La valorización de residuos en cementeras contribuye a disminuir las emisiones de CO2, según el director de Fundación Cema
6 de octubre de 2011
Tras la entrada en vigor de la nueva Ley de Residuos y Suelos Contaminados, el director gerente de la Fundación Cema (Fundación Laboral del Cemento y el Medio Ambiente), Dimas Vallina, pone de relieve las buenas prácticas de la industria cementera en la lucha contra el cambio climático. Vallina destaca en un artículo publicado por Oficemen (Agrupación de Fabricantes de Cemento de España) que muchos de los residuos utilizados en las cementeras son totalmente biomasa (por ejemplo restos de madera, lodos depuradora, harinas cárnicas) o tienen un contenido parcial de biomasa (como los neumáticos usados o los combustibles derivados de residuos urbanos). “Este dato es muy significativo puesto que la utilización de combustibles con biomasa se considera neutra en cuanto a sus emisiones de CO2”, argumenta Vallina.
Según el director de Fundación Cema, de la energía empleada en los hornos de cemento en España en el año 2010, casi el 16% procedió de combustibles alternativos obtenidos de distintos residuos. “Al utilizar estos combustibles, se consiguió un ahorro energético de 300 kilotoneladas equivalentes de petróleo, lo que representa el consumo energético anual de cerca de 430.000 hogares y un ahorro de CO2 de casi 490.00 toneladas”, comenta.