"No puede haber economía circular si no trabajan en la misma dirección todos los protagonistas del circuito"
Entrevista a Pilar Vázquez, directora general de la Fundación Ecolum
Está a punto de finalizar 2023 y hemos querido conocer qué tal ha sido el año para la Fundación Ecolum. Un año que, como valora Pilar Vázquez, su directora general, ha sido “muy positivo”. Destaca la creación de una consultoría medioambiental o el proyecto del Índice de Reciclabilidad. Como objetivo para 2024 se han propuesto trabajar en la búsqueda de una mayor utilización de los materiales procedentes del reciclaje en nuevos productos.
“Tan importante como reciclar es reducir el número de residuos, y si los productos son más duraderos caminaremos en esa línea”.
Estamos en la recta final del año. ¿Qué balance hacen de este 2023?
2023 ha sido un año muy positivo para nuestra Fundación, con un claro incremento en las recogidas, en el número de empresas adheridas, y cumpliendo con los objetivos que nos habíamos marcado en lo relativo a nuevos proyectos.
¿Cuáles han sido las principales iniciativas que han puesto en marcha y qué resultado han tenido?
Desde la Unión Europea se insta a que los países miembros apuesten por la economía circular. ¿Qué retos plantea implantar acciones dirigidas a lograr la economía circular?
¿Qué ventajas aporta andar ese camino?
¿Es un riesgo para las empresas europeas frente a competidores asiáticos, o por el contrario es una forma de defender a la industria de la iluminación europea?
Creo que el medio ambiente está en la cabeza de todos y cada vez somos más los que valoramos su defensa a la hora de elegir los productos que compramos, así que el hecho de que nuestras empresas diseñen mejor, productos mas durables y generen menos residuos, nunca les va a perjudicar. Pero por si esto no es suficiente, desde la administración, tanto europea como nacional, se está aprobando continuamente normativa y controles en la misma línea. Por ejemplo, desde inicios de 2023 existe un control en aduanas de todos los RAEE's que entran en España, exigiendo que las empresas importadoras, o el fabricante extranjero, o su representante estén adheridos a un scrap y por tanto paguen la ECORAEE. Esto ha llevado a que se hayan dado de alta en el registro del Ministerio en el año más de 3.000 empresas, un importante paso para evitar la competencia desleal. Hacer las cosas bien nunca puede ser un riesgo para las empresas.
¿Cuenta Fundación Ecolum con estudios que permitan evaluar la reducción de la huella ambiental de los productos que estén incorporando medidas circulares?
¿Qué iniciativas se están impulsando desde Fundación Ecolum para ayudar a las empresas que forman parte del colectivo a lograr ese objetivo?
Muchas veces vemos cosas muy sencillas de cambiar y que llevamos haciendo mucho tiempo sin pararnos a pensar en su trascendencia, en este sentido lo mejor es poner algún ejemplo de algunos consejos que hemos dado a nuestras empresas fruto del análisis de sus productos.
Hemos visto la dificultad para el reciclaje que supone el uso de serigrafía en los vidrios, información que damos a los fabricantes para que traten de evitarlo. Otro ejemplo es la recomendación de utilizar tornillos de un solo paso en los productos, o al menos la reducción de los mismos. Esto facilita la reparación y también el desmontaje en el momento del reciclaje, abaratando el proceso. También hemos visto que algunos tintes o componentes en los plásticos los hacen inservibles para su uso posterior en la fabricación de nuevos productos.
Estas informaciones reciben una muy buena acogida por parte de los fabricantes.
¿Puede comentarnos algunas medidas que estén implementando a título particular algunas empresas asociadas a Ecolum?
También se ha incrementado el esfuerzo de las empresas en facilitar la reparabilidad de sus productos. No olvidemos que tan importante como reciclar es reducir el número de residuos, y si los productos son mas duraderos caminaremos en esa línea.
“Como meta para el próximo año vamos a trabajar en la búsqueda de una mayor utilización de los materiales procedentes del reciclaje en nuevos productos”.
¿Qué papel tiene que jugar el usuario final en este proceso?
Y por supuesto, pensar en la reutilización, no desechar los productos tan alegremente como nos hemos acostumbrado a hacer. Cuando algo no nos sirva, debemos pensar en que puede ser útil para otra persona. Esto que está calando fácilmente en la población más joven, a través de plataformas y redes, debe hacerse extensivo a los no tan jóvenes, buscando la manera de ponerlo fácil a los que no manejan tan bien las nuevas tecnologías. Y estamos dispuestos a buscar alternativas para ello.