Los data center neutrales, profesionales en los que se tiene resuelto el problema de las comunicaciones de los CPD esta SDS una solución óptima para cualquier compañía”, comenta Markel Gruber, director general de Global Switch España. Como explica, SDN permite a los administradores controlar y administrar las redes de forma dinámica, nos permite programar las redes, ingresando código.
El “everything as a service” crea nuevas oportunidades de crecimiento
“Es cierto que hay empresas que están yendo a un modelo de centros de datos “as a service” alojando su infraestructura TIC o parte de ella en la nube”, comenta Iván Gimeno, Rittal. “Pero lo que estamos viendo en el mercado es que muchas empresas trabajan en un entorno híbrido en el que parte de su infraestructura TIC la llevan a la nube, pero otra parte importante de su infraestructura TIC, muchas veces la relativa al core de su negocio, la siguen alojando a nivel local, ya sea por temas de seguridad, normativa o por lo comentado anteriormente de aplicaciones Edge Computing con necesidades de tiempos de respuesta cortos que a día de hoy no pueden manejarse en entornos en la nube”.
Como nos explica Juan Vaamonde, los últimos estudios de mercado tecnológico indica que las ventas de servicios cloud aumentaron con una tasa de crecimiento global estimada del 48%. Las numerosas ventajas del cloud computing justifican este aumento. A medida que los usuarios y las empresas comparten fuertes ambiciones de innovar y mejorar el rendimiento, el uso de soluciones de computación en nube se está volviendo cada vez más común. “Así, los modelos IaaS y PaaS han experimentado un fuerte crecimiento, con un incremento de los ingresos de más del 50% con respecto al año anterior. Synergy Research Group espera que esta fuerte aceleración en la compra de servicios cloud se duplique en los próximos cuatro años, y se espera que este crecimiento continúe en 2020”, comenta el responsable de Data4 en España, afirmando que “en este contexto, todos los aaS, incluidos los Iaas y los Paas, seguirán esta tendencia y crearán nuevas oportunidades de crecimiento para el sector de los centros de datos”.
Por su lado, Ignacio Velilla considera que en este escenario en el que el mercado tiende a abandonar sus infraestructuras estáticas tradicionales y demanda el disponer de servicios desde cualquier parte del mundo, los data centers siguen jugando un papel fundamental. La interconexión ha servido como lanzadera hacia un futuro -que ya es presente- digital en el que cualquier organización puede disponer de sus aplicaciones alojadas en la nube desde cualquier parte del mundo de forma privada, directa, segura y ultrarrápida. “Un claro nuevo ejemplo es Platform Equinix que aglutina en un mismo ecosistema a los principales proveedores de servicios cloud, y permite a los clientes diseñar las rutas de transmisión de datos más rápidas, seguras y de menor latencia a nivel mundial”.
Para el responsable de Equinix, en un mundo que tiende hacia el ‘everything as a service’, las compañías demandan soluciones muy concretas y específicas para cubrir cada una de sus necesidades. Por lo tanto, la tendencia es hacia entornos multicloud que cumplan con esas necesidades”.
Importantes avances en seguridad
La seguridad de los datos y de las infraestructuras es una de las principales preocupaciones de todos las empresas y organizaciones. “Pero no siempre es fácil encontrar la convergencia entre los requisitos internos y las exigencias de los clientes en términos de disponibilidad, integridad, confidencialidad y trazabilidad. Por ello, con el objetivo de conseguir la mejor seguridad en los centros de datos, Data4 recomienda seguir una estrategia de seguridad basada en el modelo “SPICA”, de sus siglas en inglés, segregation, physical security, independence, cybersecurity, alignment”, afirma Juan Vaamonde.
Como comenta Markel Gruber, en el centro de datos existen distintas capas de seguridad; la propia que garantizan las infraestructuras, la física que preserva de ataques y acceso no deseados y la seguridad lógica, barreras y procedimientos que protegen la información con la finalidad de conservar los pilares de la seguridad de la información que son: confidencialidad, integridad, disponibilidad, autenticidad y no repudio.
