La parada de mantenimiento de la PVE de Sant Adrià de Besòs llega a su fin
El centro de tratamiento de residuos municipales de Gavà-Viladecans aumenta un 37,5% su capacidad de tratamiento de envases ligeros
Tersa, compañía pública de gestión de servicios ambientales participada por el Área Metropolitana de Barcelona (AMB) y el Ayuntamiento de Barcelona, ha ampliado la capacidad de tratamiento y selección de envases ligeros del centro de tratamiento de residuos municipales (CTRM) de Gavà- Viladecans. Con la nueva operativa, que ya está en marcha, la planta aumenta su capacidad en un 37,5 % con respecto a los envases ligeros. Tras esta ampliación, la instalación pasará de gestionar 24.000 toneladas a 33.000 toneladas de residuos de envases anuales.
Tras esta ampliación, el CTRM de Gavà- Viladecans pasará de gestionar 24.000 toneladas a 33.000 toneladas de residuos de envases anuales.
La nueva organización, que se implementó durante el pasado mes de noviembre, “incluye la contratación de hasta 18 personas más para la entrada en funcionamiento de un tercer turno de noche, que supone un aumento de la plantilla de un 33 %”, informaron en una nota de prensa fuentes de Tersa.
El incremento de la recogida selectiva en el ámbito del área metropolitana de Barcelona -bien a través de los contenedores situados en la vía pública o a través de otros sistemas implantados por los municipios metropolitanos, como la recogida puerta a puerta- ha propiciado un aumento de la cantidad de envases que llegan a la planta. Por este motivo, el CTRM “ha adaptado su operativa para incrementar la capacidad de tratamiento y recuperar más envases para su valorización y reciclaje”.
Con el nuevo funcionamiento, el AMB podrá tratar un 15 % más de residuos de la fracción de envases recogidos selectivamente cada año. “Respecto al total de residuos tratados anualmente en la metrópolis (1.478.128 toneladas en el año 2021), los cambios en esta instalación supondrán un incremento del 0,6 %”.
Mejoras en la actividad productiva
La apuesta por la innovación y la mejora continua es uno de los valores clave de Tersa, destacan las mismas fuentes, que añaden que con el objetivo de alcanzar la máxima excelencia operacional, el grupo está “implementando una estrategia de mejora continua de la actividad con la incorporación de la metodología TPM (Total Productive Maintenance) que potencia la participación activa de todo el personal para reducir el número de incidencias técnicas”.
Con la parada de mantenimiento de la instalación de Sant Adrià de Besòs, Tersa continúa “con su compromiso de mejora continua, revisando todos sus procesos y optimizándolos con la implantación de la última tecnología del sector”.
Concluye la parada de mantenimiento de la planta de Sant Adrià de Besòs
Por otra parte, a mediados de noviembre concluyó la parada para llevar a cabo labores de mantenimiento preventivo y correctivo en la planta de valorización energética (PVE) de Sant Adrià de Besòs, que también ha recibido diversas mejoras tecnológicas. Con estas intervenciones se asegura el buen funcionamiento de las instalaciones, que ven así mejorada su efectividad.
La parada técnica y programada de la instalación, que Tersa realiza de forma periódica, ha permitido ejecutar trabajos que sólo pueden efectuarse cuando la planta no está en funcionamiento. Proporcionalmente, las tareas de carácter preventivo han representado el 75% del total, y las de carácter correctivo han supuesto el 25%.
Durante la intervención, que ha supuesto una inversión aproximada de 3 millones de euros, “se han introducido mejoras tecnológicas como la sustitución y ampliación de los sistemas automáticos de medida por nuevos equipos de control de emisiones con la tecnología más avanzada existente en el mercado”.
Esta mejora permitirá “un control y un análisis aún más exhaustivos de cada uno de los procesos de las líneas de combustión de la PVE, optimizando su proceso y la limpieza de gases y, en general, el funcionamiento de la planta”.