La ciberseguridad en los sistemas de recarga del vehículo eléctrico
Sin embargo, las instalaciones de recarga inteligentes para vehículos eléctricos forman parte del ‘Internet de las cosas’, por lo que “la mayor amenaza proviene de las vulnerabilidades del software”, asegura en una nota de prensa la compañía suiza Juice Technology.
“Dondequiera que haya conectividad, también existe el riesgo de una vulnerabilidad a los hackeos. Y esto también aplica a la movilidad eléctrica y a los sistemas de recarga”. Esas amenazad van desde “el robo de datos y dinero hasta los ataques de denegación de servicio, que podrían dejar inoperativa la unidad de carga”.
Juice Technology “concibe la ciberseguridad como un elemento indisoluble al proceso de diseño de sus estaciones de carga”. Así, la multinacional helvética “garantiza el cumplimiento de los estándares de ciberseguridad desde los primeros componentes hasta el producto terminado”, lo que logra “con sus propios conjuntos de chips, comunicación encriptada estándar y pruebas continuas, especialmente realizadas por ingenieros de software independientes".
Por tanto, Juice Technology aborda la ciberseguridad desde “la adquisición de los componentes de hardware, continúa con el diseño del software y abarca todos los procesos de comunicación. Los estándares de codificación homologados, las herramientas de análisis de código y las revisiones de código contribuyen a reducir los riesgos. Además, las prácticas probadas ofrecen una garantía de calidad más efectiva”.
La compañía, cuya factoría se encuentra en la localidad de Bachenbülach, ha obtenido recientemente la certificación ISO/SAE 21434, en vigor desde el pasado año “para garantizar que la ciberseguridad es incorporada en todas las fases de vida del producto”.
Respecto a esta certificación, en la nota de prensa se explica que “allá donde hay una conexión, existe riesgo de que exista un fallo de seguridad. Como en la fase de desarrollo ya surgen muchos puntos débiles en relación con el software, la seguridad del software debe ser un componente integral del proceso de diseño”.
La ISO/SAE 21434, que cubre cada fase del ciclo de vida de un vehículo, exige que se apliquen los métodos de la ciberseguridad en todos los sistemas eléctricos, componentes, software y en todas las conexiones externas. También cubre la gestión de la ciberseguridad en toda la cadena de suministro.
Asimismo, la citada norma establece que las empresas certificadas “deben fomentar una cultura que haga de la ciberseguridad una de sus preocupaciones principales y que la tenga presente desde el inicio de cada proyecto”.