Jornada sobre la pila de combustible en el sector del automóvil
Un mundo sin gasolina
El hidrógeno es una fuente inagotable de energía, si bien no se dispone directamente de ella lo que ha arrojado ciertas "dudas razonables" acerca de su aplicación generalizada. Al margen de su viabilidad, la industria ya ha empezado a considerar los cambios —importantes— que se pueden producir tanto en la industria automovilística como en la auxiliar. Todos estos temas se trataron en una Jornada que organizó la Universidad de Barcelona el pasado mes de abril en Barcelona.
Una jornada organizada por la Fundación Bosch y Gimpera (Universidad de Barcelona) analizó las posibilidades reales del empleo del hidrógeno —la pila de combustible— como fuente de energía alternativa en los transportes. La II Jornada Técnica del Sector del Automóvil tuvo lugar el pasado 23 de abril en el Palau de les Heures (Barcelona).
El encuentro estaba diseñado para ofrecer un fórum de debate entre investigadores y técnicos de empresas y de la administración pública para analizar las oportunidades que ofrece la generación de energía a partir de hidrógeno y las infraestructuras que serán necesarias para que esta tecnología pueda prosperar.
La fundación coordina actualmente el Centro de Referencia de Materiales Avanzados para la Energía (CeRMAE), organismo creado recientemente por la Generalitat catalana y que agrupa a investigadores de la Universidad de Barcelona, la Universidad Autónoma de Barcelona y el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), que incluye la tecnología del hidrógeno entre sus líneas de investigación.
Las ponencias más interesantes para el sector hicieron referencia a la aplicación de la pila de combustible en el automóvil. Francesc Dorca, de la Sociedad de Técnicos de Automoción (STA) habló de las características de un automóvil equipado con esta pila y comparó la viabilidad de los vehículos eléctricos y los vehículos híbridos (los que combinan diversos sistemas de propulsión). También hizo referencia al vehículo de hidrógeno que, desde 1989, desarrollan Mercedes-Benz y la empresa canadiense Ballard.
Por su parte Álvaro Luís, responsable de proyectos europeos del área de pila de combustible de la firma Rücker Ibérica, trató los problemas y soluciones de la implantación de esta tecnología. Los problemas se encontraban, por ejemplo, en la conveniencia de utilizar diseños ya existentes o rediseñar un tipo de vehículo nuevo, con el gasto que comporta.
Francesc Dorca, de la Sociedad de Técnicos de Automoción (STA) habló de las características de un automóvil equipado con esta pila y comparó la viabilidad de los vehículos eléctricos y los vehículos híbridos
Finalmente, Fidel Valle, de Gas Natural, propuso el uso del gas natural en el automóvil (que podría emplearse también para producir el hidrógeno). Valle explicó que la tecnología de este tipo de vehículos está completamente resuelta. Emplea un motor de combustión interna operando en ciclo Otto. El almacenamiento del gas (comprimido a 200 bares) puede hacerse en estado gaseoso a temperatura ambiente o en fase líquida a baja presión. El sistema de alimentación y de control serían electrónicos. La ventaja de este sistema es que existe un variedad de marcas que venden kits de conversión para motores (lo que en la práctica significa que cualquier vehículo puede funcionar con gas natural)
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