Un grupo de químicos produce biodiésel utilizando aceite frito como base
21 de octubre de 2010
Para obtener biodiésel del aceite, es necesaria la reacción de transesterificación. Los profesores mencionados han recopilado documentación sobre diversas técnicas experimentales que posibilitan dicha reacción y han realizado pruebas hasta encontrar la que resulta más barata, rápida y, a su juicio, adecuada. No necesitan más de una hora para llevar a cabo dicha transformación. Además, han comparado su resultado con el biodiésel comercial, aprovechando que sus propiedades y cantidades son conocidas, demostrando que el producto creado se puede utilizar en la universidad.
Fernando Mijangos, responsable principal del proyecto, destaca las ventajas que el biodiésel, y por lo tanto el producto que han obtenido, tiene respecto al diésel: “Desde el punto de vista de los gases emisores que provocan el efecto invernadero, el biodiésel es mucho más rentable y limpio que el diésel, un combustible fósil que induce al efecto invernadero. Estos aceites fritos, en cambio, no”. Es más, si la técnica con la que han experimentado se implantara en la universidad, no solo su efecto invernadero sería cero, sino que “depuraría” el medio ambiente: “En vez de arrojar los residuos por el fregadero, les proporcionaríamos una solución más limpia. Esa es su mayor ventaja”.
En los meses restantes hasta culminar el proyecto, este grupo de químicos se va a ocupar principalmente de dos asuntos: por un lado, la optimización del producto obtenido, y por el otro, la sensibilización social. En cuanto a esta última, según expresa Mijangos, los datos muestran que solo en 3 de cada 10 casos se recicla aceite. La voluntad de la gente, claro está, es indispensable para que la materia prima recogida sea suficiente como para obtener biodiésel de ella. Los profesores han tomado medidas para concienciar a los alumnos, tal y como explica Anakabe: “Nos pusimos en contacto con la empresa Rafrinor, y nos han colocado un contenedor en la entrada —en el lado derecho— de la facultad, para recoger aceite”. El contenedor se instaló a principios de mayo, y permanecerá ahí durante varios meses, para medir y fomentar la implicación de la gente.