Lanas minerales para combatir los problemas de salud asociados al ruido
Junto a Japón, España es el país con mayor índice de población del mundo expuesta a altos niveles de ruido. Según la Asociación de Fabricantes Españoles de Lanas Minerales Aislantes (Afelma), esto se debe en gran medida a la escasa exigencia a nivel normativo para que los edificios cuenten con un aislamiento acústico adecuado.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) publicó en 2018 una guía en la que situaba los umbrales de exposición al ruido considerados como saludables por debajo de los 53 decibelios durante el día y de 45 por la noche para el tráfico rodado, considerado la principal causa de contaminación acústica. En España, alrededor de 9 millones de personas sufren niveles medios de más de 65 decibelios.
Según los datos de la encuesta del INE sobre Condiciones de Vida (2018), el ruido exterior es un problema para el 17% de los hogares a nivel nacional, lo que equivale a 3.150.000 hogares.
De qué hablamos cuando hablamos de problemas de salud
El exceso de ruido o contaminación acústica no solo merma la concentración y reduce el rendimiento al interferir en nuestras actividades diarias, sino que, según la OMS, puede ser un factor desencadenante de alteraciones de la audición, así como de trastornos psicológicos y enfermedades cardiovasculares.
El ruido estresa a las personas, activando el sistema nervioso y aumentando los niveles de hormonas. Un estudio publicado por el Journal of American College of Cardiology establece que la contaminación acústica altera el cuerpo a nivel celular, contribuyendo al desarrollo de hipertensión arterial, accidentes cerebrovasculares o insuficiencia cardíaca. Pero no solo eso, sino que también ocasionaría cambios de carácter, trastornos del sueño y aumento de la susceptibilidad, según sus autores.
Este mismo estudio señala la importancia del aislamiento acústico de los edificios como una medida eficaz para reducir la exposición a todas las fuentes de ruido (ruido exterior, de viviendas o locales adyacentes, de instalaciones…), junto a nuevos desarrollos y a una legislación más exigente a la hora de combatir el ruido.
La importancia del aislamiento acústico de los edificios como una medida eficaz para reducir la exposición a todas las fuentes de ruido.
El presidente de Afelma, Oscar del Río, asegura que “el retraso en la mejora de la normativa en España se traduce en un elevado porcentaje de viviendas con malas prestaciones acústicas. Si tenemos en cuenta el año de construcción, un 68% de las viviendas están construidas sin exigencias acústicas. Este porcentaje se eleva al 93% si se tienen en cuenta las viviendas construidas antes de la entrada en vigor del Código Técnico de la Edificación (CTE)”.
Qué son las lanas minerales y por qué son la solución al ruido
Las lanas minerales se obtienen a partir de productos naturales (arena silícea para las lanas de vidrio o roca basáltica para las lanas de roca). Están constituidas por un entrelazado de filamentos de materiales pétreos que forman un fieltro que mantiene entre ellos aire en estado inmóvil. Esta estructura permite obtener productos internacionalmente reconocidos como aislantes acústicos en la construcción de edificaciones por su estructura flexible.
En realidad, son el único aislante que cumple con una triple condición: aislamiento acústico, aislamiento térmico y, por su naturaleza incombustible, protección contra el fuego. Además, el empleo de las lanas minerales permite actuar con criterios de eficiencia económica, contribuyendo también al uso racional de la energía.
Según el presidente de Afelma, Oscar del Río, “los usuarios deberían conocer las herramientas existentes en el mercado de la edificación para vivir o desarrollar su trabajo en ambientes acústicos óptimos”.
Las principales funciones de las lanas minerales frente a la contaminación acústica:
- Amortiguar el ruido: las lanas minerales ocultas en el interior de los cerramientos amortiguan el ruido, incrementando el aislamiento acústico. Además, su elasticidad les permite actuar como muelle, eliminando la resonancia de la cavidad.
- Corregir la acústica: las lanas minerales reducen la reverberación de los espacios, proporcionando ambientes más silenciosos y confortables, aspecto esencial en locales públicos, aulas, lugares de trabajo, etc. Esto es debido a la porosidad abierta que proporciona una elevada absorción acústica.
Las lanas minerales son el aislante térmico que proporciona una ganancia de aislamiento acústico de los elementos constructivos a los que se incorpora, permitiendo reducciones del nivel sonoro de hasta 70 decibelios, gracias a su naturaleza elástica que disipa la energía de las ondas sonoras que penetran en ellas. Así, las Lanas Minerales impiden la transmisión de los ruidos aéreos y de impacto y de sus reverberaciones, aportando auténtico confort acústico.
El confort de una vida saludable sin contaminación acústica
La población actual pasa la mayor parte de su tiempo (85%) en espacios cerrados y su calidad de vida queda seriamente afectada por la contaminación ambiental generada por el ruido exterior, un problema creciente en las grandes ciudades con repercusiones civiles y penales. Además, el mal aislamiento también vulnera la propia intimidad de las personas.
En este sentido, las lanas minerales son un material imprescindible tanto para el aislamiento como para el acondicionamiento acústico. Están reconocidas a nivel internacional y se emplean en países con mayores exigencias acústicas que las de España.
La principal función del aislamiento es reducir la transmisión de ruidos del exterior al interior y viceversa; por su parte, el acondicionamiento mejora la calidad acústica del interior y, a su vez, disminuye la reflexión de las ondas sonoras. Ambas tienen un efecto directo en el confort que proporcionan los espacios y en la salud de las personas los habitan.
Qué necesitamos en España para mejorar nuestra calidad de vida frente al ruido
Según considera el presidente de Afelma, Oscar del Río, “cada vez se hace más necesario actualizar las exigencias acústicas y, en consecuencia, someter al CTE a una revisión al alza, equiparándonos a nuestros vecinos europeos. Consideramos que sería necesario crear una calificación acústica, de igual forma que existe la certificación energética para edificios”.
Para Afelma, en España estas serían las asignaturas pendientes para terminar con el ruido:
- Mejora de la normativa acústica: debería incluir la medición “in situ” tanto en obra nueva como rehabilitación para verificar el cumplimiento de las exigencias normativas y la consecución de los objetivos acústicos.
- Acondicionamiento acústico: proceder a la revisión de las condiciones acústicas de los locales públicos y, en caso de ser necesario, realizar operaciones de acondicionamiento que mitiguen la reverberación del ruido, dificultado la conversación y el bienestar.
- Cédula de habitabilidad: condicionar la entrega de la cédula de habitabilidad a la comprobación previa del cumplimiento de la normativa acústica.
- Formación en la acústica de edificios: reforzar el conocimiento de los profesionales, tanto en materia acústica, como de los materiales y sus propiedades.
- Rehabilitación acústica: asignatura pendiente de especial importancia dado el impulso que se pretende otorgar a la rehabilitación energética de edificios. Es preciso evitar que la mejora térmica empeore las condiciones acústicas preexistentes.