Si eres millennial, no quieres ataduras con tu coche
Pagar la cuota de un contrato de renting, olvidándose de las ataduras unidas a la compra de un vehículo, y que éste sea de bajas emisiones. Estos son, según una reciente encuesta de RACE, lo primero en lo que piensa un millennial cuando piensa en tener coche nuevo. Aunque a muchos de ellos se les pase por la cabeza comprar (la misma encuesta también señala que un 90% de los nacidos después del año 2000 tienen coche o desean tenerlo), tardan poco en hacerse otros planteamientos.
¿La razón? Una y contundente, María Martínez Carrillo, directora de MasQRenting, una empresa comercializadora de renting de vehículos, lo explica “los jóvenes no quieren gastar una elevada suma de dinero en algo que, como es el caso de un coche, va a perder valor rápidamente. Además, hay que tener en cuenta que los más jóvenes han crecido escuchando a sus padres, cuando se referían al coche familiar, quejarse de lo caro que iba a salir repararlo, cuando el coche se ha averiado y ha tenido que pasar por el taller, o de las tasas del seguro”.
Un modo de vida que paga por usar
Igual que se paga por la música en Spotify o por ver cine y series en la plataforma Netflix, en lugar de ir a la tienda y comprarse un cd o un dvd. En realidad, que los jóvenes prefieran alquilar a comprar por los productos o servicios que consumen, está asociado al modo de vida por el que ha optado esta generación: que se les facilite el uso y pagar por ello de un modo flexible. Según Agustín García Gómez, presidente de la Asociación Española de Renting de Vehículos (AER), “el renting de vehículos es una fórmula de acceso a la movilidad que, sobre todo en las ciudades, ya comparte espacio con el coche compartido, el alquiler entre particulares o el transporte público. Y, en el caso particular del conductor millennial, hay que añadir que éste opta por utilizar un sistema u otro según le sea más conveniente, dependiendo del momento concreto o de una necesidad particular”.
Nada sin tecnología
Otro factor a tener en cuenta, siempre que se habla de millennials y modos de consumo, es que es una generación que ha crecido entre ordenadores, Internet y Smartphones. Así, están tan unidos a estas tecnologías, que no pueden prescindir de ellas en ningún momento y en ningún caso… lo que, evidentemente, incluye el coche que conducen. Los conductores más jóvenes piensan en su teléfono inteligente como parte imprescindible de su guardarropa diario y, por este motivo, quieren un coche que les permita conectividad total.
Luis Vergara, experto estratégico especializado en el diseño e implantación de soluciones a la medida de las necesidades de clientes, subraya que “las empresas de renting siempre van a ofrecer los últimos modelos del mercado y, además, van a permitir cambiar de coche cada pocos años. En otras palabras, que firmando un contrato de renting siempre se va a tener acceso a un automóvil equipado con las últimas tecnologías… algo que los jóvenes no suelen obviar”.
Salvar el Planeta
Los millennials han llegado al mundo en el momento justo en el que el éste está experimentando un muy peligroso calentamiento global. En palabras de la CEO de MasQRenting “a nadie debe extrañarle que estos hijos de su tiempo tengan una conciencia ambiental mucho más desarrollada que sus padres. A partir de aquí, los millennials comprenden la influencia directa del uso del automóvil en ese cambio climático y, por eso mismo, quieren ser parte activa en combatirlo. Quieren reducir impacto de carbono que ellos mismos podrían causar en el mundo que les rodea. Es evidente que, en este entorno de preocupación, la huella ambiental que pudiera dejar su automóvil es de gran importancia en sus tomas de decisiones de consumo”.
¿Y cuándo la generación Z comience a conducir?
Claro que, si los millennials están poco interesados en tener un coche en propiedad, la generación posterior, los Z (nacidos después del 2000), lo están aún mucho menos. Estos últimos sólo querrán coches más autónomos y con la mayor conectividad posible. En otras palabras, que, si los millennials han cambiado el modo de financiación de un coche, los Z darán forma a la manera en que lo conducen… siguiendo el ejemplo que ya están dando sus predecesores.