Circoolar logra el residuo casi cero mediante el ecodiseño y su servicio de recogida de ropa laboral para reciclar
El pasado año 2020, la industria textil generó más de 1 millón de toneladas de residuo solo en España, situándose como la segunda industria más contaminante del mundo y la segunda en mayor consumo de agua. Unos datos preocupantes que afectan también a la vestimenta laboral teniendo en cuenta que se estima que cada año se necesitan unos 20 millones de prendas de las que el 90% acaba en vertederos tras su vida útil. Conscientes de ello y con el objetivo de impulsar un cambio radical en esta industria, Circoolar —empresa pionera en ofrecer ropa laboral ecológica, 100% ecofriendly en España— garantizando la reciclabilidad de sus prendas al final de su vida útil mediante un modelo de negocio disruptivo en el mercado de ropa laboral.
La empresa de ropa laboral ecológica cero residuos, operativa desde finales de 2019, utiliza, por un lado, materia prima y tejidos 100% reciclados, regenerados u orgánicos; ecodiseña las prendas para garantizar su futura reciclabilidad en la industria textil; confecciona las prendas en talleres de inserción social y empoderamiento femenino; y garantiza el cero residuo gracias a su servicio de recogida de las prendas al final de su vida útil.
“Nuestro propósito es poder vestir de forma ética y sostenible a las empresas comprometidas —que, por suerte, son cada vez más— permitiéndoles vestir y expresar sus propios valores y generando a su vez un impacto positivo, no sólo medioambiental sino también social”, explica Celina Tamagnini, cofundadora de Circoolar.
En este sentido, según el informe Approaching the future 2020, Tendencias en Reputación y Gestión de Intangibles, la emergencia climática es uno de los asuntos que más preocupa tanto a directivos como a la sociedad. Un 73% de los consumidores demanda a las empresas mayor implicación social y medioambiental y el 67% de los empleados esperan que su compañía se posicione frente al cambio climático.
Cambio de uniforme
Reducir impacto donde antes no era posible
Cada vez son más las empresas dedicadas a reducir el impacto medioambiental derivado de sus operaciones. Solo por citar un ejemplo de una empresa con aproximadamente 500 empleados que necesitan uniformidad (ropa básica laboral), la producción de 1.500 prendas combinadas con poliéster reciclado y algodón orgánico o regenerado Circoolar, se traducirían en:
- 1.430 botellas de PET de 50 ml que no fueron enviadas al mar ni fueron incineradas.
- Ahorro en la huella de carbono (24%) y en el consumo de agua (91%) gracias a la utilización de algodón orgánico.
- Residuo casi cero posconsumo, gracias al ecodiseño y la recogida de las prendas al final de su vida útil y así garantizar una segunda vida (nuevas prendas, textil para el hogar, rellenos de cojines, etc.).
- Impacto social positivo en 20 personas de los talleres de inserción social Km0 y empoderamiento femenino.