Reutilización de los tapones de corcho para generar electricidad
El centro tecnológico Eurecat-CTM (miembro de Tecnio) participa en un estudio que ha conseguido valorizar subproductos generados por la industria del corcho, mediante su aprovechamiento para el tratamiento de aguas residuales del sector vitivinícola y su uso también como combustible para generar electricidad, dentro de la economía circular.
El proyecto, llamado Life Ekorwaste, se encuadra en el objetivo de “buscar que el packaging sea lo más sostenible posible, de modo que se pueda valorizar materialmente y, cuando ello no sea posible, ir a la valorización energética”, señala Frederic Clarens, jefe de Ecología Industrial de Eurecat-CTM e investigador vinculado al proyecto Ecorwaste.
En este caso, se ha hecho una valorización material de los tapones de corcho como absorbente para depuración de aguas y también se ha llevado a cabo una valorización energética para el autoconsumo de las empresas que tienen este material.
El proyecto también ha hecho una cuantificación de la bondad ambiental de ambas vías de valorización, mediante el análisis del ciclo de vida, dado que “siempre es crítico evaluar el retorno medio ambiental de las soluciones que se planteen”, explica Clarens.
La investigación tiene como objetivo, en primer lugar, demostrar la eficiencia de un humedal de tratamiento de aguas residuales de la industria del cava relleno con gránulos de corcho. El corcho se utiliza como material absorbente de contaminantes orgánicos, que son difícilmente eliminables con los sistemas de tratamiento convencionales, y permite mejorar la calidad de los efluentes residuales de las bodegas.
En segundo lugar, se utilizan subproductos del corcho como combustible en un proceso térmico de gasificación para generar electricidad y calor. En este caso, además de reducir los residuos, se genera una fuente de energía térmica renovable con potencial para ser usada en el sí de la misma industria del corcho.
Life Ekorwaste (LIFE14 ENV/ES/460) también tiene la finalidad de fomentar la consciencia social del impacto sobre el medio ambiente que tiene la generación de residuos y de los beneficios de su valorización, mediante la participación social y de agentes implicados, y favorecer la aceptación de la estrategia de valorización desarrollada y su implementación en otras bodegas o sectores industriales.
Liderado por la Universidad Politécnica de Cataluña, con la participación, además de Eurecat-CTM, de la empresa Typsa, el Instituto Catalán del Corcho y del Clúster Vitivinícola Catalán Innovi y con Codorniu como colaborador, el proyecto cuenta con un presupuesto cercano a los 2 millones de euros y está cofinanciado por la Unión Europea en el marco del programa LIFE.