Todo lo que debes tener en cuenta a la hora de elegir nombre para tu empresa
Pero no siempre es fácil encontrar un nombre apropiado para un negocio, y este aspecto puede traer más de un quebradero de cabeza. No obstante, siempre existen algunas pautas a tener en cuenta para acertar.
Para ello surge el naming, que es el conjunto de técnicas que se utilizan para encontrar una denominación para una empresa. Esta es una estrategia de marketing que a menudo pasa desapercibida, cuando en realidad esto constituye un error.
Esta tarea no puede quedar en último lugar
El naming no se debe dejar para lo último en ningún caso, porque el nombre de una marca le proporciona identidad, al representar las ideas de la empresa y sus objetivos. Además, es uno de los primeros datos que suelen conseguir los clientes.
Debe ser un nombre sencillo, corto y fácil de pronunciar
Es fundamental que un nombre sea breve y simple, y también preciso e intuitivo. Basta pensarlo un poco para darse cuenta de que aquellas marcas que mejor se retienen en la memoria, normalmente no superan las tres sílabas.
También es igual de importante que sea un nombre de pronunciación fácil. Utilizar términos extranjeros está de moda pero es mejor no hacerlo, ya que los consumidores pueden tener problemas al intentar pronunciar el nombre de la marca. Lo mejor es elegir un nombre que puedan leer tal como se escribe en español (a continuación puedes acceder a la información sobre cómo saber si un nombre está registrado).
No hay que caer en la obviedad
Por otro lado, un nombre de empresa no debe ser demasiado obvio, pero tampoco se puede complicar en exceso. Lo mejor es un término medio, es decir, que sea un nombre un tanto original y que describa los productos y servicios ofrecidos, dando pistas sobre lo que ofrece el negocio. Hay que procurar que sean nombres memorables y que conecten a nivel emocional.
Hay que tener presente que el nombre de una empresa no se debería cambiar en el futuro, por lo que se debe intentar tomar una decisión firme al respecto. Debe ser una denominación que represente a la empresa y el producto que esta ofrece, sin que sea muy evidente.
Si no se te ocurren buenas ideas, puedes recurrir a ayuda
Cuando la inspiración no llega a la hora de elegir un nombre de empresa, una buena alternativa puede ser organizar una reunión para hacer una lluvia de ideas, escuchar todas las propuestas y elegir aquella que resulte más convincente. Pero previamente a esto, hay que presentar en profundidad la empresa, el mercado en el que esta se inserta, su sector, los clientes potenciales, proveedores, el producto, etc.
Existen otras alternativas que también pueden servir de ayuda si no se termina de encontrar un nombre idóneo, como puede ser recurrir a una agencia de naming o bien utilizar un generador de nombres de empresas online.