“Si hablamos de innovación, en la seguridad lógica es donde se pueden ver mayores avances como por ejemplo son los sistemas biométricos, reconocimiento de huella, palma de la mano y reconocimiento facial, dispositivos IoT y como no, firewalls sistemas de prevención de intrusos en la red”, comenta el director general de Global Switch. “Por último, hacer mención también a la seguridad en lo relatico a la detección y extinción de fuegos, donde cada día existen nuevos y sistemas más avanzados y la detección de humedades o fugas de agua”.
“En nuestro caso, como proveedores de ‘colocation’, gestionamos la seguridad física de las instalaciones. Como garantía de seguridad, el centro de datos debe contar con protocolos documentados en caso de actuación y una serie de medidas como acceso restringido y controlado, guardias de seguridad 24x7, sistema de vigilancia por cámaras (CCTV) y doble sistema de identificación (tarjeta de acceso y biométricos)”, advierte Robert Assink, director general de Interxion España.
Otra tendencia en términos de seguridad para este 2020 es el aumento de la complejidad en la protección de los datos personales. “A medida que las tendencias globales hacia regulaciones más estrictas de privacidad de datos ganen impulso, las compañías globales distribuidas en múltiples mercados se encontrarán con dificultades a la hora de operar con fluidez”, advierte Ignacio Velilla.
En una encuesta reciente de Equinix a más de 2.450 responsables de la toma de decisiones de TI de todo el mundo, el 69% considera que “el cumplimiento de las normativas de protección de datos” es una prioridad máxima para su negocio, mientras que el 43% de ellos declararon que “la modificación de los requisitos normativos en torno a la privacidad de datos” constituye una amenaza para su empresa.
Por su lado, y desde su punto de vista como fabricante de equipos de almacenamiento, Jaime Balañá, director técnico de NetApp observa que las tecnologías de seguridad del dato están en constante evolución, ya que éste es un elemento fundamental y de gran valor para cualquier tipo de empresa. Como explica, las organizaciones cada vez están más concienciadas de la importancia de salvaguardar sus datos con entornos de backup y recuperación, ‘Disaster Recovery’, garantía de privacidad y cumplimiento de normativas, para conseguir:
- evitar la pérdida de datos accidental, protegerse del ransomware, virus u otros ataques maliciosos, o evitar en general que sus datos sufran ningún daño;
- protegerse frente a fallos energéticos, cumplir los requisitos más exigentes en cuanto a puntos de recuperación, y aprovechar todo el potencial del cloud para modernizar los entornos de recuperación de desastres;
- cumplir con las normativas gubernamentales, gestionar la seguridad de los datos de forma eficiente a lo largo de los distintos niveles de almacenamiento, incluido el cloud híbrido, y cumplir los requisitos de recuperación ante desastres y archivado sin comprometer la seguridad de los datos;
- y bloquear los ficheros de escritura única y lectura múltiple.
Eficiencia energética, una prioridad
El uso de energía los Data Center ha ido en aumento durante años, sin embargo, “la cantidad de energía eléctrica consumida aumentó sólo un 6% entre 2010 y 2018, mientras que la cantidad de computación en los centros de datos aumentó un 550% en el mismo período. La prioridad se ha convertido en entregar emisiones más bajas y promover las opciones de tiempos de funcionamiento más largos”, manifiesta Juan Vaamonde.
“Cada día se trabajan densidades de potencia mayores por metro cuadrado que consecuentemente disipan más calor, lo que hace que tengamos que buscar nuevas soluciones como la contención del aire frio en pasillos o incluso la contención del aire caliente en pasillos e inundar la sala de aire frio en aquellas soluciones basadas en sistemas “fan-wall”, expone Markel Gruber.
Como explica el director general del Global Switech, el crecimiento, probablemente no acabará nunca, lo que habrá que buscar soluciones que nos ayuden a refriega los sistemas adecuadamente. “Existe ya desde hace un tiempo la refrigeración por inmersión. Los sistemas de refrigeración por inmersión Novec minimizan el consumo de energía y el uso de agua, permiten acumular el calor y ofrecen numerosas ventajas con respecto a métodos tradicionales, como aire acondicionado y aceites minerales”.
