AIMPLAS desarrolla procesos de síntesis de bioplásticos que los haga competitivos con los tradicionales
Uno de los grandes retos del sector de los plásticos en la actualidad es el de desarrollar biopolímeros innovadores y también nuevos procesos de obtención de los mismos. Procesos que sean eficientes y cuyo resultado sean productos con propiedades similares a las de los plásticos tradicionales competitivos también en precio con éstos.
Para ello, el Instituto Tecnológico del Plástico (AIMPLAS) está llevando a cabo el proyecto SINTEPOL, cofinanciado por Fondos Feder e IVACE. El objetivo principal del proyecto es el desarrollo de nuevas rutas de síntesis y de modificación de biopolímeros en una única etapa mediante procesos de extrusión reactiva. De esta forma se podrían lograr en el futuro procesos de producción, reales y competitivos en el mercado para los biopolímeros.
Concretamente, se pretende ampliar el conocimiento sobre los procesos de extrusión reactiva y sobre la introducción de modificaciones químicas en los biopolímeros para tratar de mejorar sus propiedades mecánicas de manera que los materiales resultantes sean aptos para ser utilizados en aplicaciones altamente exigentes y de alto valor añadido en competencia con los plásticos convencionales.
Durante su desarrollo en 2014, el proyecto SINTEPOL ha trabajado en la mejora de la plasticidad y de la resistencia térmica de los biopoliesteres. Para mejorar la plasticidad del PLA se ha trabajado en dos vías: por un lado a través de plastificantes derivados de ácidos grasos mediante procesos de extrusión reactiva y por otro en la síntesis de nuevos plastificantes para que sean totalmente compatibles con el PLA.