Sigfito: 10 años cultivando el medio ambiente

Como recordaba en la jornada Rocío Pastor, directora general de Sigfito Agroenvases, la andadura de este SIG comenzó en junio de 2002 con la obtención de la primera autorización administrativa para realizar la recogida de envases fitosanitarios. Aquel primer año se terminaba con 200 puntos de recogida en toda España y con un porcentaje de retorno de apenas un 4,5%. “Fueron unos comienzos complicados porque suponía cambiar las costumbres de los agricultores, de los fabricantes y de los propios distribuidores. Pero, sin duda, había mucho que cambiar y lo hemos cambiado”, señalaba Rocío Pastor.

No fue hasta 2005 cuando Sigfito obtuvo la autorización de todas las comunidades autónomas para poder desempeñar su labor por todo el territorio nacional, logrando desde entonces una progresiva implantación, que se plasmó al final de 2011 en 2.791 puntos de recogida y en un porcentaje de envases recogidos del 55,2% (3.358 toneladas recogidas de las 6.084 toneladas adheridas).

El objetivo de Sigfito a corto-medio plazo pasa por seguir creciendo no sólo en el porcentaje de recogida de envases fitosanitarios (espera acabar el 2012 con un porcentaje del 60%), sino que también confía en poder ampliar su sistema de recogida al resto de envases que se emplean en el sector agrícola, para lo que está a la espera de la pertinente autorización administrativa. “Nuestra intención es trabajar entre todos para crear un modelo armonizado de recogida en todo el territorio, que sea simple y viable, y que responda a las necesidades de la agricultura”, acotaba la directora general de Sigfito.

La jornada organizada por Sigfito contó con la participación de la responsable del área de residuos del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Teresa Barrés, quien tras felicitar al SIG por la labor desempeñada durante estos últimos diez años, pasó a resumir la base normativa que ha regulado la recogida de los envases fitosanitarios en España desde el año 1997, centrándose especialmente en la Ley 22/2011 de Residuos y Suelos Contaminados y en su reciente modificación a través del RD-L 17/2012. Además, Barrés aprovechó su intervención para resumir las experiencias que hay en este campo tanto en Alemania, a través de Pamira, como en Francia, mediante Adivalor.

Posteriormente, Javier Ruiz Tomás, miembro de la Comisión Europea dentro de la Dirección General de Medio Ambiente, describió la evolución que han seguido las normativas medioambientales dentro del marco de la Unión Europea, desde la década de los 70, dejando claro durante su intervención que “el futuro de la agricultura y de la ganadería pasan por aquellas iniciativas que protejan el medio ambiente”.

La jornada también incluyó la entrega del I Premio Sigfito de Periodismo 'Cultivando el Medio Ambiente', que recayó en el periodista Ricardo Gamaza.

La utilización de productos fitosanitarios se ha consolidado en la agricultura actual como una práctica fundamental para mejorar la sanidad de las plantas y asegurar la calidad de los productos agrícolas. Sin embargo el uso de plaguicidas puede acarrear un problema medioambiental importante si los envases, una vez usados, son abandonados junto a ríos, canales, acequias… o si son incinerados de manera incontrolada. Para facilitar al agricultor la entrega de estos residuos nació en 2002 Sigfito, un sistema de recogida de envases vacíos de fitosanitarios a través de una red de puntos que se sitúan, generalmente, en cooperativas y distribuidores.

Sigfito está financiado por los fabricantes y envasadores de productos fitosanitarios que cumplen así con su obligación legal de asegurar el reciclado de los envases que ponen en el mercado. Las empresas adheridas realizan una aportación proporcional al peso de los envases que ponen en el mercado.

Sigfito cuenta actualmente con más de 100 empresas adheridas al sistema y las aportaciones recibidas se destinan íntegramente a sufragar el coste de las recogidas, el transporte y la valorización de estos envases. La totalidad del mercado nacional de estos productos está adherido a Sigfito y, a su vez, estas empresas incluyen en las etiquetas de sus productos el símbolo Sigfito, lo que identifica dichos envases como susceptibles de ser reciclados a través de los puntos del sistema.

Gracias a la existencia de Sigfito, los agricultores disponen de un servicio útil y sin coste adicional para reciclar sus envases, cumpliendo con la Ley y asegurando la protección de su entorno. Para realizar esta entrega de los envases, Sigfito dispone de una red de más de 2.800 puntos de recogida. Estos puntos son principalmente entidades distribuidoras y comercializadoras de productos fitosanitarios, cooperativas agrarias, grandes explotaciones y otros, bajo la lógica de que el agricultor deje sus envases usados, sobre todo, allí donde adquiere el producto nuevo. La participación de estas entidades en Sigfito es voluntaria y se concreta a través de un convenio de colaboración.

El punto de recogida acepta cumplir una serie de requisitos para recibir y almacenar los envases en condiciones de seguridad. Estas entidades pasan a ofrecer un servicio de gran valor añadido para sus clientes o socios, adquiriendo una ventaja competitiva, ya que para los agricultores entregar los envases es obligatorio y existe una demanda creciente de este servicio. Además, en los puntos de recogida, los agricultores pueden solicitar albaranes que justifican de manera legal.

Sigfito es consciente de la importancia de la comunicación, por ello sus campañas se centran fundamentalmente en la concienciación al agricultor a través de los puntos de recogida y mediante la asistencia a las ferias agrícolas más importantes del país.

Además, pone a disposición de los puntos y de todas las entidades que imparten cursos de aplicación de fitosanitarios, folletos, carteles y un video de formación que pueden descargarse a través de www.sigfito.es .

Asimismo, este año ha centrado todos sus esfuerzos en conseguir la satisfacción de los puntos de recogida. Ha implantado un sistema de premios que nacen con un objetivo claro: reconocer el esfuerzo que realizan los puntos de recogida participando en Sigfito, premiando a aquellos que más destacan en distintas categorías.