Euralarm insta a la exención de las alarmas de humo, monóxido de carbono y gas del artículo 11(3) del Reglamento de Pilas de la UE

Euralarm insta a la Comisión Europea a ampliar la exención del artículo 11, apartado 3, del Reglamento sobre pilas a los detectores de humo, las alarmas de monóxido de carbono y los detectores de gas.

Estos productos tendrían que cumplir los siguientes criterios: Protección de la vida humana (diseñados explícitamente para proteger la vida humana en entornos habitados); Norma EN del producto (probado y homologado con arreglo a normas EN válidas); batería de 10 años (funciona con una batería portátil que alimenta el dispositivo de forma fiable durante al menos 10 años) y reciclaje seguro (baterías fácilmente extraíbles para su eliminación segura en centros de reciclaje).

Sólo pueden acogerse a la exención los productos que cumplan las cuatro condiciones.

Aunque a menudo resulta útil disponer de pilas portátiles que los usuarios puedan extraer y sustituir con herramientas disponibles en el mercado a lo largo de la vida útil del producto, hay casos en los que esto no es apropiado y puede incluso comprometer la seguridad del usuario y la funcionalidad del dispositivo. Tal es el caso de dispositivos como los detectores de humo, los detectores de monóxido de carbono y los detectores de gas.

Diseñados para su uso en entornos residenciales, estos dispositivos de seguridad alertan a los residentes en caso de incendio, humo o gases peligrosos (especialmente mientras duermen) para que puedan responder adecuadamente y evacuar si es necesario.Para garantizar un funcionamiento correcto, todos estos productos contienen una batería portátil. En particular, un número significativo de estos dispositivos en Europa (especialmente las alarmas de humo y CO) vienen con baterías soldadas permanentemente con una vida útil de 10 años.

Esta categoría de productos sirve explícitamente para proteger vidas humanas en su entorno vital e incluye: Detectores de humo (según la norma hEN 14604), detectores de monóxido de carbono (según la norma EN 50291-1) y detectores de gas (según EN 50194-1).

Según explica Euralarm en un comunicado de prensa, la función principal de estos dispositivos es proteger vidas en entornos residenciales. A diferencia de las consideraciones convencionales de diseño de productos, la vida útil de estos dispositivos se basa únicamente en sensores físicos. La vida útil viene determinada por las condiciones físicas y los límites.

Un subconjunto significativo de estos dispositivos funciona con una sola batería durante toda su vida útil de 10 años. Este nivel de durabilidad y eficiencia es notable.

Dada su finalidad y vida útil, no es práctico ni necesario que los usuarios finales sustituyan las baterías. Por eso, las pilas con una vida útil de 10 años están soldadas permanentemente. Introducir pilas reemplazables de 10 años no sólo no tendría sentido, sino que plantearía riesgos para la seguridad similares a los de los audífonos. 

Solicitud de consideración de productos que sirven explícitamente para proteger la vida humana