La automatización de la Planta Sierra Sur sitúa a la provincia de Jaén a la vanguardia en materia de tratamiento de residuos
Actualmente, se encarga del tratamiento de los residuos genera – dos en los 97 municipios de la provincia, su totalidad. En el caso de la planta “Jaén-Sierra Sur”, llegan las basuras recogidas en 32 municipios de la zona oeste de la provincia, incluida la capital. En total, unas 125.000 toneladas, atendiendo a unos 325.000 usuarios. Los residuos generados en los 65 municipios restantes son tratados en otra planta ubicada en Linares. En estos dos centros se tratan los residuos no separados en los domicilios, ya que los residuos sí seleccionados por los usuarios, y depositados en los contenedores amarillos, son tratados en un centro de clasificación que Resurja gestiona en la localidad de Ibros.
La planta “Jaén-Sierra Sur” abrió sus puertas en el año 2008. Fue diseñada para el aprovechamiento de la materia orgánica contenida en los residuos sólidos municipales, así como recuperar aquellos materiales reciclables no seleccionados en los domicilios: envases y papel-cartón. En 2018 esta planta ha sido objeto de un proyecto de reforma con el que se ha implementado una tecnología de automatización en la recuperación de los envases, realizando también algunas intervenciones en el resto de procesos que se llevan a cabo en la misma. Con esta intervención está previsto incrementar en un 90% el material recuperado en esta planta. Con este aumento se evitará la emisión al año de unas 14.000 toneladas de C02, cantidad de dióxido de carbono que producen anualmente unos 7.000 vehículos. De esta forma, se triplicará la recuperación del brik y se duplicarán las recuperaciones de PET (tereftalato de polietileno) y PEAD (polietileno de alta densidad. Además, se aumentará en un 20% el papelcartón recuperado.
Proceso
Los residuos recogidos en las diferentes poblaciones, una tarea que se desempeña generalmente en horario nocturno, son controlados y pesados a la entrada de las instalaciones y después depositados en la playa de descarga, donde esperan su procesado, que normalmente se hace al día siguiente en horario diurno. Desde la playa de descarga los residuos alimentan alternativamente dos líneas de tratamiento –cada una de ellas con una capacidad de 25 toneladas por hora–mediante el empleo de una pala cargadora. Al mismo tiempo, el palista de la playa de descarga efectúa una primera selección por tamaños en la que son separados los monstruos, aquellos residuos de tamaño excepcionalmente grande para su tratamiento en las líneas; éstos son depositados en contenedores y trasladados al vertedero.
Plant Report publicado en el nº52 FuturENVIRO Julio 2018