energenta se prepara para el futuro gracias a la tecnología de Lindner

La empresa energenta ersatzbrennstoffe gmbH, con sede en Ochtrup (Alemania), produce desde 2004 combustibles sólidos recuperados (CSR) de alto poder calorífico. Hace cinco años, el modelo de negocio se amplió para incluir el reciclado mecánico de plásticos. Con una trituradora primaria Jupiter 3200 adicional, instalada en noviembre de 2023, la empresa quiere hacer frente a los crecientes retos de la industria del reciclaje.

Ochtrup —localidad de unos 20.000 habitantes ubicada en la región noroccidental de Münsterland, en la frontera con Baja Sajonia y los Países Bajos— acoge las oficinas centrales de energenta ersatzbrennstoffe gmbH desde 2004. Desde su fundación, la empresa y sus treinta empleados transforman en este emplazamiento residuos en combustibles derivados de residuos (CDR) y combustibles sólidos recuperados “especialmente puros y de alto poder calorífico para los hornos rotatorios de las industrias del cemento y la cal”, señalan en una nota de prensa fuentes de Lindner.

Axel Möhring, director gerente de energenta ersatzbrennstoffe desde 2020, declara que la empresa lleva “más de diez años explotando dos líneas de producción SRF, cada una de ellas compuesta por una trituradora primaria Lindner Jupiter 3200 o 2200 y una trituradora secundaria Lindner Komet 2800. Los sistemas tienen un diseño compacto y están conectados en serie. Gracias a las pequeñas cuchillas y a las finas cribas, conseguimos un material de salida muy fino, homogéneo y limpio. Cada línea produce unas 8 toneladas de SRF por hora en un funcionamiento de dos turnos, seis días a la semana”, concreta Möhring.

En sus inicios, la actividad de energenta alrededor de los combustibles sólidos recuperados (CSR) de alto poder calorífico, pero hace cinco años la empresa empezó a reciclar mecánicamente plásticos. “Estamos muy satisfechos con la forma en que las trituradoras de Lindner producen CSR, pero debido a la demanda de reciclado de alta calidad, hemos ampliado gradualmente nuestro modelo de negocio”, explica Möhring, quien añade que a día de “hoy la empresa se centra en el reciclado mecánico de plásticos que no son compuestos”.

Desde la empresa germana se explica que “los plásticos compuestos, como el cartón para envasado de líquidos, los blísteres farmacéuticos o las láminas multicapa, están formados por diferentes capas de material. El reciclado químico ya ofrece nuevas soluciones, pero en su mayor parte estos materiales siguen utilizándose en gran medida como combustibles de alta calidad que sustituyen a los combustibles fósiles, contribuyendo a reducir las emisiones de CO2. Los plásticos reciclables mecánicamente, en cambio, se trituran previamente con un Lindner Micromat, se muelen con molinos especiales para la producción y, a continuación, se regranulan en la planta que energenta tiene en Núremberg.

Jupiter 3200 de Lindner: una inversión de futuro

En la actualidad la industria del plástico se enfrenta a una serie de retos. El ‘upcycling’, la optimización de procesos y la eficiencia energética son sólo algunos de los asuntos que gravitan en el sector. También el reciclado químico está en boca de todos y pretende recuperar materiales que antes se clasificaban como no reciclables, siempre que sean del mismo tipo de material.

Parece evidente que “los flujos de materiales en el mercado van a cambiar, y con ellos las tareas que tenemos que dominar. Gracias a la nueva Jupiter 3200, pretendemos ampliar nuestra oferta de cara al futuro, de modo que podamos ampliar nuestra gama de forma flexible para incluir otros flujos de reciclaje”, prosigue Möhring, quien concluye que “como grupo energenta estamos muy satisfechos con Lindner. Las máquinas Lindner están magníficamente diseñadas y ofrecen un acabado de alta calidad. Valoramos muy positivamente el diseño modular, así como el excelente y rápido servicio técnico. Lindner está dispuesta a invertir en ensayos conjuntos y a abrir nuevos caminos. Eso es lo que hace de Lindner un buen y fiable socio”.

La excelente calidad del reciclado requiere un alto nivel de homogeneidad, una cualidad que se consigue mediante la clasificación de los materiales entregados y un sistema de cajas introducido por energenta para recoger los materiales reciclables por separado. “La alta calidad del reciclado empieza con el proceso de recogida. Por ello hemos lanzado nuestro propio sistema de recogida para que las pequeñas y medianas empresas almacenen los distintos tipos de plástico en cajas diferentes. De este modo, las empresas pueden hacer una valiosa contribución a la economía circular, mientras que nosotros recibimos materiales valiosos debidamente clasificados que nos ayudan a conseguir una alta calidad de procesado. Una situación en la que tanto las empresas como el medio ambiente salen ganando”, remarca Möhring, quien agrega que “como empresa de reciclaje, para nosotros es muy importante hacer algo por nuestro medio ambiente y por lo que yo describiría como una producción responsable y justa para las generaciones futuras”.