La rehabilitación y reforma de viviendas en Barcelona capital ha aumentado un 10% en 2019
Las promociones de viviendas de obra nueva se desplazan a las afueras de la ciudad de Barcelona debido a la falta de suelo disponible. En estos momentos, el 60% de las nuevas promociones del área metropolitana se efectúan fuera de la capital. Mientras, en Barcelona la demanda para la rehabilitación y reforma de residencias ha registrado un auge del 10% interanual. Este fenómeno se explica por la elevada obsolescencia del parque de viviendas de la Ciudad Condal y la falta de suelo edificable, lo que pone el foco en el mantenimiento y conservación de los edificios.
Y es que seis de cada diez inmuebles construidos en Barcelona ciudad tienen 50 años o más. Por zonas, los distritos de Ciutat Vella, L’Eixample y Gràcia registran un mayor porcentaje de edificios residenciales antiguos, con un 90% de éstos construidos antes del 1970, y otros como Horta-Guinardó, Sarrià-Sant Gervasi y Sants-Montjuïc rondan el 80%.
Localidades como Esplugues, Sant Just, L’Hospitalet, Cornellà de Llobregat, Santa Coloma de Gramanet y Badalona son los núcleos urbanos que más promociones de obra nueva acaparan en el área metropolitana. También lo hacen municipios de gran tamaño de la segunda corona metropolitana como Sant Cugat, Sabadell o Terrassa. Otros factores como la gentrificación de los barrios céntricos de Barcelona, la proliferación de pisos turísticos o la escasez de vivienda asequible inducen a que la producción de viviendas de obra nueva disminuya en la ciudad y se concentre en los municipios metropolitanos.
“En estos momentos la demanda se divide entre aquellos que buscan viviendas de obra nueva fuera del centro de la ciudad, con un precio más competitivo y una buena conexión con el centro, o bien decidan hacer una reforma integral de su residencia, debido a que la gran mayoría de inmuebles de la ciudad son susceptibles de requerir un proceso de reforma”, indica Carles Rodríguez, CEO y fundador de Global Projects.
En este sentido, según datos de la AMB, la mitad del suelo del área metropolitana ha sido decretado como no urbanizable, y otro 40% es urbano. Entre las principales zonas con suelo edificable todavía disponible figuran El Poblenou, barrio destinado en su mayor medida a la construcción de oficinas y proyectos hoteleros, así como La Marina de la Zona Franca y el eje de La Sagrera y Sant Andreu. En estos espacios, si el Ayuntamiento lo permite y aprueba la recalificación, podría haber espacio suficiente para la construcción de alrededor de un 5% más de nuevas viviendas, según el Institut Municipal d’Urbanisme.