Centro para la Defensa contra el Fuego: un modelo para la prevención y extinción de incendios
En octubre de 2006 el Centro de Defensa contra el Fuego se cambió a sus actuales instalaciones de León, reforzando así sus actividades e incorporando una exposición temática sobre incendios forestales denominada ‘Aula del Fuego’ que sirve de soporte para llevar a cabo las actividades de educación ambiental.
La exposición permanente ocupa una superficie de 660 m2 y ha sido concebida, sobre todo, para acoger visitas de grupos organizados de distintos ámbitos (educativo, profesional, asociaciones…).
El recorrido de la exposición se articula en espacios diferenciados. Primeramente el visitante accede al área de ‘Nuestros bosques’ en el que puede profundizar en el valor de los recursos forestales, experimentar las sensaciones que provoca el fuego forestal (en la llamada ‘Sala Negra’ se proyecta un video con imágenes rodadas durante tareas de extinción) y a revisar las consecuencias directas de un paisaje arrasado por un incendio.
En una segunda zona llamada ‘Defensa contra el fuego’ se ofrece una visión actualizada del problema de los incendios, y de las técnicas y recursos utilizados para la prevención y la extinción.
Como otra zona expositiva, ‘Historias del fuego’ hace un recorrido por la última mitad del siglo XX, recogiendo aspectos curiosos de la lucha contra los incendios forestales.
Un audiovisual que presenta la organización y el funcionamiento de los medios de extinción, y un espacio reservado para exposiciones temporales completan la oferta expositiva del ‘Aula del Fuego’
Formación e investigación
La principal actividad, a día de hoy, del Centro es la formación, impartiendo en estas instalaciones cursos específicos a los miembros del operativo de lucha contra incendios forestales de Castilla y León, y atendiendo demandas formativas de otras entidades de la región u otros ámbitos regionales.
Además, en el Centro para la Defensa contra el Fuego, a través de su equipo técnico, se desarrollan varias líneas de investigación. El mayor esfuerzo se está realizando en el análisis del comportamiento del fuego y en la planificación y desarrollo de los trabajos de extinción.
El conocimiento y análisis de las causas de los incendios forestales constituyen una herramienta esencial para planificar las medidas preventivas. También es una información que ayuda a orientar las estrategias de extinción. Pero determinar las causas de un siniestro forestal no es una labor sencilla.
Según se recoge en el CDF, sólo un 7% de los incendios en Castilla y León tiene una causa natural. El resto, es decir el 93%, se deben exclusivamente a las actuaciones del hombre, que de un modo intencionado o negligente inicia un fuego.