En cuanto a los SAI, Socomec es consciente de esta problemática y, entre otras razones, ha incorporado baterías de Iones de Litio en sus gamas de SAI Ultimate ya que este material es capaz de soportar temperaturas más elevadas sin afectar el ciclo de vida del producto.
Las ventajas que proporcionan este tipo de baterías ayudan a reducir el consumo energético ya que ofrecen una disponibilidad máxima al realizar una recarga mucho más rápida de la batería del SAI, ofrecen un rendimiento óptimo en todas las condiciones de funcionamiento críticas, responden a un amplio rango de temperatura de funcionamiento (0 °C a +40 °C), requieren una menor necesidad de refrigeración, etc.
Más de la mitad del consumo energético de los centros de datos se debe al sistema de refrigeración, observa Miguel Corujo. “Los fabricantes de equipos buscan grados de eficiencia energética más altos. Las baterías de los sistemas de ‘back up’ de energía no son los principales focos de calor, pero sí sufren si no hay una temperatura baja (20-25°C). La gran ventaja de la tecnología de litio ion es que puede trabajar a temperaturas más altas y su vida útil no se ve reducida drásticamente. Por ejemplo, el sistema Flex’ion de Saft puede trabajar a 30°C y mantener una vida útil de 14 años”, comenta el representante de Saft.
España, posible hub digital del sur de Europa
Para Robert Assink, el centro de datos propio no desaparecerá, pero sí tendrá un peso menor en la estrategia IT de las empresas. Según un informe de Gartner, el 10% de las compañías ya ha “apagado” sus datacenters, mientras que para 2025 las previsiones señalan que ese porcentaje ascenderá hasta el 85%.
“Los sistemas IT de las empresas serán más distribuidos. Estas seguirán contando con centros de datos propios para alojar parte de su IT y moverán cargas a la nube pública y a los centros de colocation desde los que interconectar CPD propio y nube pública”.
Podríamos decir que hay tres tendencias, comenta el director general de Interxion España: el crecimiento del colocation con gran conectividad, espacio técnico y potencia; los centros de datos hiperescala, impulsados por los grandes proveedores cloud y el Edge Computing, situando cerca del usuario esos centros de datos para mejorar la entrega de contenido.
Por su lado, Miguel Corujo sostiene que España tiene una ubicación privilegiada como hub digital en el sur de Europa. “Esto ayudaría a reducir la saturación de conexiones del norte de Europa, al mismo tiempo que sería una nueva vía de acceso para África y America del Sur. Por estos motivos, España seguirá siendo un foco de creación de nuevos centros de datos”.
En esta línea, Ignacio Velilla considera que, en España, el sector del Data Center está empezando a despegar. “Gracias a su ubicación física privilegiada entre África, Europa mediterránea y Europa del norte, así como por su fuerte conexión cultural con América latina, cada vez son más los operadores globales que llegan al país para quedarse, pero todavía queda un largo camino por recorrer”.
Pero para que se produzca esta situación y España se convierta en el hub digital del sur de Europa, “se necesita atraer inversión y, se estima que, sólo en infraestructuras físicas, la nueva inversión directa podría alcanzar la cifra de 3.000 millones de euros durante los próximos cinco años”, opina Markel Gruber.
Con dicha inversión, la infraestructura digital de España alcanzaría el mismo tamaño de los principales mercados europeos (FLAP), acorde con el tamaño de nuestra economía. Los cimientos que soportan toda esta infraestructura digital son los Data Centers y las redes de telecomunicaciones. Además, la inversión en infraestructura digital provoca un efecto multiplicador en las inversiones en otros sectores, así como en la creación de puestos de trabajo que se cuantifican en aproximadamente 12 veces la inversión.
Por ejemplo, la demanda energética de estos Data Centers requeriría la producción de 500 MW de energía renovable con un consumo muy estable dada la continuidad durante las 24 horas de esta industria. Lo que apoyaría el desarrollo de esta industria y crearía más puestos de trabajo.
“Las inversiones indirectas derivadas de las necesidades de hardware y software para la prestación que requieren este tipo de centros implicarían una inversión adicional de 6.000 millones de euros aproximadamente durante el quinquenio”, concluye Gruber.