Las viviendas ´Girasol´ del arquitecto José Antonio Coderch, rehabilitadas con el nuevo tejido cerámico Flexbrick
Han pasado cincuenta años desde la construcción del edificio Girasol, un conjunto de viviendas considerado como una de las diez edificaciones modernas más representativas a nivel arquitectónico de la ciudad de Madrid. Diseñado por el arquitecto José Antonio Coderch y ubicado en pleno barrio de Salamanca, Girasol destaca principalmente porque es capaz de aprovechar al máximo la luz diurna gracias a un giro en el eje de cada vivienda, orientadas hacia el mediodía, que Coderch calculó en función de las posiciones favorables y desfavorables del sol a lo largo del día en cualquier momento del año. De ahí el nombre del edificio y que se considerara una de las edificaciones más innovadoras de su época.
Bajo la dirección del Atelier Galante se ha llevado a cabo una respetuosa y ambiciosa rehabilitación de las fachadas que presentaban desde hacía tiempo el problema de los desprendimientos de sus plaquetas cerámicas colocadas en posición vertical. Esta posición favorecía la erosión de la junta de mortero por el agua de lluvia hasta dañar la capa adhesiva, que iba perdiendo progresivamente su capacidad para soportar las plaquetas. Este es el motivo por el que tras varios intentos de reparación el sistema de rehabilitación de la fachada necesitaba una seguridad redundante por si volvían a fallar las condiciones de adherencia de los morteros de agarre.
Por ello Javier Galante optó por resolver el problema mediante el sistema de tejidos cerámicos de Flexbrick, el cual esconde una malla que se fija mecánicamente al soporte. De esta manera, se añadía una salvaguarda ante cualquier eventual fallo de los adhesivos: las plaquetas están confinadas por la malla y ésta se atornilla al soporte. Este sistema industrializado está desarrollado por las compañías de la industria cerámica Piera Ecocerámica y Cerámica Malpesa.